Si te aburriste de la tarta de atún, de la empanada gallega y necesitás hacer rendir el salmón para toda una familia, tu solución es este pastel rápido, simple y muy fácil. La podés hacer una o con dos tapas prefabricadas -si lo querés hacer rápido no da que te pongas a hacer la masa casera, aunque podrías ya que es solo mezclar agua, harina y aceite, hacer un bollo y estirar-. Como en toda tarta la clave está en el relleno, cuando más sabroso lo hagas, mejor. Así que acá te damos una idea básica para que te quede equilibrado, rico y armónico, pero vos conocés el gusto de tu familia, así que no le pongas cebolla si a tus comensales no le gusta, o morrón, sin hay alguien que no lo pasa. Y ponele cilantro por ejemplo, si le querés dar un toque especial o mucho queso rallado si en tu casa es un imprescindible. Ponele creatividad y avanti.
Limpiar los puerros, quitar la raíz y el tallo verde, lavarlos, secarlos y cortarlos en juliana.
Lavar los hinojos, eliminarles la parte superior y la primera capa; lavarlos, secarlos y picarlos.
Lavar el salmón, eliminando las espinas que pudieran quedar, secarlo y cortarlo en daditos.
Calentar 4 cucharadas de aceite en una cacerola amplia y sofreír el puerro y el hinojo durante 10 minutos, removiendo de vez en cuando, y condimentar con la sal y la pimienta.
Romper 3 huevos en un bol amplio, añadir una pizca de sal y batirlos. Agregar el parmesano, el sofrito, los granos de choclo y el salmón.
Untar con aceite un molde redondo. Forrarlo con una de las tapas de masa, recortar el sobrante y verter la mezcla anterior.
Tapar con la otra tapa o dejar abierta y llevar al horno.
Introducirlo en el horno precalentado a 180 grados centígrados y cocerlo unos 40 minutos, hasta que el interior se haya cuajado y la superficie esté bien doradita.
Podés saltear el salmón junto con las verduras en lugar de ponerlo crudo en el relleno.
Comela fría o caliente, en porciones o en cuadraditos para la picada. Queda muy bien con alioli o salsa tártara.