Tras los incidentes, el gobierno nacional y el porteño buscaron acercar posiciones en una tensa cumbre política
Se reunieron Aníbal Fernández, Wado De Pedro y Juan Martín Mena por la administración del Frente de Todos; y Jorge Macri y Marcelo D´alessandro por la gestión de Horacio Rodríguez Larreta
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Con acusaciones cruzadas y frente a la escalada de tensiones entre el gobierno porteño y el kirchnerismo, se reunieron anoche en el Ministerio de Seguridad de la Nación el titular de esa cartera Aníbal Fernández, el viceministro de Justicia Juan Martín Mena y el ministro del Interior Eduardo “Wado” De Pedro con los funcionarios porteños Jorge Macri y Marcelo D’Alessandro, confirmaron fuentes de ambas administraciones a LA NACION. Según supo este medio, se buscó mediante la vía de la política establecer “normas de convivencia” tras el conflicto desatado el espacio público por el pedido de condena a Cristina Kirchner en el marco de la causa Vialidad. Uno de los participantes de la cumbre la calificó como “áspera, dura y difícil”.
Los funcionarios nacionales se quejaron del vallado y los porteños pidieron que quienes se acerquen para apoyar a la vicepresidenta respeten el barrio “sin murgas, ni acampes, ni fuegos artificiales”. “Normas de convivencia. Una reunión que tendría que haber sido al mediodía y no a la tarde, después de los desmanes”, sintetizó un funcionario porteño a este medio. Horacio Rodríguez Larreta pidió luego, en una conferencia de prensa, no tomar a los vecinos como “rehenes” y llamó a los manifestantes a retirarse “pacíficamente” de la intersección de las calles de Juncal y Uruguay.
Mientras la violencia escalaba por la tarde entre los manifestantes que apoyan a la vicepresidenta Cristina Kirchner y la Policía de la Ciudad de Buenos Aires en el barrio porteño de Recoleta, el jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta monitoreaba junto a funcionarios de su administración el delicado panorama que se vivía en la zona y que derivó en enfrentamientos. El episodio terminó con tres dirigentes de La Cámpora detenidos y cinco efectivos policiales heridos. Cristina Kirchner y sus dirigentes afines habían cuestionado por la mañana el vallado desplegado por la Policía de la Ciudad en las inmediaciones de su edificio, y la movilización en su apoyo a la que había convocado La Cámpora en Parque Lezama finalmente se trasladó a la Recoleta.
Según supo este medio, Rodríguez Larreta analizó el escenario en una reunión con el ministro de Seguridad y Justicia Marcelo D’Alessandro, el ministro de gobierno Jorge Macri y la ministra de Espacio Público e Higiene Urbana Clara Muzzio. Cerca del jefe de Gobierno dijeron a este medio que la decisión de desplegar el operativo policial por la mañana en la cuadra donde vive la vicepresidenta “obedeció a los reclamos y denuncias de los vecinos contra la gente que estaba en la calle”.
Pero la concentración de gente y los intentos por quitar el vallado policial derivaron en enfrentamientos con la fuerza de seguridad porteña. Cerca de las 18 horas fueron detenidos en medio de los incidentes, y luego liberados, el diputado provincial del Frente de Todos Matías Molle, el dirigente político Fabian “Conu” Rodríguez -que actualmente se desempeña como vocero en la AFIP- y el exdiputado provincial Facundo Tignanelli, según dijeron a LA NACION fuentes de la organización La Cámpora.
“La única respuesta de las fuerzas de seguridad ante la gran violencia desatada contra ellos fue a través del camión hidrante, utilizando sólo agua”, comunicaron cerca de D’Alessandro. Y justificaron las detenciones por resistencia y atentado a la autoridad.
El episodio escaló la tensión entre la oposición y el kirchnerismo, pero también agitó las aguas dentro de la administración porteña. Mientras los manifestantes reclamaban que la policía se retirara del lugar, en los sectores más duros de Pro esperaban que Larreta siguiera adelante con el operativo policial. Sin embargo, hay quienes cuestionan dentro de la propia administración porteña el despliegue policial y califican al episodio como un error de lectura política. “Se le dejó el escenario servido al kirchnerismo”, se quejó ante este medio un funcionario porteño.
El jefe de gabinete porteño Felipe Miguel brindó una conferencia de prensa en soledad y defendió el accionar policial. Dijo que fue en respuesta a “unos violentos”.
Según reconstruyó LA NACION, cuando la militancia movió el vallado que había desplegado la Policía de la Ciudad de lugar, la policía reaccionó con gases lacrimógenos y activó los camiones hidrantes. El gobernador de la Provincia de Buenos Aires Axel Kicillof estaba en la manifestación, cerca de los hechos, y criticó en diálogo con el canal C5N el accionar policial. También estaban presentes en la movilización el ministro del Interior Eduardo “Wado” De Pedro, el ministro bonaerense Andrés el “Cuervo” Larroque y el dirigente del Frente Patria Grande Juan Grabois.
Este medio pudo reconstruir que el dirigente social Juan Grabois y la legisladora porteña por el Frente de Todos Claudia Neira presentaron acciones de amparo en la justicia de la Ciudad de Buenos Aires. Al finalizar la reunión entre las autoridades porteñas, Marcelo D’Alessandro y Jorge Macri se presentaron en la justicia porteña “para interiorizarse de la situación y dinamizar el tratamiento judicial de los amparos presentados”, informaron fuentes de la cartera de seguridad.
Mientras tanto, militantes del kirchnerismo siguen congregados a metros del edificio donde vive la vicepresidenta Cristina Kirchner.
El operativo de seguridad montado en la madrugada, que incluyó el despliegue de vallas y camiones hidrantes en la cuadra de Juncal y Uruguay, motivó duros rechazos del kirchnerismo y sobre todo de La Cámpora, que mudó la convocatoria para manifestarse en apoyo a Cristina Kirchner de Parque Lezama a la esquina de Juncal y Paraná, en Recoleta. La militancia empezó a llegar cerca de las 14 horas y con el correr de las horas miles de personas colmaron las inmediaciones del edificio.
Mientras tanto, anoche militantes del kirchnerismo seguían congregados a metros del edificio donde vive la vicepresidenta Cristina Kirchner. Aunque Rodríguez Larreta se mostró acompañado de varios dirigentes de Juntos por el Cambio cuando habló a la prensa, en las últimas horas de la jornada, en el gobierno porteño primaba el malestar que dejaron los incidentes desatados en las calles, con algunos cuestionamientos a la decisión de instalar el vallado en Juncal y Uruguay.