La argentina compartió pocas fotos con sus hijos en las que se la ve feliz. El último de los festejos coincidió con el Día de la Madre
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Una mujer que pudo renacer de las cenizas”, así se define Gabriela Arias Uriburu (57), y, a la hora de repasar su historia, los hechos le dan la razón. A veintiún años de haberse reencontrado con sus tres hijos –desde 1997 hasta 2001 no tuvo contacto con ellos porque su ex marido, Imad Shaban, se los llevó ilegalmente a Jordania en medio de un complicado divorcio–, tuvo su Día de la Madre más especial.
La Embajadora de la Paz voló a Londres para acompañar a su hija Zahira (28) en su boda y, pese al extremo bajo perfil que su heredera le imprimió al evento, se conocieron pocos datos de la celebración gracias al propio relato de Gabriela en su cuenta oficial de Instagram. “Fueron tres días intensos e inmensos en Londres (…). El universo lo coronó el día de ayer celebrándose en esta parte del planeta el Día de la Madre”, escribió visiblemente emocionada en un posteo en el que mostró un retrato junto a su hija y otro con sus hijos varones, Sharif (26) y Karim (29).
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