Piqueteros opositores salieron a las calles “en contra del ajuste” y amenazaron con endurecer las protestas
Bloquearon el Puente Pueyrredón y otros puntos neurálgicos en todo el país; criticaron el rumbo económico y se quejaron por la inseguridad; anunciaron tres jornadas de acampe
- 7 minutos de lectura'
Los movimientos sociales no alineados con el oficialismo volvieron a marcar la cancha en las calles. Con el Puente Pueyrredón como punto neurálgico, hicieron este miércoles más de un centenar de cortes simultáneos en todo el país contra la baja de planes, el rumbo económico sujeto a las directivas del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el salto del índice de la pobreza. La avanzada de la Unidad Piquetera coincidió, además, con el recalentamiento de la situación social que se plasmó esta semana en la violenta agresión al ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, en protesta de colectiveros de La Matanza.
“(Victoria) Tolosa Paz no resuelve ninguno de los problemas que están planteados. Eso es lo que ocurrió con los compañeros choferes, por eso los apoyamos y cuentan con toda nuestra solidaridad. Y si tocan a uno de esos choferes que hizo justicia contra el facho de (Sergio) Berni, vamos a salir todos a defenderlo porque estamos hartos de mentiras”, apuntó Eduardo Belliboni, líder del Polo Obrero, que empalmó el reclamo piquetero con el de los colectiveros de la Línea 620, en medio de una escalada de tensión por la inseguridad.
El líder piquetero advirtió que el país atraviesa “un momento muy particular” y añadió: “Sabemos nosotros desde los barrios lo que es la inseguridad, no nos la va a contar nadie, lo que es tener que volver a los barrios cuando oscurece, lo que es tener que salir a la mañana temprano a laburar. Lo sabemos perfectamente, porque, aunque digan algunos que somos vagos, todo el mundo labura. ¿O se creen que con un plan social de 30 mil pesos se puede vivir? Peleamos todos los días para mantener a nuestras familias y contra el ajuste”.
Aunque no pasó a mayores, también se registraron empujones e incidentes entre efectivos policiales y militantes en el comienzo del corte en el Puente Pueyrredón, el centro de las 128 protestas simultáneas en todo el país que la Unidad Piquetera desplegó este miércoles. “Nos pusieron una valla intolerable, no vamos a permitir que la Policía reprima la movilización popular. Cuidado con la represión porque eso lleva a un agravamiento de la situación. La ministra tiene que atender el reclamo que estamos haciendo”, advirtió Belliboni y aconsejó: “Es muy simple: tiene que hacer una reunión”.
Ahora, la puja entre los piqueteros opositores y la Casa Rosada se trasladará a una triple jornada de acampe frente al Ministerio de Desarrollo Social para los próximos 18, 19 y 20 de abril. “Vamos a hacer un terrible piquete nacional porque el ajuste no tiene que pasar”, destacó Belliboni, durante el acto de cierre que encabezó junto a algunos de los principales referentes de los movimientos sociales que protagonizaron las manifestaciones. En ese sentido, desde la Unidad Piquetera apuntaron contra “los sindicatos de la CGT, las CTA y los movimientos piqueteros burócratas que miran para otro lado”.
“Llamamos a los trabajadores a cuestionar a las conducciones de los sindicatos, a que no ocurra como con la UTA que miró para otro lado cuando tuvieron que ponerse los choferes de la (Línea) 620 a pelear. Vamos con todos ellos a pelear por un planteo general y para que de abajo arrastremos a todo el mundo”, arengó la cara principal del Polo Obrero. “El Gobierno se apresta a subsidiar a los grandes exportadores y a castigar a los trabajadores, jubilados y desocupados”, aseveró Belliboni y advirtió que Desarrollo Social prevé “dar de baja a 400 mil planes más” por directivas del FMI.
El nuevo plan de lucha de la Unidad Piquetera se produce pocos días después de que el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) anunciará que la pobreza trepó hasta el 39,2% (18.679.605 personas) y la indigencia al 8,1% (3.859.816 personas) durante el segundo semestre del año pasado. De esa forma, la cifra sumó a 1,4 millones de argentinos nuevos en situación de pobreza respecto al informe del primer semestre del año pasado. A su vez, tan solo en la Ciudad de Buenos Aires, los datos oficiales indicaron que los alimentos subieron un 21,8% en lo que va del año.
Además del Polo Obrero, la movilización también fue impulsada por Barrios de Pie- Libres del Sur (que conduce Silvia Saravia) y el MST- Teresa Vive (a cargo de Mónica Sulle), quienes se movilizaron secundadas por decenas de otras organizaciones piqueteras de la izquierda. “La ministra Tolosa Paz empezó con la Mesa contra el Hambre y es hoy la que lleva el hambre a las mesas. El Gobierno lleva adelante una política de ajuste que hambrea a trabajadores y saquea a jubilados”, fueron algunas de las premisas que impulsaron en un comunicado conjunto.
