Amasar la harina junto con los huevos y un poco de sal hasta conseguir una masa lisa.
Trabajar con una máquina amasadora, estirar finamente y cortar en trozos irregulares.
En realidad, los maltagliatti (mal cortados) se hacen cuando sobran recortes de otras masas (espaguetis, lasaña, ravioles).
Cocinar la coliflor al vapor hasta que esté tierna. Pelar los ajos y colocarlos en una cacerola junto con el aceite de girasol.
Cocinarlos a fuego bajo (máximo 100ºC) hasta que estén tiernos. Retirarlos y procesarlos junto con 2 o 3 cucharadas del fondo de cocción.
Saltear en una sartén, con gotas de aceite, la panceta cortada en cubos pequeños. Cuando éstos se hayan derretido y estén dorados, incorporar la cebolla cortada en láminas y la coliflor.
Cocinar durante 1 minuto y agregar el radicchio, cada planta cortada en cuartos. Añadir la miel y apagar el fuego.
A último momento hervir la pasta. Luego de escurrida, en caliente, agregarla a la sartén junto con el puré de ajo, la sal, la pimienta negra recién molida y el perejil fresco picado. Servir.