Una diputada que responde a Juan Grabois cruzó a Emilio Pérsico por su crítica al bono para indigentes: “Hay que dejar de lado los egos”
La dirigente cartonera Natalia Zaracho insinuó que el malestar del líder de Movimiento Evita con la nueva medida responde a una cuestión de “manejo de recursos”; “Nosotros propusimos que lo maneje directamente el Estado porque queríamos que salga”, indicó
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Las críticas del líder del Movimiento Evita, Emilio Pérsico, a la implementación de un bono de $45.000 para personas bajo la línea de indigencia, que el Gobierno instrumentará en dos pagos en noviembre y diciembre, reavivó el debate al interior de las organizaciones sociales oficialistas. Es que el dirigente, que además se desempeña como secretario de Economía Social, puso en cuestión esta mañana el espíritu de la medida largamente demandada por Juan Grabois y que fuera confirmada esta semana por el ministro de Economía, Sergio Massa.
“Cada progresista que llega a un puesto del Estado quiere sacar su propio subsidio”, lanzó Pérsico durante una entrevista con la radio Futurock, en un nuevo capítulo de las disputas internas por la política social que debería llevar adelante el Frente de Todos. “Es más fácil [que impulsar un monotributo social para el sector informal] pensar subsidios, y creer que con eso se resuelve la pobreza”, añadió el referente.
Quien no tardó en salir al cruce del dirigente social fue su par y diputada del Frente Patria Grande, Natalia Zaracho. En declaraciones a LA NACION, la referente cartonera cercana a Grabois consideró que la reacción de Pérsico se vincula con “una cuestión de egos”. Y en una clara alusión a la intermediación que encarnan en el territorio los movimientos sociales, puso el foco en “quien maneja los recursos”. “En este caso, nosotros propusimos que lo maneje directamente el Estado porque queríamos que salga y que se note la necesidad de nuestro pueblo”, subrayó.
“Las organizaciones de la economía popular sabemos más que nadie lo que nos cambia la vida tener un subsidio del Estado para fortalecer nuestro trabajo. Esta política la pensamos después de los números que nos dejo el IFE y de ver toda la gente que trabaja, pero que no tiene un sueldo fijo todos los meses”, añadió Zaracho.
Apoyado abiertamente por la propia vicepresidenta Cristina Kirchner, el bono que anunció este lunes el Gobierno fue celebrado como una victoria por la militancia referenciada en Grabois. En agosto pasado, sus diputados habían amenazado con romper el bloque oficialista en la Cámara baja si no se concretaba una política dirigida “a los sectores sociales más postergados”. Sin embargo, la decisión no se activó y tanto Zaracho como Itai Hagman y Federico Fagioli continúan integrando la bancada del Frente de Todos.
Por su parte, el Movimiento Evita nunca escondió sus reparos hacia políticas como el salario básico universal, que en los últimos meses se convirtió en una bandera del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE). Sus dirigentes consideran que alimentan estigmas como el de “planero”. Así lo aseguró este viernes Pérsico, quien además aseguró que un bono “no es el camino para resolver la pobreza ni la indigencia”. Y, para justificar su postura, comparó la situación actual del país con la de 2009, año en que fue creada la Asignación Universal por Hijo (AUH): “Ahí sí hubo una baja importante de la pobreza, porque la puja distributiva no estaba en las condiciones que está hoy”.
“Es claro que esto no resuelve la pobreza, no resuelve los problemas estructurales que tenemos”, concedió, en tanto, la diputada Zaracho. Sin embargo, la referente territorial del MTE no dudó en poner en valor la nueva medida al tildarla de “muy positiva”. E insistió en que servirá para “visibilizar la necesidad que se vive por la crisis económica que atravesamos”.
“Acá hay que dejar de lado los egos y poner por delante los intereses y necesidades de nuestro pueblo más sufrido”, continuó Zaracho. Y en otro mensaje dirigido a Pérsico, remató: “Las declaraciones así no suman nada, restan. Lo que me importa de esto es que se haga, se enoje quien se enoje. Lo demás pasa a un segundo plano”.