La mansión que vendió el cantante de Maroon 5 después de tocar en la Argentina
La propiedad que había pertenecido a una célebre pareja de Hollywood le dejó al vocalista una ganancia de US$19 millones
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Con más de 20 años de trayectoria en la industria de la música, Maroon 5 no deja de crear hits. Después de su paso por la Argentina el 8 de abril, la banda de pop rock quedó latente en el inconsciente de los argentinos que lo fueron a ver y del resto que se quedó con las ganas.
Adam Levine, el cantante del grupo, se destacó en su performance y sumó un recuerdo más a su repertorio. Pero brillar sobre el escenario no fue lo único que estuvo haciendo últimamente. El intérprete de Sugar logró vender una de sus exclusivas mansiones en el exclusivo barrio de Pacific Palisades de Los Ángeles apenas dos meses después publicarla en el mercado.
La operación no fue una mera transacción sino que el cantante obtuvo una gran ganancia a partir de la venta. A pesar de haber disminuido US$6 millones su precio original de publicación, logró desprenderse de la propiedad por US$51 millones y ganó US$19 millones.
En las 1,3 hectáreas que conforman el terreno, la propiedad cuenta con tres edificios, que combinados, suman 1500 m² con 10 dormitorios y 14 baños. La construcción de la principal data de la década del 30´. Cuenta con más de 830 m² distribuidos en seis dormitorios y ocho baños.
La habitación principal tiene su propio patio interno al cual se accede desde las puertas de vidrio que le orotgan luminosidad al ambiente.
De la misma forma está diseñada la sala de estar. Un ventanal gigante conduce al patio externo con sillones y desdibuja los límites entre el afuera y el adentro, una de las tendencias más notorias en el mercado inmobiliario desde que los hábitos de vivienda cambiaron con la pandemia.
La cocina, decorada en tonos beige también tiene un gran ventanal industrial con marcos negros que bordea la pared opuesta al área de trabajo. Con una isla central espaciosa, está también integrada al comedor con una larga mesa para 10 comensales.
Para los días calurosos angelinos, la propiedad cuenta con una gran pileta rodeada de árboles que le dan un toque extra de privacidad a la propiedad, ideal para una personalidad famosa. Completan la escena una serie de sombrillas, reposeras y un largo sillón que invitan a pasar la velada afuera.
En la propiedad también hay espacio para la diversión. Una sala de juegos abierta para los divertidos de la casa contiene una mesa de ping pong de madera, dos juegos de arcade y una sala soñada para los cinéfilos: un cine con pantalla gigante y un sillón con capacidad para muchos televidentes.
La propiedad, que antes había pertenecido a la ex pareja de actores Jennifer Garner y Ben Affleck, se completa con una casa más pequeña para invitados con todas las comodidades y una cancha de básquet para los aficionados del deporte.
Adam Levine no fue el único que, junto a su esposa supermodelo de Victoria´s Secreta Behati Prinsloo, compró una vivienda en el exclusivo barrio de Pacific Palisades. Como ellos, otros artistas como el actor Bradley Cooper, la estrella de la NBA Kawhi Leonard y el legendario actor Anthony Hopkins también decidieron invertir en los ladrillos en esa zona.
LA NACION
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