Sequía, altas temperaturas, pocas lluvias… Durante los últimos años, las plantas están sufriendo primaveras y veranos calurosos y secos. Estas son las plantas para jardines y terrazas más resistentes.
- 3 minutos de lectura'
Las altas temperaturas que estamos viviendo durante las últimas primaveras y veranos y la falta de lluvias han provocado la sequía en muchas partes del país. Un problema que afecta a los campos, a la agricultura y también a cada uno de nosotros y a las flores de nuestros jardines.
Pero hay algunas flores que, por ser originarias de zonas semidesérticas, soportan las altas temperaturas y no requieren de riegos frecuentes. Serán las que te acompañen fielmente a pesar de las temperaturas y sequías y tampoco te abandonarán en épocas de temperaturas normales porque son fáciles de cuidar.
Si te estás iniciando en la jardinería y querés empezar a llenar tu terraza o balcón de color, estas plantas no te van a demandar tiempo, dedicación, ¡ni agua!
Rudbeckia hirta (rudbeckia)
Es una planta anual de entre 20 y 90 cm de altura, con hojas rugosas y grandes capítulos terminales amarillos o anaranjados con manchas oscuras y el centro bordó. Se siembra en primavera, a pleno sol, en suelos bien drenados.
Existen variedades altas y otras enanas con flores de distintas tonalidades. La Echinacea purpurea, emparentada con Rudbeckia, es una especie perenne, de capítulos rosados con el centro naranja verdoso.
Leucophylium frutescens
Se trata de un pequeño arbusto muy ramificado desde la base, de follaje gris con hojas pequeñas y flores de color fucsia acampanadas.
Crece a pleno sol, en suelos bien drenados y es resistente al frío y las heladas. En otoño es el momento ideal para propagarlo por medio de estacas.
Son flores interesantes para canteros que no se rieguen normalmente o para jardines de zonas semiáridas
Sedum spectabile
Es una herbácea perenne compacta, de entre 40 y 60 cm de altura, vivaz, con tallos y hojas grises, carnosas.
Las flores rosadas o bordó son pequeñas y se agrupan en inflorescencias compactas. Después de la floración son muy vistosas como ramos secos.
Perovskia atriplicifolia
Es una herbácea perenne, siempreverde, de entre 60 y 100 cm de altura, de notable follaje gris con aspecto de lavanda.
Las hojas son grises y muy divididas y las flores, pequeñas, lilas, agrupadas en largas inflorescencias. Ideal para combinarla con gramíneas de mediana altura en los canteros. Se propaga por estacas o por semillas durante el otoño.
Hay que cultivarlas en suelos bien drenados ya que no soportan el encharcamiento
Bulbine caulescens
Se trata de una herbácea rastrera, con hojas carnosas, alargadas, agrupadas en la base de los tallos que producen raíces en los nudos.
Las flores son amarillas o anaranjadas y se presentan en largos racimos. Crece a pleno sol, en suelos bien drenados. Resiste el frío, pero sufre con las heladas fuertes. Se reproduce por división de matas y puede utilizarse en bordes de canteros.
Nepeta mussini
Es una herbácea perenne, siempreverde, con hojas grisáceas con borde arrugado y nervaduras muy notables.
Las flores son lilas o blancas y se presentan en el ápice de las ramitas. Requiere pleno sol y suelos bien drenados. Se propaga por división de matas o estacas herbáceas en el otoño. Para que se mantenga compacta, es necesario podarla a comienzos del invierno.
LA NACION