El antipasto es una de las más clásicas entradas que se sirven en toda Italia. Su nombre, significa “antes de la comida”. El antipasto italiano clásico es una tabla, bandeja o gran plato lleno de distintos vegetales sazonados fríos, en el que predominan los vegetales como las berenjenas y pimientos (ajíes). Pero también puede incluir muzzarella - mejor si es la bufalina o los boconccinos-, y fiambres - dos perlas del antipasto italiano son la lengua a la vinagretta a prosciutto con alcaparras-. En esta receta de antipasto solamente incluimos verduras frías, pero bien coloridas y perfumadas, para tentarte y abrir el apetito. Si vos vas a querer ponerle más calorcito para este invierno podés sumarle coliflor frito, corazones de alcahuciles hervidos, con ajo y perejil, morrones asados, todo eso tibio, como para darle más saciedad a este antipasto completito. Con unos panes calentitos ya tenés la comida resuelta. Anotá nuestras ideas para este antipasto clásico italiano y... ¡A disfrutarlo!
Lavar y secar las hojas verdes. Cortar groseramente con las manos y reservar en la heladera.
En un cuenco profundo colocar una cucharadita de sal fina y un poco de pimienta negra recién molida. Incorporar ¼ de taza de vinagre de manzana y batir ligeramente con un batidor de alambre.
Luego, agregar en forma de hilo ½ taza de aceite de oliva. Emulsionar y condimentar con hojitas de menta fresca finamente picadas.
Grillar sobre una plancha caliente, con unas gotas de aceite de oliva, los ajíes enteros, las berenjenas cortadas en rodajas, los choclos enteros pelados y los tomates cherry. Retirar, dejar enfriar, desgranar el maíz y mezclar todos los vegetales con las hojas verdes.
Condimentar con el aderezo de menta y espolvorear la preparación con huevo duro picado. Se puede rociar con un poco de aceite de oliva extra.
La clave de un antipasto es que te entre por lo ojos: servilo en una bandeja grande, con los aderezos en sus potecitos en el medio de las verduras o como te parezca más lindo. Lucite con un buen foodstyling para tus fotos de las redes sociales.
Otra clave del éxito del antipasto clásico italiano: abundancia. Tiene que haber variedad y cantidad. Que alcance para que todos prueben todo. Como en una buena picada.