Ideal como entrada, como snack fresco para cualquier momento del día, como guarnición o como vegetal fresco para un sándwich de ave. El apio es un vegetal noble, rico, crujiente, perfumado. Los que aman el apio sabe de qué estamos hablando. Estos apios al alioli crudos (pero también puede ser con un golpe de horno) son muy pero muy fáciles de hacer. Lo único difícil, tal vez, es conseguir esa planta de apio grande, blanca, fresca y limpia para poder disfrutar de esta preparación. No da el apio todo mustio o finiiiito, que solo sirve para perfumar una salsa o una sopa de verduras. Estos apios al alioli necesitan sí o sí una planta impecable, si es orgánica mucho mejor, por supuesto. El sabor de la verdura en esta receta es el 80 por ciento de su éxito. Y que lo laves bien, y que esté crujiente o sea que sea un apio joven. El alioli que vas a encontrar en esta receta no es el verdadero alioli al mortero que se hace solo con oliva y muchísima paciencia para pisar y pisar. Es una invención rápida de ajo y mayonesa que es para dipear con este apio apelando más a la practicidad que al espíritu gourmet. Mirá cómo hacer estos apios al alioli. Ah, además, son bajísimos en calorías.
2 dientes de ajo procesados o licuados con un poco de mayonesa
Preparación
Limpiar el apio separando las pencas. Cortar las puntas, quitar con un pelapapas las fibras y lavarlas.
Colocar las pencas en una cacerola con abundante agua, el jugo de limón, sazonar y llevar al fuego hasta tiernizar. Escurrir, dejar enfriar y disponer en una fuente honda.
Mezclar en un bol la mayonesa con los ajos y distribuir sobre las pencas. Servir.
En lugar de mayonesa podés hacer estos apios al alioli con un queso crema light.
Para suamar vegetales podés acompañar estos apios al alioli con bastones de zanahoria, hojas de hinojo y bastones de pepino.