En un mano a mano con LA NACION, el arquitecto de la que podría ser la nueva cancha de Boca Juniors anticipó cómo se diseñó el proyecto para convertirlo en el estadio más grande del continente
- 8 minutos de lectura'
Para un hincha, no hay experiencia más satisfactoria y apasionada que ver a su equipo jugar de local. Con sus colores plasmados en el estadio y en cada camiseta, la energía de los fanáticos argentinos es motivo de noticia en todo el mundo. Pero no todos tienen la posibilidad de acceder a sus templos. Es por eso que en Boca Juniors hace años que se plantean y replantean distintas formas de agrandar la capacidad de su estadio, La Bombonera.
Recientemente trascendió la última propuesta en salir a la luz. Se trata de la iniciativa del candidato opositor Jorge Reale, empresario mendocino, quien puso sobre la mesa la posibilidad de construir una cancha de Boca en otro lugar del emblemático y homónimo barrio. Tan solo 1300 metros separarían la tradicional Bombonera de la nueva sobre una parcela de 12 hectáreas de la Isla Demarchi en el extremo sur de Puerto Madero, a la cual se accedería por tres puentes a construir que continúan de las calles Aristóbulo del Valle, Pinzón y Brandsen. Hoy en día, a la isla cercana a donde funcionó la ex Ciudad Deportiva de Boca Juniors en las décadas del 60 y 70 se puede llegar por la avenida Don Pedro de Mendoza hasta la avenida Elvira Rawson de Dellepiane.
“Podemos tener el mejor y más grande estadio del continente; uno como el que nos merecemos los más de 315.000 socios de Boca y que podría ser una de las sedes principales del Mundial 2030″, dijo Reale sobre el proyecto.
De hacerse realidad, la cancha aumentaría con creces en tamaño. Específicamente, las dimensiones crecerían de 190 x 127 x 36 metros a un estadio en forma de U con tres pisos de palcos de 330 x 302 x 77 metros y con el cambio entrarían 112.000 espectadores sentados en lugar de los 57.634 actuales, de los cuales no todos tienen asiento personal como solicita la reglamentación de los estadios del campeonato mundial. A su vez, las plazas de estacionamiento aumentarían de 134 a 4000, las cabinas de transmisión de 14 a 78 y se crearían 444 palcos VIP y 192 turísticos. Con estas dimensiones, se posicionaría como el estadio más grande del continente.
En un mano a mano con LA NACION, el arquitecto contó en profundidad las bases del anteproyecto. Se trata de Enrique Lombardi, ex presidente de Estudiantes de La Plata y artífice de los planos del estadio Uno en La Plata y el estadio Madre de Ciudades en Santiago del Estero.
-¿En qué se inspiraron para el concepto del estadio?
-Fue un proceso complejo por la nostalgia del “mundo Boca” para La Bombonera. A nuestro criterio era correcto que estuviera en el barrio de la Boca porque la pauta que conecta es con el barrio y la historia que eso significa.
Desde el punto de vista morfológico, ambiental y neuroarquitectónico tenía que estudiar la relación del público con los jugadores. Creo que con el tiempo fue desapareciendo el vínculo protagonista-espectadores. Antes, los que seguían las revistas de espectáculos o deportivas veían como espectadores la vida de sus ídolos o artistas preferidos. Pero con la aparición de las redes sociales ya no necesitan los espectadores de esos protagonistas sino que los espectadores ya son protagonistas porque ven a través de las redes su vida y se pasa a una relación protagonista-protagonista.
En un estadio de fútbol sucede lo mismo: los espectadores dejaron de serlo y pasaron a ser protagonistas en el sentido de que están pendientes si aparece su imagen en la pantalla grande de las canchas, si llevan la bandera de las familias presentes, etc. Son todas participaciones que tienen que aparecer. Entonces la relación entre el público a través de un alambrado no existe más. Las tribunas tienen que estar iluminadas porque si no aparecen en la televisión es como si no estuvieran.
-¿Cómo van a lograr esa presencia?
-Además de buscar esa sensación en el estadio, se duplica la cantidad de gente, aumenta la cantidad de palcos y de estacionamiento.
El estadio se planifica para cumplir con los requisitos de la FIFA. Entre ellos, se pueden mencionar las condiciones de seguridad y confort, la cantidad de plazas de estacionamiento ligadas a la cantidad de espectadores, los sistemas de salida con aprobación de los bomberos, los espacios de hospitality (son lugares para establecer las previas, el entretiempo, el post partido, donde se presentan novedades, se da de comer, deportistas icónicos del club o del fútbol van y hablan con la gente), sectores VIP y normas de los puestos gastronómicos.
-¿Qué aspecto innovador tendría el nuevo estadio?
-Hoy los estadios son más urbanos porque son más inclusivos. Por ejemplo, éste va a tener un remate perimetral que es un gran mirador a la ciudad y río, donde van a estar los palcos para turistas y confiterías.
Además, está previsto -según la necesidad- que en la gran cantidad de metros cuadrados libres se haga un hotel temático, un shopping donde comprar merchandising y un museo inmersivo que se conecte con el actual museo de Boca.
"Hoy los estadios son más parques temáticos que estadios."
