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Al momento de buscar una casa, las personas analizan diversos aspectos de la propiedad, pero una cuestión clave es saber cuál es la antigüedad de la vivienda. Algunos compradores desconfían de las casas que tienen muchos años ya que estiman que requerirán demasiado trabajo o que quizá la decoración y el estilo del inmueble está desactualizado.
El desafío de rejuvenecer una propiedad corre tanto para los propietarios que quieren vender como para los futuros dueños . Para lograrlo, hay algunas claves que ayudarán a lograr el objetivo : dónde poner el foco.
La entrada, la mejor presentación
Tener el frente de la casa en buenas condiciones es la mejor presentación de una propiedad . El pasto corto, las veredas limpias y en buen estado y las persianas pintadas son los tres puntos fundamentales.
Pintar las puertas y las paredes
El paisaje, un factor clave
Los ambientes de una propiedad y sus comodidades no son las únicas cosas que le importan a un comprador, sino que también el estado del jardín, el cuidado del pasto y las plantas es algo que a los interesados en la casa le prestan atención.
Tras la pandemia, la búsqueda por espacios abiertos, con buena luz natural y plagado de colores son muy tenidas en cuenta a la hora de elegir una vivienda. El atractivo exterior lo es todo para la primera impresión, por eso cortar el pasto, rastrillar las hojas y podar los arbustos es fundamental.
La puesta en escena, la mejor forma de vender
Una buena puesta en escena que tenga en cuenta la posición de los muebles, el orden en los ambientes y la buena iluminación de los espacios internos es clave para la recepción de posibles compradores de la casa.
Hay que tener en cuenta que las salas que siempre están bajo la lupa de los interesados en la propiedad son el living, la sala de estar, la cocina y el comedor, por lo que la buena presentación de los mismos es muy importante.
Revisar el buen funcionamiento de los servicios
Los dueños de la propiedad en venta deberán realizar una inspección profesional de la vivienda. Muchos contratos de venta se caen debido a los resultados de la inspección de la casa de un comprador.
Obtener una inspección de la casa antes de ponerla en venta es como realizar un examen final antes del día de la prueba real, por lo que la ventaja de hacer una revisión es la oportunidad de solucionar cualquier problema particularmente problemático o hacer reparaciones simples para que los compradores puedan concentrarse en los aspectos positivos que su casa tiene para ofrecer.
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