En la era del impacto visual, de Instagram y los “me gusta”, la locación lo es todo. Las fotos con colores llamativos, con paisajes alrededor del mundo y la ostentación de una vida fantástica, enseguida disparan los likes de los seguidores en las redes sociales. Por eso, para canalizar la necesidad constante de los influencers en buscar nuevos escenarios para su feed, en Estados Unidos nació un nuevo negocio: alquilar casas por hora, para que los esporádicos inquilinos le saquen provecho a los rincones más impensados.
Dentro de la plataforma Peerspace, que funciona como una suerte de Airbnb y ofrece desde estudios donde filmar videoclips hasta salones de eventos para realizar fiestas, una de las opciones disponibles es que los propietarios pongan a disposición sus viviendas para que se convierta en el escenario de un book fotográfico. Los precios arrancan en los US$10 por hora y pueden llegar a alcanzar los US$5000, aunque el valor promedio ronda en los US$100 por esos preciados 60 minutos.
Dentro de la plataforma, hay casas para todos los perfiles. Desde viviendas lujosas con pianos, una mesa de pool y una terraza con vista privilegiada a la ciudad de Nueva York, pasando por estilos más bohemios con decoración de madera y colores neutros, hasta alojamientos que recrean los años 70, una casa de muñecas o incluso un garaje abandonado. Viviendas para todos los gustos.
Un penthouse para las redes
Ubicado en el corazón de Manhattan Soho, en Nueva York, el penthouse Village Studio de 255 metros cuadrados fue decorado desde un primer momento para lucirse en Instagram. Con terraza, chimenea y una decoración que utiliza siempre la misma paleta de colores (blanca, rosa, verde y dorada), el departamento recibió la visita de famosas como Zendaya, Emily Ratajkowski y Emma Roberts.
“Lo diseñamos para que sea el telón de fondo para capturar momentos de estilo de vida, de una manera atractiva y no demasiado producida”, explican sus creadoras a la hora de describir el inmueble. La locación permite una cantidad máxima de 35 personas y cotiza a US$375 la hora, aunque la reserva mínima es de cuatro horas, por lo que suma un total de US$1500. Dentro del paquete se incluye el uso de la heladera, la vajilla, velas, almohadones, ropa, jarrones y flores.
Casa histórica y premiada
Galardonada con el Premio a la Excelencia por la Restauración Histórica de la Comisión de Diseño Urbano de Atlanta, la vivienda fue en otros tiempos una casa de lujo que tenía plantaciones. Por los empapelados de sus paredes y la elegancia de sus muebles sus propietarios definen al hogar “con sensibilidad moderna y mucho drama”. Tiene una capacidad para hasta diez personas, su valor es de US$400 la hora y sus dueños exigen una estadía mínima de 120 minutos.
Exceso de alfombras y cortinas
El piso casi no se ve, está cubierto de alfombras de todos los tamaños y colores. Blanca y afelpada para las escaleras, cuatro diferentes para el cuarto, otras tantas para el living. Las cortinas son otro de los elementos que abunda, en color naranja, rosa, almendra y hasta de animal print. En este loft de 140 metros cuadrados y ubicado en Los Ángeles, las texturas son las protagonistas.
Diseñada por Brandie Howie, el alquilar de la propiedad cuesta US$150 por hora y pide como requisito un mínimo de tres horas. Tiene una capacidad máxima de 10 personas, permite mascotas y pone a disposición el uso de pelucas, prendas y otros accesorios de belleza.
Estilo retro-futurista
Entre paredes de ladrillos y pisos de madera, esta casa de 158 metros cuadrados ofrece una locación “retro-futurista completamente personalizable”. Localizada en Dallas (estado de Texas), sus propietarios permiten el uso de las televisiones viejas sin señal, las cámaras fotográficas antiguas, la iluminación de colores y hasta una bañera llena de falsos billetes de 100 dólares. Todo muy kitsch. La locación tiene un valor de US$75 dólares la hora y se pide una reserva mínima de dos horas.
Loft escandinavo-africano
El loft nació con la idea de sacarle provecho al espacio a través de Airbnb, para albergar a los huéspedes de todas partes del globo que viajaban a Brooklyn. Pero en los últimos años la casa se transformó y pasó a alquilarse para ocasiones más específicas y estadías más cortas. De 418 metros cuadrados, hoy en día cuesta US$175 la hora y se exige un mínimo de seis horas (942 dólares en total).
Los dueños del loft indican que el estilo de la vivienda se inspiró en sus viajes al sur de África, el Caribe y los países escandinavos, por lo que el diseño de interiores está basado en la estética minimalista, las texturas, los patrones y colores de la cultura africana moderna. Sin embargo, la decoración se alquila aparte.
Otras casas instagrameables
Las ofertas de casas y departamentos se extienden a lo largo y ancho de Estados Unidos aunque, sobre todo, abundan más que nada en la costa Este y Oeste. Lo mismo sucede con los precios: se puede alquilar un rancho con lago y 32 hectáreas por US$80 la hora en el pueblo de Newberry Springs (California), así como hay dueños que piden US$ 40.000 por 8 horas en una mansión con pileta y vista a la bahía de Silicon Valley.
Así mismo, una antigua fábrica de carbón vegetal en Chicago que combina paredes descascaradas, valiosas obras de arte, autos antiguos y el cráneo de animales, cotiza a US$250 la hora. En tanto, un domo geodésico de madera y muchas plantas en Los Ángeles se alquila a US$350 la hora y una casa palaciega con estilo greco-persa cuesta US$250 por ese lapso de tiempo.
La polémica del falso jet privado
En la página web Peerspace, las casas no son la única opción para alquilar. Los estudios fotográficos también lo son y algunos de ellos ofrecen recrear vidas de lujo. En septiembre, se generó polémica en las redes sociales: los usuarios descubrieron que los influencers no alquilaban jets privados sino un set de Los Ángeles que tiene una escenografía de jet privado y subían sus fotos alardeando sus viajes ficticios. Con asientos de cuero y luces artificiales en las ventanas del falso avión, el espacio puede alquilarse por US$64 la hora.