Ya trabajan en la modificación del presupuesto 2016
La idea es hacerlo más realista; aún no se definió si cambiará la ley o si se reasignarán partidas
El macrismo arrancará el nuevo gobierno con la intención de modificar algunas partidas del presupuesto 2016 ya sancionado, pero no descarta cambiar los ejes centrales de la ley, a través de un nuevo proyecto que se acerque más a la realidad.
El actual jefe del bloque de diputados y futuro senador, Federico Pinedo, indicó a LA NACION que el nuevo gobierno "empezará con el presupuesto que se sancionó, porque todavía no hay claridad sobre los gastos y recursos" del Estado. "A esa falta de transparencia hay que sumarle el efecto del reciente fallo de la Corte, la quiebra del Banco Central y la cuestión del mercado de futuros del dólar", agregó el legislador nacional.
Al respecto, una fuente del equipo económico de Cambiemos detalló a LA NACION que se trabaja sobre dos escenarios: "Hay gente analizando un nuevo presupuesto, pero posiblemente éste no sea el momento indicado para dar todas las batallas económicas juntas en el Congreso. Por eso, la alternativa a priori es reasignar partidas en forma sustancial". Para ello, recurrirían a los llamados súper poderes.
Otra fuente de Cambiemos consideró que el nuevo gobierno directamente no puede trabajar con el actual "dibujo presupuestario", maximizado por el DNU de ayer, que subió el gasto en $ 133.272 millones (ver aparte), y le quitó dramatismo a la idea de sancionar una nueva ley.
El proyecto defendido por el ministro de Economía, Axel Kicillof, ante el Congreso plantea un superávit primario de $ 11.000 millones (0,9% del PBI), con una esperada suba de los recursos del 25,7%, y de los gastos, del 15,8%, lo que implicaría un brutal ajuste en las cuentas públicas. Este año los ingresos crecen al 32% y los gastos al 38%.
Para 2015 también se calculaba preliminarmente un resultado primario positivo del 1,2% del PBI -que luego fue corregido por un leve déficit-, pero los analistas creen que el ejercicio terminará con un rojo del 4,5% y uno financiero del 7%. Otras inconsistencias del proyecto aprobado por el Congreso son el crecimiento esperado de la economía, del 3%; una inflación del 14,5% y un dólar oficial promedio de 10,6 pesos.
El vicepresidente de ASAP, Marcos Makon, dijo a LA NACION que "para 2016 el nuevo gobierno deberá hacer un estudio en profundidad del presupuesto, porque decían que el gasto no sería muy elevado respecto de 2015, pero eso cambiará claramente". Al respecto, consideró que en el primer trimestre el Poder Ejecutivo entrante se podría manejar con las partidas programadas, "pero después deberá modificarlas".
El especialista afirmó que sería "muy complicado" elaborar un nuevo presupuesto en tan poco tiempo, "por la inercia del gasto del año previo, las partidas para personal, transferencias a provincias y fondos específicos; incluso el caso de los subsidios no se puede modificar tan rápidamente". De todos modos, más allá de la mecánica utilizada, aclaró que el ejercicio próximo terminará con un importante déficit.
Por su parte, el director de la consultora ACM, Maximiliano Castillo, dijo a LA NACION que el nuevo gobierno debería "enviar un proyecto de ley que corrija los artículos clave del proyecto de presupuesto, porque la ley sancionada quedó muy desfasada". Según ACM, por el fallo de la Corte en favor de las provincias las deudas para el Estado podrían sumar hasta el 6,3% del PBI si se incluye a todas las jurisdicciones que podrían reclamar una compensación acorde con ese fallo.
"Después de haber anunciado lo que quería hacer con los ingresos, con medidas que ampliarán el déficit, pero que son bienvenidas como la cuestión de Ganancias y de las retenciones, el nuevo gobierno deberá complementar este paquete fiscal enunciando las políticas que se tomarán en términos del gasto", expresó Castillo.
Según el especialista, "el nuevo gobierno debería aspirar a bajar el déficit fiscal un punto porcentual por año para tener una política fiscal sólida, que es clave para reducir la inflación". De este modo, se podría llegar al final del mandato con superávit primario. En particular, indicó que el rojo fiscal se puede reducir por la vía de "algunos subsidios, que ya representan el 5% del PBI y tienen una estructura muy inequitativa en términos sociales".
De inmediato aclaró: "No es necesario lleva a cabo un ajuste feroz, porque se puede financiar la transición con deuda".
"Viene un gobierno de posguerra"
- El filósofo Santiago Kovadloff afirmó ayer en una reunión de Consenso Republicano que el gobierno que encabezará el presidente electo, Mauricio Macri, será de "posguerra" luego de un período en el que el kirchnerismo gobernó "reduciendo el Estado a la figura del líder"
- "La tradición de autoritarismo a la democracia no está cumplida. El gobierno que viene tiene que levantar la República de entre las ruinas. Es el estado residual en que ha quedado la vida constitucional en la Argentina, no solo al cabo de 12 años, sino a la largo de una transición incumplida a la vida democrática, que se inicio en 1983", señaló el principal orador del evento.
- En tanto, el filósofo advirtió sobre la importancia de "no precipitarse hacia el triunfalismo"y afirmó que "se logró una oportunidad".
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