Scioli pidió escuchar a la gente, mientras la oposición suma apoyos a otra marcha
Dijo que "no se pueden negar los problemas" expresados en el 18-A; la CGT de Moyano irá pasado mañana al Congreso a protestar contra la reforma judicial
El gobernador bonaerense Daniel Scioli se diferenció ayer de manera clara del Poder Ejecutivo, al admitir que "no se pueden negar los problemas de la gente" manifestados en la multitudinaria marcha del 18 de abril último (18-A) y marcó así un notorio contraste con la presidenta Cristina Kirchner, que sigue sin hacer mención a la protesta a pesar de la catarata de 60 mensajes en Twitter que envió el jueves pasado, cuando viajó a Perú y Venezuela.
La frase de Scioli cobró mayor relevancia en el inicio de una semana que promete alcanzar altas cotas de tensión política. El kirchnerismo ratificó su decisión de avanzar pasado mañana con la sanción de los proyectos más controvertidos de la reforma judicial (reforma del Consejo de la Magistratura, creación de cámaras de casación y limitación de medidas cautelares contra el Estado) en la Cámara de Diputados. Así convertirían en ley estas iniciativas aprobadas por el Senado e impulsadas por la Casa Rosada.
Como respuesta, la oposición convocó a una movilización a la Cámara de Diputados en rechazo al debate exprés del paquete de iniciativas y su eventual sanción. Se trata de un abrazo al Congreso que se realizará en el mismo momento en que la Cámara baja discuta los proyectos.
A la protesta se sumó ayer el secretario general de la CGT opositora, Hugo Moyano. "Marchamos para acompañar a los legisladores que defienden los derechos del pueblo y para repudiar enérgicamente, pero en paz, a aquellos que violan la Constitución Nacional y nuestros derechos fundamentales", sostuvo ayer un comunicado en el que la CGT y el gremio de los empleados judiciales, que conduce Julio Piumato, anunciaron que se sumarán a la protesta contra la ofensiva legislativa kirchnerista.
En tanto, el jefe del bloque de diputados oficialistas, Agustín Rossi (Santa Fe), criticó a la oposición por negarse a debatir la reforma judicial. "Es bastante difícil tener un debate edificante cuando la oposición, incluso antes de conocer el proyecto, había manifestado su voluntad política de oponerse", afirmó el diputado del Frente para la Victoria, bancada que ya decidió que emitirá dictamen favorable a los tres proyectos en un plenario de comisiones mañana y que tratará de convertirlos en ley al día siguiente, menos de una semana después de que el Senado aprobó esas iniciativas.
En medio de este escenario, el gobernador Scioli volvió a mostrar las diferencias que lo separan de la Casa Rosada, sobre todo cuando la situación política del kirchnerismo queda comprometida ante las protestas de amplios sectores de la población por el estilo de gobierno de Cristina Kirchner.
Así, en declaraciones a Radio Mitre Scioli no se anduvo con medias tintas y reconoció que "no se pueden negar los problemas de la gente".
La frase es la contracara de la actitud sostenida por la jefa del Estado, que decidió viajar a Venezuela, con una escala en Lima, a la misma hora de la protesta y que al mismo tiempo que los manifestantes del 18-A ganaban la calle lanzó una catarata de tuits hablando sobre diferentes cuestiones. La verborragia en Twitter continuó ayer con anécdotas sobre su participación en la asunción de Nicolás Maduro. Sobre la protesta, la Presidenta no dijo nada.
Sin medias tintas, Scioli sostuvo que la única forma de solucionar los problemas de la sociedad "es con acciones concretas". "Vivimos una democracia intensa, con mucho debate. Tenemos que comprender y entender los pedidos, como me pasa a mí a diario en la provincia", agregó.
Como si esto fuera poco, Scioli reclamó "mayor colaboración para resolver los problemas de una ciudadanía cada vez más exigente", tras lo cual insistió en la necesidad de "trabajar intensamente para solucionar las demandas de sectores que pueden expresar sus críticas".
Allegados al gobernador bonaerense expresaron ayer a LA NACION que "Scioli siempre escucha a la gente y no dejará de hacerlo por más que en la Casa Rosada haya silencio".
Reforma polémica
En tanto, la tensión política se instalará en la Cámara de Diputados, donde el kirchnerismo quiere convertir en ley los proyectos que el Senado aprobó la semana pasada en un trámite veloz. En menos de nueve días desde su ingreso al Parlamento, el oficialismo aprobó en la Cámara alta los proyectos del Gobierno. Ahora en Diputados, la oposición comenzó a realizar movimientos para tratar de impedir lo que, por el momento, parece un hecho consumado.
Así, un grupo de asociaciones profesionales salieron a juntar firmas para convencer a 12 diputados para que voten en contra y así frustrar la ofensiva oficialista (ver aparte). A eso se sumó el pedido de las diputadas Laura Alonso (Pro) y Elisa Carrió (CC) para realizar una marcha al Congreso para impedir que la Cámara baja pueda reunir quórum y sesionar. Ayer, la CGT opositora tomó el guante y anunció que se sumará a la protesta.
Del editor: qué significa.
Otras noticias de Avance sobre la Justicia
- 1
Los gobernadores de Pro y sus aliados toman por ahora distancia de la alianza electoral con La Libertad Avanza que propuso Milei
- 2
Ajedrez navideño para un 2025 electoral
- 3
Cristina Kirchner cruzó a Javier Milei, Mauricio Macri y Horacio Rosatti con un duro “mensaje navideño”
- 4
Gerardo Werthein diseña una cancillería a su medida, con pocos sobrevivientes de Pro y de Mondino y un perfil comercial