En el vértice del barrio, entre la vorágine cool de Palermo Soho y el señoral Palermo Botánico, renace empujado por los desarrollos inmobiliarios Palermo Sensible o Villa Freud, un área que debe su nombre a la cantidad de psicólogos que desde mediados de los sesenta establecieron allí sus consultorios, así como las librerías especializadas que se abrieron y hasta bares cuyos nombres aludían a la disciplina.
A fines de los ochenta los profesionales comenzaron a esparcirse por toda la ciudad o ingresaron en los hospitales al tiempo que todo porteño a la moda peregrinaba hacia la zona Norte del barrio. Aunque la mística freudiana hoy sea apenas un recuerdo –en 2006 un legislador quiso sin éxito renombrar dos cuadras de la calle Mansilla Sigmund Freud– la zona recibe en la actualidad nuevos vecinos que llegan atraídos por las construcciones que se repiten en cada manzana con unidades que van desde los monoambientes hasta los cuatro ambientes. Oferta que arranca con precios desde los US$3000 el metro cuadrado, que aumentan al menos 10 por ciento por año dependiendo el tipo de emprendimiento.
Ubicado entre las avenidas Scalabrini Ortiz, Santa Fe, Coronel Díaz y la calle Honduras, el corredor se destaca por la convivencia armónica de casas bajas, edificios de larga data y nuevos desarrollos con amenities y hasta características sustentables. Dos plazas, calles arboladas, la cercanía a las líneas de subte D y B, una decena de líneas de colectivos que la atraviesan y el encanto del boulevard Charcas hacen de la zona una de las más buscadas por el segmento que apunta a la tranquilidad, comodidad y distinción, pero no puede acceder a las locaciones premium."Los drivers del área son la conectividad, además de la oferta de medios de transporte: las arterias permiten una salida rápida de la Capital Federal. La zona es un cheque al portador para el inversor, es un área de productos muy líquidos y buscados por la demanda del interior", afirmó Alejandro Schuff, director de Soldati Propiedades. La compañía comercializa Om Botánico, el edificio desarrollado por Northbaires ubicado en Araoz y Santa Fe –cruzando esta avenida– con unidades que van desde uno hasta cinco ambientes, que se entregará en octubre de 2020, en el que el valor del metro cuadrado promedia los US$3000 y los tickets parten desde los US$145.000 con la posibilidad de financiarlos. "Es una zona consolidada principalmente por la ubicación. Está muy construida, hay mucho edificio hecho y estás cerca del foco del shopping. En los últimos años el límite se fue corriendo a la avenida Córdoba", agregó Hernán Siwacki al frente de la comercializadora Capital Brokers Propiedades. En la actualidad, Capital Brokers tiene dos proyectos para entrega inmediata y tres en ejecución para adquirir de pozo. Esta última modalidad se comercializa desde US$2700, el metro cuadrado bajo dos tipos de formas de pago al costo: ajustable de acuerdo al índice de construcción que elabora la Cámara Argentina de la Construcción (CAC) o según costo real, más incierto y que requiere de la confianza de los compradores en el desarrollador y una buena administración del proyecto.
En el edificio ubicado en Honduras al 3800 se pueden conseguir unidades listas para habitar de tres y cuatro ambientes desde US$237.000. Los tamaños oscilan entre los 57 y 70 metros cuadrados o pisos de 135 metros cuadrados. También para entrega inmediata, en la esquina de Güemes 3800 –beneficiado por la iluminación natural que le brinda la orientación externa de la construcción–, el edificio de nueve pisos con gimnasio, jacuzzi, solárium, SUM con office y parrilla tiene disponibles unidades de uno y dos ambientes, de entre 35 y 50 metros cuadrados de superficie, desde US$125.000.
Para entregar en 2019, hay tres opciones en Mansilla al 3900, Güemes 3700 y Julián Álvarez 2300. En el primer caso se trata de un edificio de nueve pisos con unidades de uno y dos ambientes de entre 27 y 57 metros cuadrados. Se comercializan desde US$83.300. El segundo desarrollo ofrece monoambientes y departamentos de dos ambientes de entre 27 y 35 metros cuadrados a partir de US$77.000 dólares, se pueden abonar mediante un 50 por ciento al momento de firmar el boleto y el saldo en 24 cuotas ajustables por el índice CAC. En tanto, el edifico de Julián Álvarez es un proyecto lanzado bajo la figura de fideicomiso al costo. Consta de diez pisos con unidades de uno y dos ambientes de entre 37 y 59 metros. Las viviendas tienen un precio base de US$99.300. Siwacki destacó que, si bien no se trata de zona ABC1 enfocada en la avenida Libertador, "es el primer corredor que le sigue a la ubicación premium. El que desea una propiedad por Palermo o Barrio Norte te va a buscar cerca de esta zona. La avenida Santa Fe divide porque hacia el río es un poco más caro".