Enrique Lombardi, arquitecto y ex presidente de Estudiantes de La Plata
-En las imágenes se puede ver cómo no hay alambrados en la popular, ¿cómo analizaron la seguridad de esta medida?
-Hoy podés tener fosa aunque en Europa ya no se utilizan más. Eventualmente podríamos poner acrílico bajo en las cabeceras que es donde más se desarrolla la pasión popular y donde quizás se necesita mayor control. Pero hay mucha seguridad que rodea las tribunas. Hay que buscar que la seguridad no sea solo por restricciones o barreras arquitectónicas sino también por la vía cultural y educativa.
-En pocas palabras, ¿en qué se diferencia este anteproyecto con el proyecto Esloveno que propone la ampliación de la actual sede?
-La diferencia fundamental es la limitación de la capacidad y la ubicación. El proyecto esloveno tendría que comprar propiedades de las dos manzanas traseras y aún así -porque tiene que haber un asiento por persona por reglamentación de ley de mundiales- seguirían entrando 54.000 sentados. Mientras tanto, en este proyecto la nueva Bombonera se trasladaría a la Isla Demarchi y tendría capacidad para más de 120.000 personas.
N. de R: consultado sobre el proyecto Esloveno Plus, Fabian Fiori -quien está a cargo y es empleado del Club Atletico Boca Juniors hace 26 años y bisnieto del socio fundador Ludovico Dollenz- informó que la capacidad sería para 82.000 personas, sin precisar la cantidad de asientos, y la realización seria en 15 meses debido a que es una ampliación.
-¿Qué tan viable es construir en la Isla Demarchi?
-Desde la Facultad de Arquitectura de la Universidad de La Plata están haciendo un estudio de impacto ambiental para chequear la factibilidad de construir en la zona. Actualmente los terrenos de la Isla pertenecen al Estado Nacional. Hay desarrollos náuticos, un gremio y un edificio administrativo pero no es una zona donde haya muchos usos consolidados edilicios.
-¿Y cómo sería la accesibilidad a la isla?
-Hicimos un estudio y los resultados mostraron que si se construyen tres puentes peatonales, se podrían evacuar 30.000 personas cada 15 minutos. Es decir que si tuvieran que salir las 120.000 personas tardarían una hora, sin considerar la salida por tierra. Estos puentes tendrían que ser corredizos o levadizos por la navegación activa de la zona.
-¿Qué pasaría con la Bombonera actual?
-En la Bombonera actual podrían hacerse los fan fests, partidos puntuales como de fútbol femenino o amateur, y podría adaptarse como un elemento urbano que se meta el barrio y se hagan espectáculos de la ciudad, como una especie de Plaza Mayor de Madrid.
En el masterplan pensamos cómo hoy los estadios ya son parques temáticos que necesitan de vida cotidiana y ya no se basan en un uso intenso y periódico cada 15 días. Entonces estudiamos qué pasaría con la Bombonera y se hizo algo pensado que siento que será consensuado con la ciudad en caso de que el proyecto siga adelante. Con la historia del barrio, el turismo y Caminito, pensamos que la relación entre la cancha actual y la nueva puede generar una sinergia entre las tres calles (Aristóbulo del Valle, Pinzón y Brandsen), que se conviertan en paseos, donde pensamos que puede haber desarrollo comercial y pueden ser los “nuevos Caminitos”.
-¿Se haría igual si Jorge Reale no gana?
-Cuando Jorge Reale me convocó me dijo que creía en el proyecto por ser una necesidad de Boca en sí, más allá de que gane o no la presidencia. La esperanza en consensuar el tema es lo que me llevó a comprometerme.
-¿Qué presupuesto necesita una obra de calibre mundial en la Argentina?
-En Europa los estadios cuestan US$800 millones pero acá no. Si tomamos como referencia el Estadio Cívitas Metropolitano del Club Atlético de Madrid gastaron aproximadamente US$3000 por espectador. Si multiplico esa cifra por los 120.000 espectadores me da US$360 millones así que el costo de la nueva Bombonera se ubicaría en el orden de los US$300 millones.
-¿Y cómo lo financiarían?
-Según los cálculos, la construcción se puede financiar con la venta de 400 palcos y 10.000 plateas VIP, cuenta que resultaría en una suma de US$400 millones aproximadamente. Se siguen estudiando distintas vías para generar recursos, por ejemplo del naming como hizo River con el Mâs o el Bayern de Múnich con Allianz Arena.
-¿Cuánto tardaría en construirse?
-Si la construcción puede llegar a esta envergadura, llevaría aproximadamente cuatro años. Si se piensa como sede del Mundial 2030, en caso de que se haga en el país, debería estar listo para 2028 o 2029.
Otras noticias de La Boca
- 1
Anuncian US$10 millones de inversión en un resort 5 estrellas que será un all inclusive de verano
- 2
Construcción: los empresarios analizan cómo cambió el modelo de negocio porque “tener stock ya no es ventajoso”
- 3
Por qué a este pequeño pueblo europeo lo creen “maldito” y está abandonado
- 4
Depósitos logísticos medianos: el negocio menos pensado (y más rentable) de Zona Norte