Tras el asesinato del kiosquero, Kicillof dijo que bajaron 25% los “delitos evitables” en la Provincia

El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, aseguró esta noche que los “delitos evitables bajaron 25 por ciento” en la provincia de Buenos Aires, mientras que durante la administración de su antecesora María Eugenia Vidal “subieron 83 por ciento”. El mandatario hizo esta referencia a menos de una semana del asesinato del kiosquero Roberto Sabo en Ramos Mejía, que conmocionó a la sociedad.

“Quiero decir que las estadísticas no solucionan los problemas, pero cuando uno mira los números, lo que observa es que en el último tiempo ha bajado 25% la tasa de delitos evitables. Eso no soluciona nada, pero en la etapa anterior subió 83%”, aseguró Kicillof al tomar la palabra en el acto de cierre de la campaña electoral del Frente de Todos que se realizó en el distrito de Merlo.

Kicillof sostuvo, en la misma línea, que “mientras en la provincia de Buenos Aires (la tasa de delitos) bajaba, en la Ciudad (de Buenos Aires) subía”. El mandatario bonaerense agregó: “Por eso me parece que hay que ser muy atrevidos para tratar de dar cátedra sobre este tema, como lo hace el candidato (Diego) Santilli, que es (sic) el responsable de la seguridad en la ciudad de Buenos Aires”.

“La campaña de odio y violenta se ha extendido estos días a la cuestión de la inseguridad. Quiero quiero dedicarle un párrafo a esto. Es algo grave, cada pérdida, cada robo, nos llena de dolor. Y ahora estamos en este tramo de la campaña observando que más allá de eso, tratan de lucrar con el dolor, con la angustia, de jugar electoralmente con la tragedia de las familias argentinas”, introdujo.

Enseguida prometió: “Nunca, pero nunca, pero nunca, los que formamos el campo popular vamos a caer tan bajo como para lucrar con el dolor del otro. Y quiero decir que las estadísticas no solucionan los problemas, pero cuando uno mira los números, lo que observa es que en el último tiempo ha bajado 25% la tasa de delitos evitables y en la etapa anterior subió 83%”, remarcó el Gobernador.

Mientras Kicillof sentaba postura sobre el debate que se generó tras el asesinato del kiosquero de Ramos Mejía, que despertó protestas y críticas a la gestión del ministro de Seguridad, Sergio Berni, en la platea varios funcionarios reaccionaron con sorpresa frente a las palabras del Gobernador, entre ellos el jefe de Gabinete Martín Insaurralde y el intendente de Ezeiza, Alejandro Granados.

En su discurso, Kicillof también rechazó las acusaciones de que su gestión facilitó la liberación de presos. “Dicen que vinimos a soltar presos, miren, de nuevo las estadísticas lo desmienten, no es así. Además, poner alguien en prisión o sacarlo es algo que resuelve la Justicia. Por eso podrían hablar con el jefe de los fiscales de la provincia de Buenos Aires, funcionario puesto por Vidal y que hoy no quiere irse”, dijo en referencia a Gerardo Conte Grand.

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