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Receta de Mandioca frita
La mandioca o yuca... ¿cómo se come? Es un gran misterio la mandioca para los que jamás la probaron. Vos vas a la verdulería y ahí la vez, cual troncos de leña, apiladas en un montón y te tentás pero no te animás. Bueno, llegó el momento de que aprendas a cocinar la mandioca porque es muy fácil de prepararla y es un viaje de ida. Más fibrosa que la papa y con un sabor muy especial, difícil de describir, pero, de verdad, rica rica. La mandioca es muy conocida en el litoral argentino y en Paraguay; también en Brasil - si anduviste por sus praias y probaste la macaxeira frita, bueno, eso es mandioca, nada más ni nada menos-. Pocos saben que la mandioca era la base de los platos que se servían en casas y fondas de Buenos Aires, allá por los tiempos de la Revolución de Mayo. Y menos se conocen en estas latitudes los infinitos beneficios nutricionales que aportan su consumo. Misiones es la provincia argentina con mayor superficie de cultivo, seguida por Corrientes, Chaco y Formosa, donde las raíces de mandioca constituyen una fuente básica de la alimentación diaria. Originaria de América, su nombre científico es manihot esculenta y se la conoce también como yuca, aipim, mandioca, tapioca, guacamota, casabe o casava en distintos países del latinoamérica. La evidencia más antigua de su consumo se registra en Perú, donde hay indicios de su cultivo hace 4000 años. ¿Ya aprendiste qué es? Bueno, ahora mirá cómo cocinarla. Primer dato, siempre, primero la tenés que hervir. Ahora sí, a la receta de mandioca frita, más rica que la papa frita.
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Tiempo total: 30 min.
Porciones: 4
