Sergio Berni propuso controlar con un chip a los presos que salen de la cárcel
El senador provincial y exministro de Seguridad bonaerense opinó sobre los operativos de Bullrich por los cortes de calle y elogió al presidente salvadoreño, Nayib Bukele
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Pese a que ya no es ministro de Seguridad bonaerense, el actual senador provincial Sergio Berni hizo un análisis sobre los últimos hechos violentos que se dieron en el territorio que gobierna Axel Kicillof y propuso poner un chip a los presos que salen de la cárcel para tener un mayor control sobre ellos. Asimismo el dirigente de Unión por la Patria (UP) elogió la política de mano dura aplicada por Nayib Bukele en El Salvador para contener a los delincuentes y coincidió con la ministra de Seguridad nacional, Patricia Bullrich, con que las calles no se cortan, aunque marcó algunas diferencias procedimentales.
Por otra parte, trazó un duro pronóstico para los próximos meses, cuando aseguró que se vendrá una “etapa de mucha violencia” acelerada por la caída de los ingresos y la crisis económica.
Convencido de que los presidiarios deberían conseguir su libertad no solo si cumplen los años de condena, sino también si están “totalmente resocializados” y tienen capacidad económica para mantenerse a ellos y a sus familias, Berni además opinó que debería existir un sistema de control satelital para un mejor seguimiento de estas personas. “¿Cómo puede ser que una vaca tiene un chip que la controla cuando entra en celo y nosotros no podemos controlar electrónicamente a una persona que salió de la cárcel? No se hace porque no se quiere”, enfatizó el exministro en Radio La Red.
“[El preso] no puede salir sin un control electrónico de vigilancia. En este siglo de las telecomunicaciones es inadmisible que una persona entre y salga de una cárcel y ni siquiera tenga un control electrónico para su custodia”, se quejó y siguió bajo esa postura: “Créanme que con eso resolvemos buena parte del problema; el otro es la Justicia”. No obstante, aclaró sobre esto último que la política debe darle las herramientas al Poder Judicial y pidió, por ejemplo, que se cubran las vacantes de aquellos tribunales que están libres.
Propuso esto ya que, según explicó, en la Argentina existe un “mal diagnóstico” cuando se cree que el problema de la inseguridad se resuelve con más policías y más patrulleros. “Tenemos que hacer un abordaje fuerte de la Justicia y el Servicio Penitenciario. Todo el sistema ha fracasado. Todos [los delincuentes] tienen antecedentes. ¿Es un problema de la Policía? No, porque hubo un policía que los detuvo. Después hay una Justicia que no actúa y un Servicio Penitenciario que es un desastre. El secreto es cómo hacer para controlar a los que salen en libertad. Está el patronato de liberados, que prácticamente no existe”, explicó para justificar su idea de vigilar a los liberados.
Duro pronóstico
En tanto, pronosticó: “Ahora se viene una etapa de mucha violencia”. Con la previa aclaración de que no quería generalizar, Berni indicó que la caída brusca de los ingresos genera “más oportunidades” para el delito. “Cuando bajan los ingresos y no alcanza, un padre que ve que sus hijos no tienen para comer, si tiene que salir a robar, sale a robar. Y eso genera más violencia, porque la desigualdad genera violencia”, analizó.
Marcó incluso que luego esas personas realizan actividades delictivas “amateur”, que son las que afectan hoy a la provincia de Buenos Aires y que son difíciles de abordar. “El delito amateur es desorganizado, inclusive a la inteligencia criminal le cuesta llegar desde la prevención por lo precario. El que ingresa al delito amateur es más violento que el crimen organizado”, comparó en relación con los delitos complejos, como los secuestros extorsivos o los robos de bancos.
Tras una seguidilla de hechos de inseguridad en la Provincia -desde el crimen de Uma hasta el homicidio del hincha de Chacarita el último fin de semana- Berni aclaró que las estadísticas van a la baja, pero que por la tecnología ahora los hechos tienen más resonancia y eso hace que parezca que hubiera más. “Cuando asumí en el ministerio hace cuatro años tenía en promedio cuatro homicidios todos los días. Los bajamos a tres. El desafío de este ministro [por Javier Alonso] es bajarlos a dos. ¿Esto tiene que ver con una justificación? No, pero no es que se dispararon los delitos, hoy la tecnología permite verlos prácticamente en tiempo real. En el peor momento, la Provincia tenía 13 homicidios por día. No nos jactamos de esto, es una tragedia y un problema”, dijo Berni.
Cortes de calle
Por otra parte se mostró de acuerdo con Bullrich en que las calles no deben cortarse, pero recordó que en su época de ministro, cuando él montaba operativos, también se presentaba en el lugar. “Ahí está la mano del conductor. Están aquellos que salen y le dicen a la Policía ‘la calle no se corta, vaya y resuelva’. Y la Policía resuelve a palos. Usted me habrá visto trabajando en los cortes. Tiene que ver con asumir la responsabilidad penal y civil, la Policía se siente totalmente desamparada si no y empiezan los problemas. Y por el otro lado tener una visión política de lo que está pasando, que no porque tenga que desalojar una calle el remedio sea peor que la enfermedad”, indicó.
Pidió también Berni diferenciar entre aquellas protestas vinculadas a una “mirada extorsiva, como las de los piqueteros” con aquellas manifestaciones sin organización, que se dan por un motivo concreto, que las fuerzas federales deberían dejar transcurrir -de acuerdo a su punto de vista- sin inconvenientes ni incidentes. “Ahí está el ojo clínico del que tiene la responsabilidad de conducir las fuerzas federales en saber hasta cuándo tiene que actuar y cuándo entender que es un reclamo que nada tiene que ver con la extorsión, que es una manifestación espontánea masiva y que la gente necesita expresarse”, comparó.
No obstante, indicó sobre los destrozos que la semana pasada hicieron manifestantes de la izquierda, cuando rompieron las veredas de la Plaza de los Dos Congresos para arrojarle los pedazos después a los agentes, en medio de la discusión por la ley ómnibus: “Si usted me pregunta por los locos estos que estaban rompiendo la vereda en el Congreso, no tengo ninguna duda de que tienen que estar presos. Dejar a cinco locos que rompan la vereda para tirar piedras... El hecho de por sí es un exceso y me parece que la Policía debería haber actuado mucho más rápido, no esperar semejante provocación”.
Dijo el exministro entonces que con Bullrich tiene “una visión muy parecida”, aunque aseguró que su mirada es “más profunda”, dado sus años de experiencia. “Soy de las personas que se hizo cargo de lo que hacía, por eso me veían en la calle todos los días trabajando. No soy de los que dice ‘vayan y resuelvan’, porque así terminan las tragedias en la Argentina. Uno tiene que dar una orden, pero no solamente llevarla adelante, sino supervisar y hacerse responsable por lo que pasa”, sostuvo.
Mientras, luego de que Bukele fuera respaldado por el 85% de los salvadoreños en las elecciones del domingo, Berni avaló la estrategia de mano dura del presidente de ese país, que encarceló a los integrantes de las maras y bajó así la tasa de homicidios que atemorizaban a buena parte de la población. Seguro de que el mandatario dio una “respuesta correcta”, Berni consideró que en la Argentina el delito es demasiado precario para tomar medidas tan extremas. “Tenemos que avanzar a un modelo similar con las características de la Argentina, que no tiene las mismas consecuencias que las de una pandilla”, aseveró.
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