Solo en Off: Francos no quiere cambiar de oficina y su “cintura” recibe elogios peronistas
Lejos de sus aliados, Larreta va por la resiliencia; Alberto Fernández pide apoyo a la Patria Grande; con el guiño de Milei, Epstein va por la DAIA; las cartitas que llenan el bolsillo de Cascallares
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No fue, por cierto, una semana más para Guillermo Francos, el flamante jefe de Gabinete de Ministros, asumido formalmente el lunes pasado.
Concentrado en la aprobación de la Ley Bases y el paquete fiscal, que se tratarán esta semana en el recinto del Senado, Francos recibió a distintos gobernadores en el despacho de la planta baja destinado al ministro del Interior, que venía ocupando hasta el momento. Más allá del golpe que, para su espíritu dialoguista, significó la derrota con la oposición en Diputados por la fórmula de movilidad jubilatoria, Francos también tuvo que encargarse de desactivar un paro de trenes, anunciado para el jueves, y que finalmente no se concretó.
En relación al espacio físico donde desarrolla sus tareas, Francos se siente cómodo en su actual despacho, por lo que hasta el momento descarta subir un piso para ocupar las oficinas que, hasta su renuncia, utilizaba su antecesor, Nicolás Posse.
“No se va, se queda ahí donde está. Recibe mucha gente por día, y ahí tiene cerca a ceremonial, al secretario Lisandro Catalán, la oficina de prensa”, cuentan voces cercanas a Francos, aunque nadie descarta que, si hay un pedido específico del presidente Javier Milei, el ministro suba un piso y ocupe esa oficina, cercana a la del Presidente y que el viernes aún se estaba vaciando.
Esa oficina, cuentan en la Casa Rosada, está en una zona más retirada de Balcarce 50, con menos visibilidad y menos movimiento de personal, fundamental para Francos y su equipo.
Dispuesto a continuar con las reuniones con gobernadores –este lunes prevé pasar el mandatario de Catamarca, Raúl Jalil, y le seguirán otros antes del fin de semana– Francos se llevó en su primera semana los impensados elogios de Omar Maturano, el dirigente peronista e histórico líder de los ferroviarios de La Fraternidad, que llegó enojado a Balcarce 50 y se fue, un par de horas después, con la decisión de posponer la medida de fuerza.
“¿Lo ubicas a Rojitas? Es igual, la misma cintura”, bromeó Maturano con la prensa al salir de la reunión con Francos, donde también dio a entender que se posponía el paro, planteado originalmente para el jueves que pasó.
La mención de Maturano a Ángel Clemente Rojas, centrodelantero e ídolo de Boca Juniors en la década del sesenta, le sirvió al gremialista para alabar la vocación por la negociación del Jefe de Gabinete.
“En todo caso, es más parecido a [Ariel] Ortega”, retrucaron desde el Ministerio del Interior, atentos al fanatismo de Francos por el club River Plate, pero sin rechazar los elogios.
Lejos de sus aliados, Larreta va por la resiliencia
Entre viaje y viaje al exterior (estuvo dando charlas en universidades de Estados Unidos como Harvard, y volverá allí en un par de semanas), Horacio Rodríguez Larreta aprovecha el tiempo libre, luego de décadas en cargos públicos.
El exjefe de gobierno porteño asegura, entre café y café –en Palermo y Barrio Parque, entre otros barrios– que lo suyo no es sólo lamentarse por la derrota en la interna de Pro contra Patricia Bullrich, que lo dejó afuera de su gran sueño presidencial. “Aprovecha para leer y estudiar, porque dice que la gestión te embrutece”, cuenta uno de sus fieles colaboradores, que lo vio con un par de libros con sugestivos títulos bajo el brazo: Dignos de ser humanos, de Rutger Bregman, y Resiliencia, inteligencia emocional, de una colección editada por Harvard.
El primero le gustó, ya que “asegura que el ser humano coopera más de lo que destruye”, y el segundo le sirve luego del golpazo que significó su derrota en la interna de Pro. Lejos de Mauricio Macri, que “le entregó el Pro a [Javier] Milei”, el exjefe de gobierno asesora a gobernadores de Juntos por el Cambio y rehúye contactos con pares del centro político.
Alberto Fernández pide apoyo a la Patria Grande
Activo y muy enfático vieron al expresidente Alberto Fernández el domingo de la semana pasada, en el búnker ganador de Claudia Sheinbaum, presidenta electa de México.
Al igual que el expresidente de Bolivia Evo Morales y el dirigente chileno Marco Enriquez-Ominami, Fernández tuvo una conversación privada con Sheinbaum, en la que también habló de Javier Milei y la situación en Argentina.
“Lo vi concentrado en la pendiente peligrosa en que desciende Argentina”, contó uno de sus interlocutores. Sin abandonar por ahora su estadía en Madrid, Fernández pidió “unidad y propuestas de bienestar” para que el progresismo vuelva al poder.
Prometió apoyo al grupo de Puebla, que encabeza Ominami, más allá de que el regreso del kirchnerismo aparezca hoy en los sondeos como una posibilidad remota.
Con el guiño de Milei, Epstein va por la DAIA
En el inicio de su extensa participación en el encuentro del Latinoamerican Económic Forum, en Parque Norte, donde habló durante una hora ante un auditorio afín, el presidente Javier Milei no se olvidó de agradecer de modo efusivo a Darío Epstein, el empresario y consultor que, al igual que en las nueve ediciones anteriores, se encargó de la organización del evento, que reunió a varios de los empresarios más importantes del país.
“Quiero agradecer por el laburo enorme, gigante, que lleva adelante mi querido amigo Darío Epstein”, dijo el Presidente, mientras el consultor le devolvía las gracias desde las primeras filas del Golden Center, repleto de empresarios e integrantes de ramas ortodoxas del judaísmo.
No se trató, por cierto, de una casualidad: con el apoyo de entidades como Jabad Lubavitch, receptora de las ganancias que dejó el evento, y según distintas fuentes comunitarias, Epstein está anotado para suceder a Jorge Knoblovits al frente de la DAIA en las próximas elecciones, en principio pautadas para octubre.
“Tiene el apoyo de Milei y de los sectores ortodoxos, aunque en la DAIA votan más de cien instituciones”, aseguró sin triunfalismo anticipado uno de los dirigentes que apoya su postulación. En principio, Epstein tendrá oponentes del actual oficialismo comunitario, aunque aún no se formalizaron las candidaturas.
Las cartitas que llenan el bolsillo de Cascallares
Acostumbrado a las recorridas personales en las calles de su barrio, mientras hace las compras los fines de semana o simplemente charla con los vecinos que se le acercan, el intendente peronista de Almirante Brown, Mariano Cascallares, suele tomar en esos encuentros casuales la temperatura de su distrito.
En las últimas semanas, Cascallares tuvo que hacer más lugar en sus bolsillos, que quedaron repletos de cartitas y no precisamente para felicitarlo por la gestión de su municipio. “En su mayoría reclaman trabajo, changas, lo que sea”, cuentan desde el equipo del intendente de esa zona caliente del sur del conurbano bonaerense.
Desde la intendencia calculan que los reclamos de trabajo y asistencia están en un pico más que elevado, y lo atribuyen al gobierno de Javier Milei, que redujo a cero la inversión en obras públicas nacionales en ese municipio, como en la mayor parte del territorio de la provincia. De buena sintonía con el gobernador Axel Kicillof, a quien apoya en su proyecto presidencial, Cascallares no sólo lee cartitas: también se anota para suceder al gobernador bonaerense, en 2027.
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