Sergio Massa reforzó su alianza con el santiagueño Gerardo Zamora, a quien elogió por su gestión
En su rol de candidato presidencial, el ministro de Economía visitó la provincia norteña y defendió la labor del gobernador, pese a que lo había cuestionado duramente cuando era oposición
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SANTIAGO DEL ESTERO.- “Y aunque intentaron doblegarnos con el látigo y la billetera no lo lograron y por eso el pueblo de La Banda eligió a Pablo como su intendente”. Estas palabras pertenecen a Sergio Massa y fueron dichas hace casi 9 años, en agosto de 2014, cuando su delfín local y actual presidente del Frente Renovador nacional, Pablo Mirolo, ganó las elecciones municipales en la ciudad de La Banda, la segunda en importancia en la provincia, al derrotar a la candidata del oficialismo provincial que encabeza Gerardo Zamora, uno de los gobernadores que fue crucial para que el ministro de Economía sea hoy el candidato a presidente de Unión por la Patria.
El destinatario de la frase “con el látigo y la billetera” a la que hizo referencia Massa fue nada más y nada menos que Zamora, uno de los rostros visibles de la liga de gobernadores que trabajó para bajar la postulación de Eduardo de Pedro e impulsar al tigrense. Si se aplica lo dicho por Cristina Kirchner, que “en política los agravios prescriben a los 6 meses”, 9 años parecen una eternidad y tiempo más que suficiente para que hoy, casi una década después, Massa y Zamora formen un vínculo político muy fuerte.
En el medio fueron pasando muchas cosas. Massa expulsó del Frente Renovador a Eduardo “Chabay” Ruiz luego que este, en un juicio abreviado, reconociera haber abusado sexualmente de una mujer que le fue a pedir trabajo. Así, Mirolo se convirtió en el referente indiscutido del “massismo” y se vio obligado a entablar un diálogo “institucional” con el gobierno santiagueño, en aquel entonces en manos de Claudia Ledesma Abdala, esposa de Zamora.
Las posiciones se fueron acercando. Massa visitó Santiago en varias oportunidades para apoyar a Mirolo, pero incluso públicamente reconocía la figura de Zamora como líder político y hasta le auguraba proyección nacional, algo que el mismo santiagueño siempre se ocupó de desestimar al afirmar: “No me da el cuero”.
Las vueltas de la política quisieron que, en su momento, Zamora se pusiera al frente de los gobernadores que pidieron el ingreso de Massa al Ministerio de Economía. El santiagueño fue una pieza clave de presión, negociación y acuerdo para que ahora el exintendente de Tigre sea “el candidato de la unidad” del oficialismo y relegar a De Pedro, impulsado por La Cámpora.
Massa arribó anoche a Santiago del Estero y participó, junto a Zamora, Claudia Ledesma, Daniel Scioli y una multitud de santiagueños, de la vigilia y posterior celebración por los 470 años de la capital santiagueña, la más antigua del país, la “Madre de Ciudades”. El propio Zamora, jugando a fondo, declaró: “Estoy convencido de que Sergio Massa va a ser el presidente y que tendremos el apoyo de los santiagueños y del país”.
“El país es un barco en medio de una tormenta y Massa es un piloto de tormenta que tiene la capacidad de llevar el barco a destino. Veo la opción de la esperanza, eso es Massa, frente a la desesperanza que vemos en los otros candidatos”, sentenció el radical K santiagueño, actor crucial en la definición para la candidatura del exalcalde de Tigre.
Elogios a Zamora y críticas a la prensa
En la mañana de hoy, antes de regresar a Buenos Aires, Massa participó de un plenario del Frente Cívico, el martillo electoral de Zamora, en donde hace casi 20 años conviven radicales y peronistas, en apoyo a su candidatura. Allí, al tomar la palabra, se deshizo en elogios a la gestión del zamorismo, cargando en contra de “la prensa porteña y los medios que les molesta el crecimiento de Santiago del Estero”. Zamora afronta su tercer mandato como gobernador y en el medio intercaló cuatro años de gestión con su esposa, la senadora Ledesma, una espada de confianza de Cristina Kirchner en el Senado.
En un encendido discurso, en el que cuestionó a la gestión de Mauricio Macri, Massa también reconoció “errores en la gestión” y pidió a la militancia salir a “buscar y abrazar a los desencantados”.
“Atrás está los que creen que el interior y Santiago no tienen derechos, que cuestionan el autódromo de Termas de Río Hondo y el estadio más lindo y moderno del país como es el Madre de Ciudades. Pero adelante está el federalismo, adelante está nuestra responsabilidad de generar trabajo y aumentar la inversión privada, aumentar las becas Progresar y generar más conectividad”, dijo el ministro de Economía en tono electoral.
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