Hay compañías que se dedican a cerrar los contratos directamente con las empresas
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A pesar de que la pandemia impulsó el trabajo a distancia, aún sigue siendo imprescindible la presencia física de empleados claves o de altos cargos en las compañías. Esta necesidad impulsó a que las empresas dedicadas a la gestión de alquileres temporarios se vuelvan estratégicas para los departamentos de recursos humanos de las grandes empresas que necesitan encontrar localizaciones en tiempo récord y atendiendo las necesidades de quienes necesitan mudarse de ciudad e incluso de país.
“Lo que más requieren los ejecutivos es estar ‘walking distance’ de su lugar de trabajo, en las áreas de las ciudades más seguras”, comenta Yanina Núñez, cofundadora de Hoihou, empresa de alojamiento temporario corporativo. La emprendedora explica que “la empresa analiza el perfil de la persona y asigna ciertos criterios para la búsqueda de la propiedad: establece qué zona, el presupuesto disponible y los requerimientos, que pueden ir desde un departamento con lavarropas, estacionamiento, gimnasio y servicios hasta una casa lista para habitar por una familia, cerca de colegios y con buenos accesos al lugar de trabajo del ejecutivo”, explica. Además, detalla que, en la Argentina, los lugares más requeridos para vivienda de empleados son Buenos Aires (todo el corredor norte desde Puerto Madero hasta Núñez y Nordelta), Neuquén, Rosario y Córdoba. Fuera de Argentina lo más buscado es Uruguay, Chile, Perú, Estados Unidos y España.
Respecto a las tipologías, Núñez detalla que requieren desde departamentos de un dormitorio o de dos para tener más espacio cuando reciben a la familia de visita. En cuanto a tiempos de estadía, asegura que las unidades pueden rentarse desde quince días hasta por un año. Hay que tener en cuenta que la propiedad debe entregarse para alquiler con todas las comodidades: totalmente equipado, con ropa de blanco y toallas. “Además se hace una inspección previa a la llegada del ejecutivo y tomamos fotos que se adjuntan a la firma del inventario. En caso de haber alguna rotura o faltante la empresa o ejecutivo responden sobre la misma para reponerla o pagarla”, sostiene Núñez.
En esta dinámica corporativa, por lo general suelen alquilarse más departamentos que casas. En cuanto a los costos, existen grandes diferencias entre las ciudades, países y barrios. “Solo a modo de ejemplo, en Buenos Aires, podemos encontrar departamentos de un dormitorio desde los US$750 en Recoleta, hasta US$2200 en Puerto Madero por mes (se cotiza en dólares, pero se paga en pesos al tipo de cambio oficial vendedor del Banco Nación). Mientras que, en Chile, un departamento de un dormitorio en Las Condes arranca en los US$1700 y en Uruguay, uno de las mismas características en Punta Carretas o Puerto del Cubeo, se consigue desde los US$2700”, señala la emprendedora. Asimismo asegura que estos valores mensuales, incluyen todos los servicios (expensas, luz, gas, ABL, etc.) y los precios se pagan por adelantado mes a mes. “Al estar los precios dolarizados y pagarse al tipo de cambio del Banco Nación, si el dólar aumenta también lo hace el alquiler mensual. Se toma la moneda dólar a modo de poder mantener el mismo precio durante todo el contrato. De esta manera no realizamos ningún ajuste”, aclara.
Según la emprendedora, la demanda de este servicio por parte de las empresas es cada vez mayor porque no solo se ofrece para largas estadías mayor confort y seguridad sino porque también representa un ahorro de costos del 40% en comparación a lo que cuesta alojar a los ejecutivos en hoteles. La relación es win win: para los propietarios es una alternativa tentadora sumar su inmueble al alquiler corporativo: deja una rentabilidad que supera al 100% de los precios de mercado de largo plazo, además de tener el respaldo de la empresa a la cual pertenece el ejecutivo detrás.