Vidal y Larreta desplegarán estrategias de campaña autónomas de la Casa Rosada
Se acordó que habrá esquemas y discursos separados para evitar que todos paguen el mismo costo por las dificultades económicas; fue consensuado en una reunión con Peña
Son, sin dudas, los tres herederos políticos del presidente Mauricio Macri en Pro, y vértices indispensables del poder nacional. Tuvieron y tienen, desde siempre, matices y diferencias, pero el objetivo común, otros cuatro años más de su jefe en la Casa Rosada, los obliga a ponerse de acuerdo.
El jefe de gabinete Marcos Peña, el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, idearon en las últimas semanas un antídoto electoral para evitar un impacto mayor de la combinación de alta inflación, dólar alto, recesión y deuda creciente. Habrá no una, sino tres campañas, "autónomas", con mensajes y objetivos distintos aunque se jueguen, exactamente, en las mismas fechas, y converjan en la meta final: mantener sus respectivos gobiernos.
Altas fuentes de los gobiernos bonaerense y porteño confirmaron a LA NACION que una reunión entre Peña y el jefe de gabinete bonaerense, Federico Salvai -la semana pasada-dio como resultado el acuerdo electoral. Habrá, entonces mensajes y recorridos distintos, según se trate de Macri, Vidal o Larreta, más allá de que sus agendas se cruzarán en más de una oportunidad.
¿Una revolución en la comunicación oficial, habitualmente monolítica? ¿Una muestra de debilidad del Gobierno? Desde la Jefatura de Gabinete lo niegan de manera terminante. "Es lo mismo que pasó en 2017, cuando cada uno tenía una estrategia local", afirmó un vocero cercano a Peña. De todos modos, se trató allí de una elección legislativa, y la de 2015 tuvo una estrategia nacional unificada, en el intento por acceder al poder. "Allí donde sirva provincializar y hablar de temas locales, se hará, y donde sea más conveniente nacionalizar la campaña, también se hará", responde desde otro despacho importante de Balcarce 50.
El Gobierno, por cierto, llevará la parte más pesada en el reparto: Macri deberá defender el "rumbo" de la economía, uno de los previsibles ejes de campaña del kirchnerismo y el peronismo federal, y se apoyará en la lucha contra el narcotráfico y los "avances" en materia de institucionalidad, transparencia y obra pública, siempre contrastados con el kirchnerismo.
En cuanto a Vidal, su estrategia estará basada en mostrar sus "enormes diferencias" con la gestión de ocho años de Daniel Scioli, quien justamente por estos días está relanzando su candidatura a la Presidencia. Y Rodríguez Larreta hará hincapié, como lo viene haciendo desde que comenzó el año, en la catarata de obras públicas que tiene previsto inaugurar hasta las elecciones de agosto y octubre. "La autonomía tiene un límite: que defiendan la reelección del Presidente y trabajen para eso", contestaron fuentes oficiales.
Nadie duda, dentro o fuera de la Casa Rosada, que el jefe de la campaña nacional será Peña, sea o no designado oficialmente, y acompañado por el ministro del Interior, Rogelio Frigerio. En provincia será Salvai quien comande las acciones y en ciudad hay una duda: Diego Santilli podría ser nuevamente compañero de fórmula de Rodríguez Larreta, por lo que ese lugar podría ser ocupado por el actual ministro de Ambiente, Eduardo Machiavelli, quien ya se encargó de la logística de campaña en varias elecciones porteñas con Macri al mando.
A diferencia de lo que ocurría meses atrás, cerca de Vidal reconocen hoy "preocupación" por el devenir electoral de Cambiemos en el principal distrito del país. "María Eugenia medida sola está bien, necesitamos que Mauricio levante (sus índices de imagen positiva) y llegue a los valores de 2015. Hoy hay riesgo de perder la elección", afirmaron altas fuentes de la gobernación. Con ese panorama en vista, en provincia ven que el candidato kirchnerista "sacará lo que saque Cristina", por lo que también hará falta "un tercer candidato competitivo", como lo fue Felipe Solá representando al massismo, hace cuatro años.
Desde el edificio de Parque Patricios, donde las elecciones locales se ven con menos dramatismo, adoptaron el estilo alejado de la confrontación de su jefe político. "Queremos tener una campaña lo más corta posible, y obviamente va a estar todo monopolizado por lo nacional", afirmó un dirigente de confianza de Rodríguez Larreta. "Con María Eugenia tienen una misma idea sobre el presente y el futuro. Marcos tiene otra postura", afirmó otro referente del espacio que los conoce bien.