Restricciones por el coronavirus: el gobierno porteño analiza medidas más fuertes, incluso cerrar escuelas
Horacio Rodríguez Larreta evalúa con su equipo disponer nuevos cierres ante el aumento de contagios, que llega en medio de un “amesetamiento alto” de casos
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El gobierno porteño analiza medidas más restrictivas ante el avance del coronavirus; estudia incluso la posibilidad de cerrar las escuelas, una medida siempre resistida por Horacio Rodríguez Larreta. Según adelantó el ministro de Salud de la Ciudad, Fernán Quirós, buscarán coordinar medidas con la Nación y la provincia de Buenos Aires.
“Lo estamos evaluando. Nada está descartado”, dijo a LA NACION una fuente del gobierno de la ciudad. El motivo para estudiar nuevos cierres es que, en medio de la segunda ola de coronavirus, hay un “amesetamiento alto” de casos al que se sumó, en las últimas horas, una suba en los contagios “pequeña, pero preocupante”, según sostienen en la Ciudad.
El ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, afirmó: “Estaremos muy atentos estos días. Si la tendencia al ascenso continua, creemos que tenemos que dialogar sobre otras medidas para evitar que continúen ascendiendo. Si los casos no bajan en las próximas 72 horas, entonces acompañaremos las medidas de la Nación”.
“Necesitamos seguir bajando los casos. De acuerdo con lo que veamos en los próximos días vamos a proponer medidas, pero lo importante es que bajen los casos”, dijo el ministro.
El futuro de las clases
Con respecto a las clases presenciales, Quirós sostuvo: “Sabemos que si se cumplen muy bien los protocolos de presencialidad, los contagios dentro de la escuela son muy poco posibles”. Pero agregó: “Si vamos a una etapa muy intensiva, seguramente la escuela puede acompañar. Eso depende de cómo esté la situación epidemiológica en los próximos días. Lo coordinaremos con Provincia y Nación. Sería lo último que propondremos cerrar, pero depende de la decisión que tomemos entre todos. Hoy no se descarta”.
Quirós reiteró que “los contagios se producen, sobre todo, en encuentros sociales, familiares o laborales en lugares cerrados” y dijo que es allí donde hay que concentrar las energías.
En cuanto al plan de vacunación, sostuvo que es optimista con la llegada de nuevas dosis y que la semana próxima empezarán a citar a quienes recibieron la primera de Covishield, vacuna que fue importada por la Argentina desde India. Como se detuvo esa importación, la vacunación continuará con dosis de AstraZeneca porque se trata de la misma fórmula.
Consultado sobre los argentinos que se inocularon en el exterior, el ministro dijo que es una “discusión secundaria”. Y afirmó: “Lo que faltan son las vacunas en la Argentina, para los que estamos acá. Lo importante es contar con las vacunas para que nadie tenga que viajar para vacunarse”.
También informó que si bien él es médico, no se vacunó porque decidió “esperar un poco” y ocuparse primero de la vacunación de las personas que están más expuestas al coronavirus.
Los números que preocupan
El ministro insistió en que los números son preocupantes y afirmó: “Veníamos con una media móvil de hasta 2800 casos por día a fines de abril. Hasta hace cinco días venían bajando los casos y habíamos llegado a casi 2000, pero hace cinco días dejaron de descender y desde el viernes tienen un pequeño aumento, siempre hablando en el promedio semana”.