Un método casero y fácil para lograr plantas nuevas de manera muy rápida y barata.
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Los meses fríos son el momento ideal para preparar algunas hierbas anuales que cultivaremos en la huerta el resto del año: coriandro, eneldo, lavanda o salvia, por mencionar sólo algunas.
La buena noticia es que todas esas plantas se pueden reproducir de manera muy fácil. Álvaro Lamas, estudioso de las aromáticas, comparte su método para preparar nuevas plantas de manera casera: “Se toman brotes de aproximadamente 10 centímetros, se eliminan las hojas inferiores y se colocan en un contenedor (puede ser un frasco) con agua y unas gotas de agua oxigenada”, explica.
“El agua oxigenada actuará como enraizante. Después de unas 3 semanas, los esquejes estarán listos para ser trasplantados”, agrega Lamas. En cuanto al tipo de agua oxigenada, Lamas indica que debe ser líquida y de 10 volúmenes. La proporción indicada es de unas 20 gotas en 1,5 litros de agua.
En términos científicos, el peróxido de hidrógeno actúa como un agente oxidante suave. Aunque en altas concentraciones puede ser perjudicial para las células vegetales, en concentraciones diluidas como las que se usan para enraizar esquejes, puede estimular indirectamente el enraizamiento al proporcionar oxígeno adicional y ayudar a mantener un ambiente aeróbico alrededor de los esquejes. Esto mejora el desarrollo de las raíces.
Además de su efecto desinfectante, el agua oxigenada puede ayudar a controlar ciertos hongos y patógenos que podrían interferir con el proceso de enraizamiento. Esto es particularmente útil en condiciones donde la humedad y la falta de aireación pueden favorecer el crecimiento de microorganismos no deseados.
Un ambiente bien oxigenado (como el que produce el peróxido de hidrógeno) es esencial para el desarrollo de raíces sanas, ya que las raíces jóvenes necesitan oxígeno para metabolizar adecuadamente
Consejos para formar nuevas plantas
- Tomar esquejes de plantas saludables. Cada esqueje debe tener al menos entre 10 y 15 centímetros de largo y de 2 a 3 hojas.
- Hacer el corte justo debajo de un nodo (la parte donde se une una hoja al tallo) para fomentar el desarrollo de raíces.
- Retirar las hojas inferiores que estarán sumergidas en el agua.
- Asegurarse que las herramientas de corte estén limpias y esterilizadas para evitar la transmisión de enfermedades.
- Controlar los esquejes para detectar signos de plagas o enfermedades y actuar rápidamente si es necesario.
- No usar agua oxigenada en exceso, ya que puede dañar las raíces jóvenes y afectar el crecimiento.
- Una vez que los esquejes tengan raíces de al menos 2-3 cm de largo, pueden ser plantados en macetas.
- Después del remojo, dejar que los esquejes se sequen al aire durante unos minutos antes de plantar.
- Plantar los esquejes directamente en la huerta o en macetas en una mezcla de perlita y vermiculita.
- Mantener el medio de cultivo húmedo pero no empapado.
Otros usos del agua oxigenada
El peróxido de hidrógeno también se puede utilizar para limpiar y desinfectar herramientas de jardinería, macetas y otros equipos. Esto ayuda a prevenir la propagación de enfermedades entre las plantas.
Algunos jardineros también utilizan una solución diluida de agua oxigenada para remojar semillas antes de sembrarlas. Esto puede ayudar a prevenir la pudrición y mejorar las tasas de germinación.
El agua oxigenada diluida puede ser efectiva para tratar ciertos tipos de hongos y enfermedades que afectan a las plantas, como el mildiu o el oídio. Se aplica directamente sobre las hojas afectadas para controlar la propagación de la enfermedad.
En sistemas de riego automatizados, el agua oxigenada se puede utilizar para limpiar y desinfectar tuberías y componentes, ayudando a prevenir la obstrucción por algas y bacterias.
LA NACION