Primeras críticas al Gobierno por su relación con la prensa
Alberto Fernández rechazó la acusación
La diputada nacional y líder de ARI, Elisa Carrió, denunció que el gobierno nacional ejerce "presión sobre la prensa" y dijo tener "más de 15 testimonios" que prueban esa acusación.
"Cuando un gobierno llama permanentemente a los periodistas, y especialmente si son periodistas jóvenes que dependen de una gran empresa o medio de comunicación, eso genera una autocensura muy fuerte", dijo Carrió a LA NACION.
La acusación fue rechazada de plano por el jefe de Gabinete, Alberto Fernández.
La polémica comenzó el domingo último, cuando la diputada chaqueña lanzó públicamente la acusación en el programa televisivo "Día D clásico", que se emite por América TV. "Hay una sobreactuación en la comunicación (del gobierno nacional) que no es buena -le dijo en el programa al periodista Jorge Lanata-. Tenemos que cuidar la República. Acá hay una presión a la prensa increíble."
El programa había comenzado con un editorial de Lanata en el que el periodista dijo haber recibido "muchas llamadas" durante la semana y sugirió que entre quienes lo habían contactado estaban el vocero presidencial, Miguel Núñez, y "autoridades del canal".
El tema central del programa era un informe sobre supuestas irregularidades en la gestión del interventor del PAMI, Juan González Gaviola. El autor de la investigación, el periodista Andrés Klipphan, dijo al aire: "Desde 1994 que trabajo en esto y nunca me pasó esto de sufrir tantas presiones".
Llamadas insistentes
Según dijo Carrió, "este caso (la investigación sobre el PAMI) es uno, pero se llama a cada periodista por cada renglón (que escribe), y esto está atentando contra la libertad de prensa y de expresión en la Argentina".
La diputada de Afirmación por una República Igualitaria agregó en el programa de TV que "mucha gente no quiere informar porque tiene miedo a la llamada inmediata de los agentes del Gobierno".
El martes último, en el programa "La cornisa", que se emite por el mismo canal, Fernández escuchó la grabación de "Día D clásico" durante uno de los cortes.
El periodista Luis Majul le preguntó al aire si el Gobierno "llama para apretar a los periodistas".
"No -respondió tajante el funcionario-. La verdad es que si lo hacemos sale muy mal, porque las críticas pululan por ahí. No sé por qué han dicho semejante cosa, pero tengo la tranquilidad de que no lo hacemos."
En diálogo con el programa "Aquí estamos", de Radio Del Plata, Fernández explicó que la intención de los funcionarios al llamar a los periodistas no es presionar sino defender la actual gestión.
"Cuando se publican cosas que no nos parecen ciertas, hablamos con los periodistas para decirles que no consideramos que eso sea verdad y les damos las razones", dijo.
Consultada por LA NACION, Carrió aclaró que su intención fue defender "a los periodistas jóvenes, que podrían ser mis hijos", y que -según dijo- "nadie defiende".
La diputada contó que ella misma fue testigo de una de esas presiones cuando un alto funcionario del gobierno nacional llamó al teléfono celular de un periodista que justo en ese momento se encontraba en la casa de la legisladora. Y agregó que conoce casos de periodistas de "gráfica, radio y televisión".
La denuncia de Carrió está en sintonía con un comunicado de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) difundido a fines de septiembre último.
En el documento se advertía sobre "referencias en cuanto a que las llamadas de queja por parte de funcionarios del actual gobierno a raíz de crónicas o notas publicadas superan, en grado de insistencia, a las del comienzo de períodos presidenciales anteriores".
ADEPA declaró también que existe hoy tanta libertad de prensa -ni más, ni menos- que en los anteriores gobiernos constitucionales.
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