En el corte del Puente Pueyrredón, que une la ciudad de Buenos Aires con Avellaneda, hubo banderas referenciadas con corrientes piqueteras de Liniers, Florencio Varela, de las villas 1-11-14, 21-14, Los Piletones, los monoblocks de Soldatti y Presidente Perón, entre otros barrios y localidades populares. Por su parte, también se hizo presente Gabriel Solano, legislador porteño por el Frente de Izquierda y de Trabajadores (FIT). “Victoria Tolosa Paz es una provocadora y ahora paso a ser una provocadora que trabaja para el FMI”, apuntó.
El precandidato a presidente hizo hincapié en que la cuarta revisión del acuerdo de facilidades extendidas con el Fondo Monetario implica “un incremento de los tarifazos y una nueva devaluación a costa, entre otros puntos, de menos jubilaciones”. Sobre el riesgo de un estallido social, afirmó que “hoy Argentina es un polvorín”. “Cada vez hay más ricos y más pobres, un laburante cobra un promedio de 40, 50, 60 lucas al mes, manifestó y cerró: “La CGT no hace nada porque está comprada”.
En Mendoza, los piqueteros volvieron a manifestarse, pero sin cortar calles, luego de las sanciones y detenciones que dispuso semanas atrás la Justicia provincial, que después liberó a los dirigentes imputados por obstruir el tránsito. De esta manera, la protesta, comandada por el Polo Obrero y la Unidad Piquetera, se centró en la explanada de Casa de Gobierno, donde se realizó una olla popular. A pesar de que al inicio de la manifestación se registraron discusiones con efectivos policiales, finalmente las autoridades locales permitieron que se instalaran en el ingreso al Palacio Cívico.
Hoy se hace un "Piquetazo Nacional". Los organizadores mismos excluyen a Mendoza porque acá sí se respetan las normas y cortar calles, rutas y caminos es un delito. pic.twitter.com/pQUCdM7cYX
— Alfredo Cornejo (@alfredocornejo) April 5, 2023
Allí, los presentes volvieron a quejarse por los recortes en los planes sociales por parte del Gobierno nacional y reclamaron la entrega de alimentos. De esta manera, en la provincia del oeste argentino al igual que en San Luis, no se registraron interrupciones de accesos en calles y rutas, atentos a la medida judicial del 14 de marzo, cuando los líderes de esas agrupaciones, Martín Rodríguez y Lorena Torres fueron detenidos por una serie de cortes en la vía pública, infringiendo el artículo 194 del Código Penal, por entorpecer el normal funcionamiento del transporte.
Otro de los grandes centros urbanos donde todos los movimientos nucleados en Unidad Piquetera marcharon fue Córdoba, donde las autoridades dispusieron un fuerte despliegue de efectivos de seguridad. Hubo cortes en diferentes puntos de la Capital y también en el interior provincial. En el caso de la ciudad de Córdoba, el reclamo se llevó adelante en medio de una disputa en la Justicia para regular las manifestaciones, a partir de haberle dado lugar a un habeas corpus presentado por vecinos y comerciantes del centro, que afirmaron sentirse afectados por las contínuas marchas.
Con el aumento del 6,6 por ciento que el IPC tuvo en febrero y una inflación interanual que escaló al 102,5%, el valor de la comida ambulante en las marchas piqueteras –usualmente a precios populares– también sintió el impacto de la economía. En el Puente Pueyrredón, la bandeja de arroz chaufa con pollo se conseguía a $800 pesos y las hamburguesas con huevo, a $500. El sándwich de milanesa no bajaba de los $700 y las salchipapas se ofrecían en dos bandejas: chicas, a $800 y grandes, a $1000.
“El sándwich de milanesa de carne lo estoy vendiendo entre $700 y $800. Depende del día. Hoy llegué un poco tarde y por eso lo dejé un poco más barato, pero desde que arrancó el año tuvimos que aumentar casi el doble. A fines del 2022, lo vendía más o menos a $400″, indicó un vendedor que llegó desde la zona sur porteña para recorrer las filas del Polo Obrero sobre la avenida Mitre de Avellaneda, con un carrito lleno de mercadería. “No nos queda otra”, comentó, en medio de los manifestantes.
Otras noticias de Movimientos sociales
- 1
El Colegio de Abogados de la Ciudad repudió la fiesta del fiscal Ramiro González
- 2
Alarma en la Corte Suprema. La Justicia investiga una serie de llamados a comisarias de alguien que se hace pasar por Horacio Rosatti
- 3
La Justicia dispuso el desalojo de la ocupación ilegal en el Parque Nacional Los Alerces
- 4
Elisa Carrió pidió indagar a Sergio Berni acusado de contaminar la escena del crimen de Nisman