Los romanos eran muy afectos a lo platos que combinaban miel con vinagre. Con una campiña generosa, los huertos y las aves entraban en mezclas que terminaban valorando más la marinada que el alimento principal. Esta receta de cebollines agridulces es histórica. Te propongo que los hagas con cebollines o con pepinos.
Hervir abundante agua en una cacerola. Poner las cebollitas sin pelar y cocinar 5 minutos.
Retirar del fuego, dejar enfriar y pelarlas con cuidado tratando de dejarlas enteras.
Calentar el aceite en una sartén, agregar los clavos de olor, el laurel y las cebollas peladas. Cocinar 20 minutos a fuego suave removiéndolas frecuentemente hasta que se doren. Condimentar con sal y pimienta.
Levantar la llama, agregar el vinagre y el azúcar y dejar 2 minutos o hasta obtener un almíbar delicado.
Mezclar, retirar los clavos, el laurel y servir frías o calientes.
Podés agregarle uvas verdes a la mezcla de cebollines agridulces.
Queda muy bien presentar los cebollines agridulces con granos de pimientas multicolores en lugar de la pimienta negra.
Esta receta de cebollines agridulces se puede adaptar para otros ingredientes como pepinillos o dientes de ajo bien grandes