Mientras los royals posan para las cámaras en los primeros eventos de fin de año, las herederas de sangre azul siguen deslumbrando en su paso por la alfombra roja
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UN LOOK EMPODERADO
Ya hace tres años que las gemelas Amelia y Eliza Spencer (32) desembarcaron en Londres después de haber pasado gran parte de su vida en Sudáfrica. Desde entonces, las modelos e influencers de sangre azul se volvieron protagonistas de la vida social británica gracias a su estilo, su belleza y su pasión por la moda. La semana pasada, las hijas de Charles Spencer desfilaron por la alfombra roja de los Fashion Awards 2024, conocidos como los “Oscar de la moda”, que se celebraron en el teatro Royal Albert Hall, y una vez más se convirtieron en foco inevitable de los flashes.
Las sobrinas de Lady Di deslumbraron con sus looks total black que rápidamente recordaron al icónico vestido que la princesa de Gales lució en 1994, bautizado como el “vestido de la venganza”. Lady Amelia eligió un diseño escote en “V” de hombros descubiertos y ceñido a la cintura, mientras que su hermana optó por una pieza similar, con escote Bardot y detalles drapeados.
El famoso vestido que Lady Di usó hace treinta años se trata de una creación de la griega Christina Stambolian que la entonces princesa de Gales atesoraba en su ropero desde hacía tres años y por cuestiones de protocolo nunca se había atrevido a usar. Sin embargo, ese 29 de junio de 1994 se había hecho pública una entrevista del príncipe Carlos –de quien estaba separada desde hacía dos años antes– en la que confesaba haberle sido infiel durante su matrimonio.
Lejos de refugiarse en su hogar, Diana se enfundó en su sensual vestido y asistió a la fiesta que la revista Vanity Fair daba esa misma noche en la Serpentine Gallery de Londres. De ahí que su little black dress se transformó en símbolo de poder femenino y “venganza”.
CONCIERTO DE VILLANCICOS
Con un escenario mágico y bien navideño –había árboles donados por el rey Carlos III que provenían del Gran Parque de Windsor y adornos sostenibles inspirados en motivos naturales–, la princesa de Gales (42) ingresó junto con su familia a la icónica abadía de Westminster, donde tuvo lugar el tradicional concierto de villancicos.
El evento, uno de los más esperados por los británicos (la televisión lo graba y, luego, es emitido el día de Navidad), está organizado por la princesa de Gales desde 2021 y su presencia este año fue muy especial: fue la primera vez desde que terminó el tratamiento contra el cáncer que asistía a una cita junto con el príncipe William y con sus tres hijos, los príncipes George, Charlotte y Louis.
En la jornada de este 2024 –un programa ecuménico que la princesa llamó “Juntos en Navidad” y que contó con la presencia de artistas– estuvieron presentes los Middleton: Carole y Michael, padres de Kate, y sus hermanos, Pippa y James, que fueron su gran pilar durante su enfermedad. Entre los Windsor, se notó la presencia de Lady Gabriella, la prima segunda del rey Carlos III, quien, desde la muerte de su marido, el financiero Thomas Kingston, había estado alejada de la vida pública.
Luego del concierto [participó el coro de la abadía, Paloma Faith y Restore The Music, entre muchos otros], los invitados recibieron una carta de la princesa Kate en la que decía: “La Navidad es una de mis épocas favoritas del año (…). Este servicio de villancicos es una sentida celebración de cada uno de ustedes y un recordatorio de que, en Navidad, y durante todo el año, debemos brillar por los demás. En tiempos de alegría y de tristeza, todos somos la luz de los demás”.
AL PIE DEL ARBOLITO
El primer paso para las celebraciones de fin de año fue iluminar las plazas, los edificios y las calles de Montecarlo, el 30 de noviembre. Los príncipes Gabriella y Jacques, que el martes pasado cumplieron 10 años, fueron los encargados de oprimir el botón que encendió las luces navideñas, ante la mirada orgullosa de sus padres, los príncipes Alberto y Charlene.
Luego, los cuatro posaron al pie del arbolito armado en un salón del Palacio del Príncipe, junto al hogar en el que los leños fueron reemplazados por velas y regalos envueltos en papel marrón, un color presente también en el sobrio vestuario que la familia real lució en composé.
Los retratos festivos de los Grimaldi son un clásico. Hoy la imagen la preside Alberto, jefe del Estado monegasco. Antes de él fue su padre, Raniero, quien junto a la princesa Grace y sus tres hijos (Carolina, el propio Alberto y Estefanía), sonreía en las postales de Mónaco para saludar por la Navidad.
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