Lunes 9.30 hs. Poco antes de subir al escenario de uno de los principales salones del CCK, para anunciar las nuevas medidas; Iván Kerr, el secretario de Vivienda, accede a un mano a mano con la nación. "Hay que cambiar el paradigma de un Estado constructor a uno facilitador", insiste el funcionario, convencido de que el "enorme" déficit habitacional de la Argentina que se estima en el 25 por ciento de la población, no se resuelve únicamente con la construcción de viviendas sociales a través del presupuesto del Estado. "El problema es que la cantidad de viviendas que el Gobierno genera siempre es menor al crecimiento vegetativo de la población y la manera de solucionarlo no es con más recursos del Estado sino incentivando al sector privado para que se anime a construir los emprendimientos que la demanda necesita, es decir proyectos para el sector medio que puedan comprarse con crédito hipotecario", analiza.
-¿Qué está haciendo el Gobierno?
-Trabajamos en medidas que les permita a los desarrolladores generar proyectos que les resulten rentables. Estamos reglamentando desde la Secretaria la devolución del 10 por ciento del IVA sobre el precio de la unidad vendida siempre que no supere los 140.000 UVAs. Además creamos un fondo de garantía porque sabemos que cuando la pyme va a buscar al financiamiento intermedio no puede acceder con su propio patrimonio. El problema del déficit habitacional lo tenemos que solucionar entre todos, involucrando al sector financiero, los desarrolladores y el Estado poniendo las condiciones bien claras.
-Además implementaron el boleto digital
-La registración del boleto ya había sido sancionado por decreto y logrará abaratar el costo de la vivienda, además de permitirle al desarrollador que construye, venda y no tenga la necesidad de quedarse un año y pico esperando que salga el título de la propiedad, la subdivisión y la escritura. Ahora la gente podrá comprar desde el pozo un fideicomiso al costo con crédito. Analicemos la contradicción: comprar desde el pozo es una posibilidad para un sector de la población que tiene atesoramiento y la posibilidad de pagar un departamento durante 24 meses en dólares, mientras que quien necesita crédito para comprar con un plazo de 20 o 30 años no puede hacerlo. Con el boleto tratamos de solucionar eso. El Banco Central, por su parte, generó una modificación que habilita que ese tipo de garantías, es decir los boletos registrables, se conviertan en un aval suficiente como para que los bancos puedan prestar. Además trabajamos con la Cámara Inmobiliaria Argentina en un formato para digitalizar ese boleto de compra venta y se logró que los corredores sean agentes de registro digital. Es decir, ese boleto con las firmas digitales se puede inscribir directamente en el registro. Esta operación abrevia pasos y no se necesitaría a un escribano en esa instancia. Así, los desarrolladores puedan vender al consumidor final desde el pozo y el ahorro de los costos se reflejará en los precios finales.
-¿De cuánto ahorro hablamos?
-Cuando uno compra en pozo, se ahorra hasta 30 por ciento, además en el momento del boleto no se pagaría el 2 por ciento del costo de la escritura. Por supuesto que en el largo plazo, se pagara. El banco otorgaría un préstamo a 20 o 30 años, un par de años serán contra garantía de boleto y después sí se hará la hipoteca de la unidad. La ventaja es que incluso, el costo de la escritura se puede incluir en la financiación del crédito.
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