Una representación cada vez más debilitada en el Congreso

No son los mismos tiempos. Mucho menos los mismos actores. Durante los últimos 15 años la representación sindical en el Congreso perdió considerable terreno al punto de que los legisladores peronistas y aliancistas coinciden en que la disminución de esa presencia gremial será clave cuando la semana próxima comience en Diputados el debate sobre la reforma laboral.

A pesar de que un sector del sindicalismo agita el fantasma de los 13 paros que la CGT hizo al gobierno de Raúl Alfonsín y, bajo esa bandera, espera trabar en el Congreso las modificaciones impulsadas por Fernando de la Rúa, lo cierto es que la realidad política ha cambiado. Desde 1983 a la actualidad, el PJ perdió más de un 70 por ciento de sus diputados de extracción sindical.

Informe de FADE

Según un estudio realizado por Luis Tonelli, politólogo de la Fundación Argentina para el Desarrollo con Equidad (FADE), en la última restauración democrática, el bloque de 89 diputados peronistas contaba con 35 legisladores de extracción sindical, lo que representaba el 13,8% del total de la Cámara baja.

No sólo eso, la bancada del PJ era conducida por el gremialista Diego Ibáñez y, a pesar de ser minoría en la Cámara baja, logró torcer el brazo del alfonsinismo en el Parlamento.

El gobierno radical tuvo que acceder a las modificaciones propuestas por la entonces oposición del PJ para poder aprobar las leyes de convenios colectivos y de obras sociales.

En 1983 los peronistas de extracción gremial aún arrastraban los beneficios del sistema de cupos impuesto por Perón, que obligaba a la bancada del PJ a contar con un 33% de gremialistas.

Durante 1984 el PJ frenó por un voto en el Senado el proyecto de reforma laboral conocido como ley Mucci, en alusión al entonces ministro de Trabajo. Luego, el PJ impuso a la UCR un sindicalista como jefe de la cartera de Trabajo: Carlos Alderete.

Pero, desde 1985, el peronismo sindical comenzó a perder terreno en el Congreso. Mientras que en el período 1985-1987 la bancada de 90 diputados del PJ tenía 28 legisladores de extracción sindical, en 1989 el bloque peronista ya no era conducido por un sindicalista y contaba con 23 miembros. En 1991, los justicialistas-sindicales sólo eran 18 en una bancada de 120 escaños. Y actualmente los diputados sindicalistas se redujeron a menos de una decena.

A lo largo del estudio se señala que "durante los últimos años del gobierno menemista el poder sindical disminuyó, pero que se abroqueló en la Comisión de Trabajo y que su presencia allí resultó desproporcional con respecto a su representación global en la Cámara baja".

Ante este retroceso del poder sindical en el Congreso muchos coinciden en que al PJ se le hará cuesta arriba trabar el proyecto laboral oficial.

"No cabe duda de que al peronismo sindical le será difícil recomponer el divorcio con los trabajadores que se sufrió durante la era menemista", dijo el diputado Oraldo Britos (PJ-San Luis). En diálogo con La Nación , el legislador de larga trayectoria gremial aceptó que "el poder sindical está devaluado".

"Muy difícil"

A su turno, el ex titular de la Comisión de Trabajo de la Cámara baja Alfredo Atanasoff (PJ-Buenos Aires) sostuvo: "Es natural que al 10% de los peronistas sindicales que hay en la bancada del PJ nos resulte muy difícil convencer sobre las desventajas de esta flexibilización". En tanto, el ex líder de la CGT y actual diputado del PJ, Saúl Ubaldini (Buenos Aires), quien expresó que "a falta de cantidad hay que colocar mayor calidad". El hombre que encabezó los 13 paros generales contra el gobierno de Alfonsín añadió: "Sabemos lo que significa la precarización laboral y seremos apoyados por los diputados peronistas y por la CGT".

Desde el oficialismo, el jefe de bloque de la Alianza, Darío Alessandro (Capital), destacó que "la pérdida de peso político del sindicalismo a raíz del descrédito del sector gremial en la sociedad se verá reflejado en el debate por la reforma laboral".

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