Senado: la neuquina Lucila Crexell se alinea con el gobernador Rolando Figueroa y complica los planes de Victoria Villarruel
La senadora armará un monobloque tras cerrar un acuerdo para coordinar sus posturas con las necesidades de la provincia; la jugada abre un nuevo frente de negociación para la vicepresidenta
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En una movida estratégica que afectará de manera directa la gestión al frente de la Cámara alta de Victoria Villarruel, la senadora Lucila Crexell (Neuquén) formalizó esta semana una alianza con el gobernador de su provincia, Rolando Figueroa, y abandonará el bloque Cambio Federal, que preside el peronista disidente Juan Carlos Romero, uno de los legisladores más proclives a apoyar a la administración de Javier Milei.
La jugada podría convertirse en un dolor de cabeza para Villarruel, ya que le abrirá un frente más a la hora de negociar el armado de las mayorías necesarias para mostrar una gestión legislativa exitosa en el Senado, uno de los pilares en los que se sustenta la consolidación del armado político de la vicepresidenta.
Este mismo jueves, Figueroa se reunió con los gobernadores de Chubut, Río Negro, La Pampa y Tierra del Fuego para marcar fuertes límites a las reformas que el proyecto de ley ómnibus plantea sobre la producción de hidrocarburos. Los mandatarios dejaron en claro que son los principales productores del país (el 90% del gas y el petróleo), que los recursos pertenecen a las provincias por la Constitución y que exigirán ser compensados económicamente por ese aporte estratégico que hacen al país, sumado a las divisas que generan por el turismo y la minería.
“Coordinamos volver a un esquema similar al que siempre tuvo Neuquén, de un gobernador muy activo en defensa de los intereses de la provincia con un brazo político en el Senado que responda a las iniciativas del gobernador para trabajar coordinadamente”, explicó Crexell en diálogo con LA NACION.
La alianza entre gobernador y senadora quedó escenificada en una foto que ambos dirigentes se tomaron el último martes en la zona de San Martín de los Andes. La imagen fue distribuida por el gobierno provincial, que tendrá con Crexell una carta de negociación con el Gobierno nacional de la que carecía hasta este momento.
Tanto Figueroa como Crexell son exdirigentes del Movimiento Popular Neuquino (MPN), partido que abandonaron en diferentes momentos en disidencia con el exgobernador Omar Gutiérrez, al que acusaron de cerrarle la puerta a la disidencia y a la competencia interna en el histórico partido provincial fundado por los hermanos Felipe, Elías y Amado Sapag.
De hecho, la senadora es hija de Luz Sapag, exsenadora y exintendenta de San Martín de los Andes, fallecida en 2010 en un accidente automovilístico cuando estaba al frente de su tercer período como jefa comunal de la turística ciudad patagónica.
Crexell está ingresando en la recta final de su segundo mandato, le quedan dos años, como senadora. Llegó a la Cámara alta en 2013 por el MPN. Seis años después, consiguió la reelección en la boleta de Juntos por el Cambio. Siempre mantuvo un perfil crítico con las administraciones kirchneristas.
Pero también encontronazos con los socios de la ahora disuelta alianza opositora, con quien desplegó en algunos momentos una relación tormentosa que siempre se mantuvo en sordina. No obstante, en los últimos tiempos esos cortocircuitos empezaron a quedar a la vista.
Primero, por la sesión en la que el kirchnerismo logró darle acuerdo a la camarista Ana María Figueroa a pesar de que la Corte Suprema había decidido jubilar a la magistrada. Esto provocó malestar al interior del interbloque, sobre todo porque el entonces oficialismo se encargó de dejar al descubierto su ausencia retirando a una senadora del recinto para que la votación concluyera igualada y tuviera que desempatar la entonces presidenta provisional, la santiagueña Claudia Abdala. Al final, la jueza terminó aceptando el retiro y la movida impulsada por Cristina Kirchner no sirvió para nada.
La ausencia de la Senadora Crexell en la sesión de este jueves 28 de septiembre, significó la ausencia de la representación de miles de argentinos que la votaron para defender sus intereses y los del país. Esa ausencia es efectivamente una falta. Una falta a los valores…
— maxi ferraro (@Maxiferraro) September 29, 2023
El segundo incidente fue su apoyo público, a días del balotaje, a la candidatura de Sergio Massa. Para muchos miembros de Juntos por el Cambio el pronunciamiento no hizo más que alimentar las sospechas acerca de que su ausencia en la sesión en la que se aprobó el pliego de Figueroa estuvo motivada por una supuesta alianza con el ministro de Economía y candidato presidencial de Unión por la Patria. La legisladora siempre negó esos rumores.
Ahora, Crexell decidió armar un monobloque y abandonar Cambio Federal, el conglomerado de cuatro senadores desprendidos de Juntos por el Cambio que preside Romero, con quien la neuquina venía manteniendo diferencias por la tendencia del salteño a negociar en bloque los votos de la bancada.
Con su separación, Crexell se convertirá en una herramienta de negociación para Figueroa a la hora de sentarse a hablar con el Poder Ejecutivo. Un voto clave en un Senado donde La Libertad Avanza apenas tiene siete senadores y depende como del oxígeno para respirar de cada uno de los votos del resto de las fuerzas políticas de la Cámara alta para vencer la resistencia del kirchnerismo, que se paró en un rol de cerrada oposición al gobierno de Milei.