Entre los puntos a destacar del área figura el boulevard Charcas, que se extiende entre la avenida Coronel Díaz y la calle Jerónimo Salguero, donde desemboca en la Plaza Güemes con la característica Basílica del Espíritu Santo en uno de sus laterales. En menos de 10 kilómetros cuadrados Palermo, Sensible alberga dos espacios verdes y cuatro templos, dos dedicados al culto católico, uno al armenio y otro al ortodoxo ruso.
En las cuatro cuadras que ocupa el boulevard, casi como un oasis que se abre desde la bulliciosa Santa Fe, crece un polo gastronómico donde se puede disfrutar de las anchas veredas, el frondoso arbolado y algunas esculturas. El toque ecológico llegó a principios de los noventa gracias a un grupo de intelectuales y artistas que comenzaron a plantar los primeros árboles en el lugar. La tranquilidad y el encanto de esta calle se traducen en la revalorización del valor del metro cuadrado.
De acuerdo a un relevamiento realizado por el sitio de búsqueda de inmuebles Properati sobre el boulevard hay actualmente 22 departamentos a la venta con un precio promedio US$3816 el metro cuadrado. En cambio, si se busca una propiedad en un radio de 500 metros, la cifra trepa a 388 unidades disponibles con un valor promedio de US$3439 por metro cuadrado.
Cynthia Edenburg, gerenta de ventas del sitio, sostuvo que no es casual esa diferencia de precio ya que los bulevares les dan un toque distintivo a las propiedades. "Por un lado, la cuestión estética es muy importante; es una calle linda para vivir, que además realza las vistas de los departamentos que dan a la calle. Por otro lado, es un espacio verde justo bajo de la casa. No es un parque, pero es muy valorado por los vecinos", afirmó. "Además, este tipo de calles suelen ofrecer variedad de comercios, generalmente gastronómicos, muy a tono con lo que la gente busca al mudarse a una zona tranquila y verde", agregó.
Por su parte, desde el ministerio de Ambiente y Espacio Público y la secretaría de Transporte porteña detallaron que en los últimos años se construyeron cuatro ciclovías en Palermo Sensible, se emplazó el mismo número de estaciones de Ecobici y se realizaron dos intervenciones peatonales –en la avenida Coronel Díaz y Honduras, y en el eje Gascón en Honduras, El Salvador, Costa Rica y Aráoz– con el objetivo de innovar en el diseño de los cruces de las calles al incorporar elementos del traffic calming –estrechamientos de calzada, rotondas, macetas, pequeños desvíos, isletas– y reducir así la velocidad de los vehículos e incrementar la seguridad para peatones y ciclistas.
Inversión para vivir
"Hay una tendencia que se viene sumando: apuntar al nuevo consumidor que es el que va a vivir, el que realmente lo va a usar. Por eso se está buscando optimizar los proyectos para hacer departamentos más grandes", indicó Siwacki de Capital Brokers.
La inmobiliaria Migliorisi comercializa el emprendimiento ubicado sobre la calle Julián Álvarez al 2200. El departamento posee unidades de uno, dos y tres ambientes y dúplex. "Esta tan armado y tan completo que está pensado para el que necesita tener espacio y vivir cómodo", detalló Diego Migliorisi, al frente del negocio.
También comercializan edificios con unidades de uno y dos ambientes como el ubicado en la avenida Scalabrini Ortiz al 2000, a tres cuadras de Santa Fe, con entrega en 2020. Este emprendimiento se caracteriza por el revestido en ladrillo de su exterior y los balcones de cada vivienda, que establecen un juego rítmico a medida que se mira hacia arriba. Como bonus, desde el SUM se tiene una vista panorámica del Parque Thays.
En los últimos años, evaluó Migliorisi, se incrementaron los compradores que provienen del interior y los extranjeros que diversifican sus carteras de inversión con bienes raíces argentinos, especialmente en los barrios de Palermo y Recoleta. Otra tendencia que destacó fue el desembarco de los edificios con características sustentables como dispositivos para reciclar el agua de lluvia, huertas en las unidades y paneles solares. "Si bien no representa un ahorro total de energía, suma en la factura", concluyó.