Se volvió a suspender el seminario sobre el “lawfare” y la marcha en solidaridad por Cristina
El seminario del Grupo de Puebla estaba previsto para el lunes, a pocas horas del final del Mundial; “No va a ser día de política sino de fútbol”, dijeron cerca de la organización
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LA NACIONMaia Jastreblansky
Las circunstancias nunca terminaron de cuadrar para la reunión del Grupo de Puebla, el acto que iba a tener como oradores a Alberto Fernández y a Cristina Kirchner junto a varias personalidades internacionales. La final de la Copa del Mundo que la Selección disputará el domingo obligó a los organizadores a aplazar el evento, cuyo espíritu era manifestar solidaridad con la vicepresidenta por la condena en la causa Vialidad. Todo se reprogramó para marzo, por sugerencia del Presidente.
“El domingo es la final y el tema es el fútbol, no otro. El lunes va a ser un día para el fútbol, no para la política”, dijo a LA NACION una fuente muy al tanto de la organización del evento que iba a tener lugar en el CCK. La decisión, según pudo reconstruir LA NACION, se tomó anoche tras el triunfo de la Argentina sobre Croacia. Este miércoles, el chileno Marco Enríquez-Ominami -principal organizador del encuentro- se reunió con Cristina Kirchner. Además de cursar las invitaciones para el encuentro del CCK, el chileno esta en Buenos Aires filmando un documental.
Cerca de la vicepresidenta alegaron, no obstante, que el motivo de la suspensión es que “varios participantes tenían problemas de agenda”. Pero lo cierto es que varias personalidades tenían pasajes para este fin de semana. Incluso se especulaba con poder sumar a la expresidenta de Brasil, Dilma Rousseff, al programa del evento.
El evento frustrado
El encuentro del Grupo de Puebla, titulado “Voluntad popular y democracia. Del partido militar al partido judicial, las amenazas a la democracia”, estaba programado para el último lunes. Según la agenda original, la apertura del encuentro estaría a cargo de Fernández, mientras que en el cierre hablaría Cristina.
Pero el viernes pasado Cristina Kirchner dio positivo por Covid-19, y el kirchnerismo anunció que se postergaba una semana, para el 19 de diciembre. Es decir, un día después de la final del Mundial.
El evento hubiera implicado una escena de alta densidad política. Era el escenario ideal para respaldar la contraofensiva de la vicepresidenta contra la Justicia, además de instalar la narrativa vinculada a la proscripción del peronismo que se viene repitiendo desde el momento de la condena.
De hecho, se había planificado una movilización masiva del oficialismo, con una marcha a las afueras del centro cultural para apoyar a Cristina Kirchner. Estaban convocando los intendentes y La Cámpora, además de otras terminales del Frente de Todos.
Por otro lado, el encuentro del Grupo de Puebla contemplaba la participación del Presidente y de su vice. La expectativa política, además, estaba puesta en la posibilidad de que Fernández y Cristina Kirchner volvieran a compartir un escenario y una foto, una imagen que no se ve desde hace seis meses.
El cronograma del evento de Puebla, en principio, atentaba contra esa foto, porque entre la apertura y el cierre del evento estaban previsto paneles por el lapso de casi tres horas. Luego del faltazo de los funcionarios kirchneristas al acto que organizó el Presidente por sus tres años de gestión -en el que dejó ver su ambición por la reelección- un reencuentro público entre el jefe de Estado y la vice parece mucho más difícil.
Ayer, en un comunicado, el Grupo de Puebla anunció la postergación hasta marzo. “El encuentro del Grupo de Puebla, cuya realización estaba prevista para el próximo 12 de diciembre, se posterga hasta el mes de marzo de 2023. La actividad no pudo realizarse en su fecha programaba debido a que la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner había dado positivo en un test de COVID. Con el respaldo e impulso del propio Presidente de la Nación Argentina Alberto Fernández, el Grupo de Puebla organiza este encuentro internacional de solidaridad con la expresidenta Cristina Fernández, frente a la persecución político-judicial de la que ha sido víctima desde 2015, que quedó de manifiesto con la reciente condena judicial en su contra”.
Entre las personalidades internacionales invitadas figuraban el exjuez español Baltasar Garzón; la jurista brasileña Carol Proner; la representante del Centro Latinoamericano de la Justicia y la democracia del grupo de Puebla Giselle Ribocom y el exjuez de la Corte Suprema de la Nación Raúl Zaffaroni. También el expresidente de Colombia Ernesto Samper; el exjefe de Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero; el expresidente boliviano Evo Morales y los también exmandatarios de Ecuador Rafael Correa y de Uruguay José “Pepe” Mujica.
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