Un acuerdo clave de jueces puede definir el futuro de las causas contra Cristina Kirchner
El 14 de diciembre se designará al presidente de la Cámara de Casación; la decisión tendrá impacto directo en la integración del tribunal que revisará los casos Hotesur y Los Sauces y el Pacto con Irán
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LA NACIONHernán Cappiello
La Cámara de Casación convocó para el martes 14 de diciembre una reunión clave para elegir a su futuro presidente en una decisión que tendrá impacto directo en la integración del tribunal que debe decidir en la apelación de la causa Hotesur y Los Sauces, en la que Cristina Kirchner fue sobreseída, y en el resto de los expedientes que involucran al kirchnerismo en casos de corrupción, incluidos los cuadernos de las coimas.
En esa reunión, convocada por el presidente saliente, Gustavo Hornos, se definirá quien lo sucederá al frente del máximo tribunal penal del país por debajo de la Corte en 2022 y como se integran las salas (de tres jueces cada una) que deben decidir sobre el futuro de los diversos casos de corrupción el año próximo.
La clave es la Sala I de la Cámara de Casación donde están radicadas la causa de Hotesur y Los Sauces, el caso del Pacto con Irán y la causa de los cuadernos de la corrupción. En los casos Hotesur y Los Sauces y Memorándum con Irán, los jueces deberán revisar el sobreseimiento de Cristina Kirchner sin haber sido juzgada. En el caso de los cuadernos deciden sobre nulidades previas que articularon los acusados, que pueden frustrar el avance del proceso.
La Sala I está integrada por los jueces Ana María Figueroa, Diego Barroetaveña y Daniel Petrone. Barroetaveña y Petrone son dos jueces que vienen de la carrera judicial y los últimos que llegaron a la Casación. Sin ataduras políticas, tienen una mirada sobre el derecho mas técnica. Barroetaveña adhiere a la lista Bordó de la Asociación de Magistrados, la mas crítica con el Gobierno. Figueroa, una especialista en derechos humanos, no oculta su simpatía con el kirchnerismo y es promotora de denuncias que cuestionan la injerencia del gobierno de Mauricio Macri sobre la Justicia.
Esta es la integración de la Sala I hasta hoy. Pero el martes 14 se debatirá quien es el presidente de la Casación en un acuerdo extraordinario. Es tradición que el presidente de la Casación deje de integrar su sala, es decir no vote durante el tiempo de su mandato y asuma las tareas propias del cargo en representación del tribunal. El presidente de la Casación se elige según dos criterios: una votación de sus pares y un orden de prelación rotativo por antigüedad.
A quien le tocaría en esta ocasión es al juez Alejandro Slokar, de la Sala II de la Casación. Slokar mantuvo en este año una posición muy crítica con Hornos y otros de sus colegas por las visitas del camarista al expresidente Macri, lo que no contribuye a sumar voluntades, excepto de alguno de sus colegas que lo apoyaron en particular. Por otro lado se menciona la posibilidad de que el juez Petrone asuma la presidencia de contar con el voto de sus colegas. Si se diera esta posibilidad, se abriría una vacante en la Sala I que debe intervenir en los casos Hotesur/Los Sauces y en la causa del Memorándum con Irán.
De darse esta circunstancia, el juez que ocupe el lugar de Petrone será elegido por sus colegas en el acuerdo de la semana próxima, aunque de este modo se trataría de poner a dedo a un juez para estas dos causas, una situación delicada por su falta de transparencia.
Candidatos y negociaciones
En los últimos días fueron febriles las reuniones entre los jueces de la Cámara de Casación. Como nunca pasó en estos casi dos años de pandemia, estaban todos es sus despachos del primer piso del edificio de Comodoro PY 2002. Un palier largo, y ancho con puertas contiguas, donde los jueces salían de un despacho y se metían en otro sin ser advertidos por sus colegas, como en una antigua película cómica.
La idea que terminó primando en las conversaciones y acuerdos era no alterar la integración de la Sala I. Así las cosas quienes hubieran votado por Petrone podrían hacerlo por Slokar, aun cuando no era su primer candidato. Es el escenario mas probable. “Es el candidato natural”, dicen en la Casación, pues es a quien le correspondería por orden de antigüedad. En caso de empate el voto del presidente Hornos -con diferencias con Slokar- vale doble.
Otra alternativa sería que Petrone logre los votos. Y que Hornos, pase a integrar la Sala I del tribunal. Esta es una opción con menos posibilidades. Y determinaría un cambio en la integración de la Sala I. Hay una alternativa para que Petrone sea elegido presidente de la Casación y al mismo tiempo pueda votar en la causa Hotesur y Los Sauces: que se completen los tramites de la apelación antes de fin de año y que se fije para la audiencia donde las partes expondrán su caso. Aunque la audiencia sea en febrero, es norma de la Casación que los jueces que integran la sala en el momento de la fijación de la audiencia son los que resuelven en el caso.
El tercer escenario, aunque mas improbable, es que surge un tercer postulante, tal vez Carlos Mahiques. Aunque el propio juez le dijo a sus colegas que no tiene esa aspiración, lo cierto es que Mahiques fue presidente cuando completó el mandato que dejó trunco Juan Carlos Gemignani, no tuvo aún su propia presidencia por período completo.
La reunión para elegir presidente de la Casación estaba prevista para el martes 30 de noviembre, pero por compromisos de los jueces no se pudo hacer. Algunos jueces acudieron a la sala de acuerdos para la reunión y casi nadie se presentó. Gemignani allí presente hizo labrar un acta. Tentativamente se pensó en reunirse mañana jueves 2 de diciembre, pero finalmente se fijó el martes 14 de diciembre con dos semanas de tiempo para terminar de definir la negociación entre todos los actores involucrados.
La otra decisión importante que se define el martes 14 de diciembre es que juez es presidente de casa sala. Esto es importante porque es presidente de cada sala es quien fija la agenda de casos que se tratan, fija las fechas de audiencia y de algún modo le pone el timer al trámite de cada caso. Maneja la cronoterapia judicial.
Los jueces de la Casación hoy son 12, ya que la jueza Liliana Catucci cumplió 75 años, y como indica la Constitución se jubiló pues no consiguió ni un amparo que impidiera su salida, ni que el Gobierno pidiera al Senado nuevamente su acuerdo.
Previendo una situación similar, el juez Eduardo Riggi pidió al Poder Ejecutivo que reenvié su pliego al Senado para conseguir un nuevo acuerdo por cinco años más. Riggi cumple en febrero 74 años, pero el tiempo que falta para jubilarse le da margen para conseguir una prorroga y no como ocurrió con su colega Catucci, a la que la Justicia le dijo que había llegado tarde con su pedido.
Por Hernán Cappiello
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