Ingresó al Senado el pliego de Daniel Rafecas para la Procuración
En lo que se anticipa como una nueva pulseada política del Gobierno con la oposición, el presidente Alberto Fernández envió hoy el Senado el pliego que nomina al juez federal Daniel Rafecas como Procurador General de la Nación.
El cargo se encuentra vacante desde diciembre de 2016, cuando renunció la kirchnerista Alejandra Gils Carbó como consecuencia de las presiones de la administración de Cambiemos.
Para conseguir el acuerdo del Senado, la designación de Rafecas deberá obtener el apoyo de los dos tercios de los presentes de la Cámara alta.
Se trata de una mayoría compleja si se tiene en cuenta que el interbloque de Juntos por el Cambio y sus aliados suma 27 de los 72 senadores que integran la Cámara alta.
Hasta el momento, el conglomerado opositor se ha negado a anticipar una posición, argumentando que lo harán después de escuchar al candidato en audiencia pública ante la Comisión de Acuerdos.
Eso sí, la mesa política de Juntos por el Cambio ya anunció que la coalición entre macristas y radicales votará de manera unificada. "No hay lugar para librepensadores en este tema", le dijo LA NACION el jefe del interbloque de senadores, Luis Naidenoff (UCR-Formosa).
Las instancias que deberá superar Rafecas
El pliego remitido por el Poder Ejecutivo ingresó hoy por Mesa de Entradas de la Cámara alta. Sin embargo, recién tomará estado parlamentario en la sesión prevista para este jueves.
Esa será la señal de partida para que el oficialismo ponga en marcha a la Comisión de Acuerdos, que preside la hiperkirchnerista Anabel Fernández Sagasti (Mendoza) y será el escenario de debate del pliego que nomina a Rafecas para convertirse en jefe de los fiscales.
Desde el año 2003 el Senado repite el procedimiento establecido por el Poder Ejecutivo en el decreto 222/03, según el cual se abre un período de 15 días para que organizaciones y ciudadanos puedan presentar impugnaciones y adhesiones a la candidatura.
En el Poder Ejecutivo, Rafecas sumó más de 500 adhesiones y tres impugnaciones, una de ellas firmada por el exministro kirchnerista Julio de Vido.
Una vez completado este paso, la Comisión de Acuerdos llamará a una audiencia pública, en la que el candidato deberá exponerse a las preguntas de los senadores que buscarán determinar su idoneidad para el cargo.
Una vez realizada la audiencia, el pliego será debatido por la Comisión de Acuerdos, donde el Frente de Todos tiene amplia mayoría para darle luz verde para su tratamiento a la semana siguiente de la firma del dictamen. Tomando en cuenta todo el procedimiento, el pliego podría estar ingresando al recinto a mediados del mes próximo.
Si bien el Frente de Todos tiene amplia mayoría en la Cámara alta, tanto Rafecas como el oficialismo no pueden confiarse.
El antecedente de Daniel Reposo
Es que necesitarán una mayoría agravada de dos tercios cuya llave está en poder de la oposición. En el Gobierno confían en conseguir los votos de algunos senadores con línea directa con los gobernadores radicales, como ocurrió en diciembre con el debate de la ley de emergencia pública.
Sin embargo, en el Senado todavía se recuerda el fracaso de Daniel Reposo. El candidato de Cristina Kirchner para reemplazar a Esteban Righi, que se vio forzado a renunciar como parte de la estrategia para proteger al entonces vicepresidente Amado Boudou, debió declinar su candidatura después del fiasco que fue su audiencia pública.
Reposo no pudo explicar ante los senadores las mentiras que volcó en su currículum y eso le valió el rechazo de una senadora oficialista. Esa negativa resultó clave para que no pudiera alcanzar los dos tercios.
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