En celebración del décimo aniversario de “El Hobbit: un viaje inesperado”, los fanáticos de Tolkien podrán tener una estancia exclusiva en el icónico set de filmación en Nueva Zelanda.
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“En un agujero en el suelo, vivía un hobbit. No un agujero húmedo, sucio, repugnante, con restos de gusanos y olor a fango, ni tampoco un agujero seco, desnudo y arenoso, sin nada en que sentarse o que comer: era un agujero-hobbit, y eso significa comodidad”, son las primeras líneas de la mítica obra escrita por J.R.R. Tolkien: El hobbit. Autor de la icónica saga de El señor de los anillos, tanto las novelas como las adaptaciones de Peter Jackson convirtieron a la Tierra Media un lugar que miles quisieran habitar.
Tal como describe Tolkien al principio de su exitosa novela, vivir en un agujero hobbit es una experiencia placentera. Su autor los imaginaba como moradas acogedoras, rodeadas de ventanas circulares, paredes revestidas de madera y suelos enlosados y alfombrados. Afortunadamente, cuando el director de ambas trilogías pensó cómo se filmarían los distintos lugares de la Tierra Media, Hobbiton (el hogar ficticio de los hobbits) fue traído a la vida ladrillo por ladrillo, en vez de utilizar computadoras y efectos especiales como fue el caso de otras locaciones.
Situado en una granja familiar en Nueva Zelanda, Jackson supo inmediatamente que ese era el lugar indicado cuando visualizó los pastizales ondulantes durante una búsqueda aérea. El decorador del set, Alan Lee, comentó que las colinas del lugar “parecían como si los Hobbits ya hubieran comenzado las excavaciones”. Después de negociaciones adecuadas con los propietarios, se comenzó a trabajar para transformar parte de la granja en escenarios para Hobbiton y otras partes de la Comarca en 1999.
En total se construyeron 37 agujeros hobbit, jardines, un molino y un puente de doble arco. La construcción más impresionante fue la de un roble de 26 toneladas que fue talado y recreado en el sitio completo con hojas artificiales. Tristemente, el set original no había sido construido para durar, por lo que las fachadas del agujero de hobbit se derrumbaron parcialmente después de la filmación.
Sin embargo, cuando Jackson comenzó los preparativos para filmar las películas basadas en el libro El hobbit, el set se reconstruyó de forma más permanente. El hobbit: un viaje inesperado se estrenó en 2012, y diez años después, en su aniversario, uno de estos agujeros hobbits estará disponible para reservar por primera vez en Airbnb.
La experiencia de vivir como un hobbit
Aunque el set de filmación siempre estuvo abierto al público, nunca antes nadie había tenido la oportunidad de pasar una noche en la Tierra Media. Los fans tendrán la oportunidad de vivir como Bilbo Bolsón y hospedarse en La Comarca como parte de una estadía de una noche en Hobbiton, en la locación original de la película, ubicado en los pintorescos pastizales de la región de Waikato en Nueva Zelanda, en una granja de 2500 hectáreas.
Con tres estadías individuales disponibles de dos noches para hasta cuatro huéspedes, las personas ya pueden solicitar reservas para marzo de 2023: una del 2 al 4, otra del 9 al 11 y la última del 16 al 18. Con un precio de US$10 dólares neozelandeses por noche, los visitantes tendrán acceso a 44 agujeros hobbit, al Molino, a la icónica posada Green Dragon Inn y otros lugares que forman parte del mundo de Tolkien. A esta espectacular experiencia se le sumará un recorrido privado del detrás de cámaras.
Cada alojamiento, que contará con dos dormitorios, fue curado por el director de arte de la película, Brian Massey, e incluye un rincón de escritura digno de un hobbit. También tendrán acceso a un banquete nocturno en la posada con un festín que incluye estofado de carne y cerveza, pollos enteros asados, panes recién horneados y mucha cerveza, además de las comidas típicas de un hobbit, como un Segundo Desayuno y Elevenses, servidos todos los días.
Cómo reservar
Desde el martes 13 de diciembre ya se puede reservar una estadía a través de la página airbnb.com/hobbiton. Los huéspedes deben tener un perfil de Airbnb verificado, un historial de críticas positivas y ser mayores de 18 años. La ocupación máxima es de cuatro personas. Se configuran dos habitaciones, con una cama queen y las otras dos king-singles.
Los huéspedes son responsables de su propio transporte hacia y desde Auckland, Nueva Zelanda. Se proporcionará transporte de ida y vuelta en automóvil para el viaje de dos horas entre el aeropuerto y la propiedad.
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