Es una salsa que fue creada en el S17… para terminar con las salsas grasosas. Se creó (y de ahí su nombre) durante la que se conoce como la “guerra de Holanda”, enfrentando a la Francia de Luis XIV y sus aliados contra las Provincias Unidas (eran los Países Bajos españoles constituidos por los países que hoy son Países Bajos, Bélgica y Luxemburgo)
En un bowl de acero o vidrio ir batiendo (con batidor de alambre) las yemas con el agua y el jugo de limón
Cuando este todo integrado llevar a un baño maría suave. Seguir batiendo hasta que la mezcla se espese y se ponga bien espumosa (va a tener más volumen)
En este punto sacar del baño maría, e incorporar la manteca derretida de a poco. Seguir batiendo hasta que se haya incorporado toda la manteca
Salpimentar y servir inmediatamente con huevos, pescado, pollo o verduras
Tip
Para que el baño maría para que sea suave (y no queme las yemas), conviene no dejar hervir el agua. Con un burbujeo leve le va a dar el vapor necesario para calentar sin cocer la salsa holandesa