Qué dice el libro que Cristina Kirchner le regaló a Alberto Fernández
La vicepresidenta le obsequió al mandatario un texto que relata las dificultades económicas que atravesó el gobierno de Raúl Alfonsín y, de este modo, envió un mensaje al Presidente
- 4 minutos de lectura'
“Le mandé de regalo al Presidente de la Nación, un libro que se llama “Diario de una temporada en el quinto piso”. Relata las experiencias del gobierno de Alfonsín y sus equipos económicos”. Con esa frase, Cristina Kirchner le mandó este sábado un fuerte mensaje a Alberto Fernández.
“El libro es sobre las crisis económicas del gobierno de Alfonsín”, completó Cristina Kirchner en un mensaje que dejó entrever su preocupación por la situación económica, algo que ya advirtió en distintas cartas, pero, fundamentalmente, la que se difundió luego de las derrotas en las PASO.
Publicado en agosto de 2021, “Diario de una temporada en el quinto piso” es un libro del sociólogo e historiador Juan Carlos Torre, que fue, entre 1983 y 1989, miembro del equipo económico de Juan Vital Sourrouille, primero en la Secretaría de Planificación y luego en el Ministerio de Economía. En el quinto piso está ubicado el despacho del ministro, de ahí el nombre de la obra.
Torre da cuenta a través de sus 544 páginas de las negociaciones con el FMI, las reuniones con los funcionarios de los Estados Unidos, con la CGT, los empresarios y la oposición peronista en los primeros años de la recuperación democrática. Se concentra en la escalada hiperinflacionaria, los debates internos y también en la presión del sector militar.
Cuando Cristina Kirchner lo mencionó este sábado en el marco de un acto de reconocimiento a excombatientes de la Guerra de Malvinas en el Congreso no evitó lanzar una chicana a la portavoz, Gabriela Cerruti, quien había desnudado días atrás la falta de diálogo entre el Presidente y la vicepresidenta.
“Hoy se lo mandé de regalo al Presidente, para que después la vocera no diga que no le regalo nada, viste. Ya veo que el lunes [sale y dice] ‘miren si será mala la vicepresidenta que ni siquiera le da un regalito en su cumpleaños’. Así que le mandé el libro”, expresó.
En una entrevista con LA NACION el año pasado, Torre precisó que el libro pretende “pintar la complejidad de la decisión política, de la gestión económica y y llevar a quienes le interesa la gestión económica a que tengan una relación menos inocente con ella”.
El investigador, que en el inicio de la recuperación democrática, estaba dedicado a la redacción de libros y a la publicación de artículos académicos, aceptó la propuesta de su amigo Adolfo Canitrot, economista, para sumarse al equipo liderado por Juan Sourrouille.
“De algún modo, es un manual para iniciarse en el arte de la decisión. No digo para llegar a hacer una buena gestión, no es el punto, pero para iniciarse en el arte de la decisión. Yo creo que una gracia del libro es abrir la puerta e invitar al lector y a todos los que aspiran a la gestión a entrar al quinto piso”, contó.
Abril, 1984: (…) “No hay un horizonte temporal dilatado sino un sentido de urgencia permanente que obliga a los gobiernos a rendir examen en el muy corto plazo”.
5 de noviembre de 1983: “El 30 de octubre se rompió el hechizo electoral que pesaba sobe el país: Alfonsín ganó, el peronismo perdió. (...) “La derrota ha golpeado su natural soberbia y actualmente asistimos al enjuiciamiento de ´los mariscales de la derrota´ (...) El peronismo ha probado ser, como todo el mundo, electoralmente mortal”.
Torre señaló que el objetivo del gobierno de Alfonsín, tras la dictadura, era “encuadrar la historia argentina en el marco de la vigencia de las instituciones democráticas”. Pero, admite, que esa aspiración chocaba con otras situaciones en la gestión económica. “Era un condicionamiento adicional a la deuda externa, a los términos de intercambio, a la puja distributiva, a los poderes corporativos”.
Sobre aquellos años, amplió: “La gestión pública permanentemente es asaltada por la ilusión. Y nosotros, como equipo económico, teníamos una sensación de soledad de nuestros esfuerzos con relación a los radicales, que si bien nos respaldaban por disciplina, no estaban en la misma sintonía”.
En mirada retrospectiva, Torre expresó que la experiencia en el Gobierno “educa” y planteó reparos a la crítica que se le suele hacer a los dirigentes políticos sobre “el cortoplacismo” y la supuesta renuncia a la búsqueda de objetivos a largo plazo.
“Esa experiencia [en el Gobierno] en general, consiste en administrar las presiones de una economía casi siempre en emergencia, un aparato estatal desmembrado y un escenario político turbulento. A eso se agrega un calendario electoral demasiado exigente que obliga a rendir cuentas cada dos años. En esas circunstancias es difícil levantar la mirada hacia el largo plazo y sostenerla en el tiempo”, manifestó.
Otras noticias de Hoy
Más leídas de Política
"Guardia pretoriana". Preocupación en los intelectuales por la idea de crear “un brazo armado libertario” para defender al Gobierno
Análisis. Milei, entre Lula y el Gordo Dan
"Ficha limpia". Fracasó la sesión para discutir el proyecto que preocupa al kirchnerismo
“Una mujer tremenda”. Yuyito González contó que participó de una cena con Meloni y Milei en la Quinta de Olivos