

Los inversores, se distinguen del resto de los mortales, por su aguda y analítica mirada del sector y por la audacia que muestran a la hora de buscar nuevas zonas y oportunidades. Ellos son los que abren la puerta o instalan nuevos mercados en el mapa comercial. En la actualidad uno de los rincones de la provincia de Buenos Aires en el foco de quienes están líquidos es Parque Leloir, la zona del corredor Oeste en la que en los últimos tiempos se multiplicó la oferta de locales dando origen a un incipiente polo gastronómico.
Allí en ese sector del Gran Buenos Aires donde domina el verde y que históricamente se lo distinguió por los restaurantes dedicados a las parrillas hoy augura un futuro gastronómico mucho más rico y hasta con toques gourmet. "La llegada de nuevos vecinos y de proyectos tanto residenciales como comerciales –complejos de oficinas– impulsó el desembarco de primeras marcas del sector gastronómico. Se comenta que en breve podremos disfrutar de importantes firmas, que hasta hace un tiempo sólo era posible acceder en localidades como Ramos Mejia o en la Capital Federal", explica Ricardo, uno de los nuevos residentes de Parque Leloir.
Según Gustavo Romay, CEO de Romay Desarrollos Inmobiliarios, este crecimiento no resulta sorpresivo. "Parque Leloir siempre fue la zona más aspiracional del Oeste ya que cuenta con el mejor entorno en cuanto a vegetación y también ofrece una ubicación central dentro de esecorredor, además de tener una muy buena accesibilidad por su cercanía con el acceso Oeste y con el Camino del Buen Ayre", relata el desarrollador.
Esta zona del corredor Oeste bonaerense que perteneció al hacendado Alejandro Leloir cuenta con un parque de aproximadamente 70 hectáreas –proyectado por el afamado paisajista Carlos Thays–. Se trata de una reserva natural protegida que presenta un entorno agreste, con arboleda muy añeja y –según los expertos– un microclima único. "Un look & feel , similar al de Carilo o Dardo Rocha", afirma Romay.
Las primeras firmas que llegaron al lugar lo hicieron hace ya algunos años pero el gran vuelco comenzó a gestarse en los últimos 24 meses. "Esta tendencia que se observa en la zona se comenzó a experimentar fuertemente en los últimos dos años. Actualmente conviven en la zona importantes espacios gastronómicos, entre los que se destacan: Café Martínez, Almacén de Pizzas, Sushi Club, Bonafide, Burguer King y Freddo, entre otros. Pero estos no fueron los únicos que se animaron a instalarse en el lugar. El principal crecimiento se observa en la arteria más importante del lugar, la avenida Martín Fierro. Ésta se consolidó como un polo gastronómico de calidad segmentado a un público para mayores de 30 años", afirma Romay, y agrega: "Allí también se encuentran el Santander Río, Banco Galicia, Shell, El mercader, Tiprendo, La Gueya, Conrado, Gardenias, Bruce, Farmacia Central Oeste y concesionarias como Honda, Toyota, Chrysler, Nissan, Ford, Peugeot, Renault, Citroen y Yamaha, entre otras marcas".
En los primeros 1000 metros de la avenida Martín Fierro coexisten unos 60 locales de diferentes rubros, con espacios cuyos metrajes varían entre los 100 y 350/m2 de superficie. "Allí el valor de los locales parte desde los US$20/ m2 para el alquiler y US$4500/m2 para la compra. Los especialistas coinciden en que en los próximos años, con la consolidación de la zona, la revalorización del m2 llegará al 30 por ciento. Hay casos de venta de locales muy bien ubicados que han llegado a defender valores de venta de US$6500/m2 donde la evolución es del 44 por ciento", afirma Romay.
Uno de los pioneros
"Fuimos uno de los pioneros de la zona. Cuando o compramos la propiedad ubicada en la avenida Martin Fierro ni siquiera era boulevard, como en la actualidad, y no estaba desarrollada como centro comercial. Esto fue en 2004, en aquel entonces nos costó mucho convencer al management de Bonafide. Pensamos en que el local que construiríamos debía responder a los intereses de la comunidad y respetar el entorno de reserva ecológica, por eso la edificación se hizo con materiales que tuvieran en cuenta el entorno y como punto diferencial le hicimos hacer un hogar a leña. Y los clientes rápidamente se apropiaron de nuestra propuesta", comenta Gustavo Vernino, socio Gerente Scaver Food SRL, la empresa que maneja Bonafide en el polo de Parque Leloir. El empresario agrega que "cuando empezamos con el proyecto de armar un negocio gastronómico siempre entendimos que Parque Leloir era la zona, primero porque nos encanta y luego porque es lo más aspiracional del Oeste con el mejor entorno y una inmejorable ubicación dentro del corredor Oeste. Sabíamos que nos íbamos a transformar en un punto de encuentro". El crecimiento del área también impulsó el desembarco de una importante cadena hotelera del mundo que instalará su marca en un desarrollo de usos mixtos que comprende: un centro de convenciones, oficinas AAA, centro de salud, parking subterráneo para 600 cocheras, plaza comercial con oferta gastronómica de marcas internacionales y residencias con servicio de hotelería. •