A pesar de que es momento de disfrutar del jardín, realizar algunas tareas de mantenimiento nos permitirá extender su belleza
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Los objetivos son variados, pero todos convergen en el deseo de preservar la vitalidad y la belleza de nuestras plantas. Aquí detallamos algunas de las labores para llevar adelante en esta época:
Mantener al día el crecimiento acelerado de algunas plantas como salvias guaraníticas, leucanthas, involucratas y gauras. Suelen podarse hasta la pantorrilla después de las Fiestas para que lleguen al final del otoño de manera presentable.
Podar para mantener el tamaño deseado y evitar plantas avejentadas de enredaderas y arbustos que ya florecieron, como jazmín del Paraguay, de leche, polyanthum y glicinas.
Se puede “peinar” con un guante de cuero las Nassella tenuissima para eliminar los nudos de semillas que se pueden desparramar sobre el cantero para que se resiembren.
Reforzar tutores de cosmos, dalias y malvas . También conviene revisar los de los árboles recién plantados para evitar que se muevan las plantas y entre aire a sus raíces. Podar las cabezas secas de cosmos, cleomes, zinias y verbenas y guardar sus semillas para la próxima estación.
Desmalezar: todo espacio libre con humedad y sol es propicio para su crecimiento. El mulch y los cubresuelos –la Salvia procurrens es una nativa que con humedad se adapta tanto al sol como a la sombra– son grandes aliados para evitarlas.
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