Fue la más mirada de la gala con la que el Rey agasajó al presidente de la República de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, y a su pareja, Tshepo Motsepe
- 2 minutos de lectura'
Vestido y alhajas pueden no decir demasiado. Aunque, también, pueden decirlo todo. Como quedó claro en el primer banquete de gala del reinado de Carlos III, celebrado en honor del presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, y de su mujer, Tshepo Motsepe, que se convirtió en uno de los eventos más cargados de señales desde la muerte de Isabel II. A través de sus looks y sus impactantes joyas, las mujeres de la familia real británica rindieron homenaje –cargado de brillo– a Isabel, pero también a Lady Di. Así, en el Palacio de Buckingham, todos estuvieron atentos a los outfits de la reina consorte Camilla; Sophie, la condesa de Wessex –mujer de Eduardo, el hijo menor de Isabel II–; y, por supuesto, al de la princesa de Gales.
Aunque se mantuvo fiel a su estilo sobrio y elegante, en esta ocasión Kate redobló la apuesta, porque era la primera vez, desde que es princesa de Gales, que se vestía de gala y llevaba tiara. Quienes hasta último momento especularon con qué pieza elegiría se sorprendieron al verla con la Lover’s Knot, considerada la tiara favorita de Diana. Además del brazalete de cuatro filas de perlas de Isabel II, el broche de diamantes estilo art déco de Bentley & Skinner y la Real Orden Victoriana, Kate llamó la atención con sus pendientes: optó por unos de diamantes y perlas del mar del Sur, otro de los preferidos de su suegra. Para muchos, tanto las joyas como el vestido que usó –una creación de Jenny Packham– fueron otro gran guiño a la anterior princesa de Gales: en 1990, Diana se vistió casi igual para un banquete en honor al emperador Akihito de Japón.
Esta gala fue importante para Camilla, ya que también ella llevó tiara por primera vez desde que es reina consorte. Para acompañar su vestido azul Klein, sorprendió con el King George VI Victorian Suite, un conjunto constituido por diadema, collar y brazalete a juego de diamantes y zafiros que pertenecían a Isabel II. La última vez que la soberana los había usado fue en 2015. El King George VI Victorian Suite tenía, para la anterior Reina, un valor muy especial: se lo había regalado su padre con motivo de su boda con Felipe de Edimburgo.
Otras noticias de Revista ¡HOLA!
Milagros Maylin. En su departamento de Palermo Chico, habla de su amor con Horacio Rodríguez Larreta: “Es el hombre de mi vida”
Las mejores fotos. La romántica boda de Milagros Blaquier y Máximo Diez: todos los invitados, los looks y los detalles
Amores de primavera. De Emilia Attias a Poroto Cambiaso, los romances que salieron a la pista
Más leídas de Revista ¡HOLA!
Inés Berton. La sommelier de tés, que conquistó a estrellas de la música y de Hollywood, nos recibe en su casa de San Isidro
Milagros Maylin. En su departamento de Palermo Chico, habla de su amor con Horacio Rodríguez Larreta: “Es el hombre de mi vida”
Al rojo vivo. Juliana Awada deslumbró con un sensual look en la comida de la Fundación Hospital de Clínicas: todas las fotos
Realeza. El acierto fashion de Máxima, la emoción de Kate en su año más difícil y el nuevo logro de la hija de Carolina de Mónaco