Enredadera, cubresuelo o cerco: una misma planta, múltiples usos

Una especie vegetal puede cumplir funciones distintas según el manejo que le demos. En esta nota, las muchas formas del buxus, el jazmín de leche, las cañas, la hiedra y el puerro.

En el variado universo vegetal, existen ciertas especies de plantas que, según el manejo que se les dé en el jardín, se lucirán distinto e incluso, cumplirán distintas funciones. Así, por ejemplo, una especie se verá muy bonita como enredadera si se la deja trepar por los muros u ofrecerá una generosa sombra si se la guía por una pérgola. Otra, podrá cubrir el suelo allí donde no crece el césped en el caso de que se la deje expandirse al ras del suelo servirá para tapar estructuras verticales. Dará estructura a un espacio o dividirá sectores según las formas que se le den en la poda. Algunas más versátiles que otros, dependerá de la mano jardinera y la mirada paisajística de quien se ocupa de cuidarlas. En esta nota, una selección de cinco especies y las posibilidades que ofrecen en el jardín.

Buxus

(Buxus sempervirens)

Soporta bien el frío y la falta de agua. Se adapta al sol y a la sombra. Es muy utilizado para el arte topiario. Conviene podarlo a principios del otoño y de la primavera para emprolijar e incentivar la brotación. Existen especies y variedades de bajo porte.

Uso 1: Como es un arbusto perenne, el buxus funciona para separar y remarcar espacios, ya que brinda estructura y orden durante todo el año (izquierda).

Uso 2: Apto para contener y dar forma a canteros. En este caso debe plantarse en líneas, a 30 cm entre sí, para conformar una estructura definida (derecha)

Uso 3: Debido a su follaje compacto, es ideal para realizar formas geométricas a través de la poda (izquierda).

Uso 4: Su cultivo en maceta da la posibilidad de incluirlo en patios, balcones y terrazas (derecha).

Jazmín de leche

(Trachelospermum jasminoides)

Tolera muy bien el frío. Puede ubicarse al sol y en media sombra. Su floración, muy perfumada, aparece durante la primavera y el verano.

Uso 1: Puede cultivarse como cubresuelos. Deben plantarse a menor distancia y, a medida que crecen las guías, deben sostenerse contra el suelo con horquillas (izquierda).

Uso 2: Puede trepar sobre pérgolas, donde podrá aprovecharse el perfume y la sombra de su follaje (derecha).

Uso 3: Al ser una enredadera de follaje perenne y de crecimiento prolijo y compacto es ideal para cercos.

Cañas

(Bambusa sp.)

Es de rápido crecimiento y muy rústica. Crecen al sol y en media sombra. Debido a su sistema radicular invasor, hay que plantarla con alguna protección para que las raíces no invadan. Actualmente existe una variedad no invasora.

Uso 1: En espacios urbanos puede plantarse en macetas como pantalla de efecto instantáneo. Soporta el viento de los pisos altos (izquierda).

Uso 2: Puede eliminarse el follaje inferior y formarse como “arbolito”. En poca cantidad dan un efecto escenográfico si son iluminadas desde la base (derecha).

Uso 3: Por su follaje perenne y frondoso es muy utilizada como cerco, para separar y dividir espacios rápidamente.

Puerro

(Allium porrum)

Es de cultivo sencillo a partir de semillas, en almácigo. Resiste el frío. Se desarrolla satisfactoriamente durante el otoño, el invierno y el inicio de la primavera.

Uso 1: En la huerta, se planta en surcos y se debe consumir antes de que florezca (izquierda).

Uso 2: Debido a su floración esférica combina muy bien con gramíneas y herbáceas de floración silvestre en canteros ornamentales (derecha).

Hiedra

(Hedera helix)

Tolera sequías, heladas y distintos tipos de suelos. Es de gran resistencia. Se propaga por división de matas y gajos. Existen especies de follaje variegado.

Uso 1: Debido a que es de follaje perenne, puede usarse para cubrir paredes.

Uso 2: Debido a sus largos tallos es ideal para cubrir estructuras de alambre de múltiples formas, y crear una escultura verde (izquierda).

Uso 3: Puede usarse como cubresuelos, en sitios donde no crece el césped. Debe controlarse ya que es muy invasora (derecha).

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