Trastienda del anuncio con el FMI: zoom de medianoche, charla con Georgieva y el alivio por el esperado acuerdo
Sergio Massa llegó anoche a San Juan y desde allí mantuvo un diálogo virtual con la primera plana del FMI, incluida su secretaria general; compartió con los suyos sus impresiones y buscó cerrar en positivo una semana que fue muy turbulenta
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LA NACIONCecilia Devanna
SAN JUAN (enviada especial). Sergio Massa se despertó antes de las 6 en un gélido amanecer sanjuanino sabiendo que la confirmación del FMI sobre el acuerdo con la Argentina era inminente. En su habitación, con vista a la cordillera de Los Andes, se preparó para conectarse al último zoom antes de que llegara el anuncio a través del organismo multilateral de crédito. Su llegada a esta provincia, primera escala de su gira en la que también recorrerá La Rioja y Tucumán, Massa ya se mostraba exultante y liberado frente a lo que venía: el alivio por el acuerdo y la posibilidad de dedicarse full time a su carrera rumbo a las elecciones presidenciales, después de una semana de enormes turbulencias económicas. Del traje de ministro-candidato, al de candidato con acuerdo, un oxígeno más que necesario ante un panorama tan complejo.
Massa aterrizó en el aeropuerto local Domingo Faustino Sarmiento cuando faltaban 25 minutos para la medianoche. Lo recibió en gobernador Sergio Uñac, derrotado en las últimas elecciones provinciales, y juntos se dirigieron a la sede de la gobernación. Después de comer unas empanadas de carne en el jardín del lugar se dirigió con Uñac al salón “Camus”, que recuerda al fallecido gobernador Eloy Próspero Camus, que gobernó la provincia entre 1973 y 1976, cuando fue derrocado y apresado por la última dictadura.
El titular de Hacienda se sentó en la cabecera de una larga mesa, abrió el zoom y del otro lado aparecieron Rodrigo Valdés, director del Departamento del Hemisferio Occidental; Luis Cubeddu, jefe de la misión para las negociaciones con la Argentina; y Leonardo Madcur, jefe de asesores del Ministerio de Economía.
Entraron en diálogo también la propia Kristalina Georgieva, cabeza máxima del organismo. El clima, aseguran, ya era relajado, según contaron testigos directo de esos minutos a LA NACION. Uñac le mandó saludos a Georgieva y San Juan se metió en la conversación. Macdur nació en esta provincia y bromearon con que se que venía “un gran día”. En medio de esos idas y vueltas completaron los detalles finales del acuerdo económico anunciado desde Washington y que llevaba semanas demorado.
En paralelo a las conversaciones entre los equipos técnicos estuvieron las de los encargados de comunicación. En el caso del FMI Julie Kozak y María Candia y en el de Argentina, Santiago García Vázquez.
Después de terminarlo, Massa volvió a la mesa en la que se además de referentes locales y el propio Uñac, estaba el resto de la comitiva: su compañero de fórmula, Agustín Rossi; su jefe de campaña, Eduardo “Wado” de Pedro; el sindicalista Héctor Daer; el exministro y hoy asesor, Julián Domínguez; el secretario de Industria, Ignacio de Mendiguren y el funcionario y líder de Barrios de Pie, Daniel “Chuqui” Menéndez.
Massa apuró una carne con ensalada, no probó el postre e intentó motivar a los derrotados referentes locales, que perdieron el liderazgo de la provincia a manos de Juntos por el Cambio (JxC) y están envueltos en una interna dura entre sus dos referentes locales, Uñac y el exmandatario provincial, José Luis Gioja. El tigrense los alentó a seguir para lo que queda de campaña. Les dijo que él tenía “muchas derrotas sobre el lomo”, pero que lo importante es seguir y que ellas “fortalecen”. Resaltó la importancia de la unidad, casi un mantra en esta campaña tras las feroces diferencias internas, y buscó darles un mensaje esperanzador a los sanjuaninos. Casi sobre una arenga completó con que “la democracia da revanchas” y dijo: “Vamos a ganar”.
Poco después, ya cerca de las 2 de la mañana, llegó a su cuarto en el Del Bono Park, un elegante hotel en el centro sanjuanino. Se durmió más de media hora después y fijó su despertador para antes de las 6, en la previa a un día que esperaba desde hace meses, pero especialmente desde hace semanas cuando se dejaba trascender que el acuerdo estaba al salir, pero el hecho quedaba en adelantos y no se lograba concretar.
En el amanecer de hoy se reeditó el zoom. A las 8:13 ya tenía el Staff Level Agreement (SLA) y el alivio fue total. En el medio hubo consultas sobre los detalles finales. “Lo paga con todo el sistema de relaciones que tiene”, fue una de las frases con las que en medio de la algarabía deslizaban sus colaboradores en referencia a los detalles del acuerdo que le da oxígeno a Massa para encarar el sprint final de la campaña. En las próximas horas sumará el apoyo de los gobernadores del norte grande y se enfocará este sábado en La Matanza, el distrito más populoso de la estratégica provincia de Buenos Aires. Necesitaba cambiar el clima en el cierre de una semana difícil.
Por Cecilia Devanna
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