Venezuela: a pesar del acercamiento, el Gobierno mantiene vacante la embajada
El giro de la Argentina frente a la crisis en Venezuela se evidenció en críticas a las sanciones contra el régimen de Nicolás Maduro en foros internacionales, en la abstención reciente a una condena de la Organización de Estados Americanos (OEA) y en el retiro del apoyo político a la embajada designada por el presidente encargado Juan Guaidó. Pero ese cambio que adoptó Alberto Fernández todavía no incluyó la decisión que consolidaría el acercamiento diplomático del Gobierno tras años de enfrentamientos: la designación de un embajador. Por el momento, no hay planes de nombrarlo.
La representación argentina en Caracas está a cargo de Eduardo Porretti, encargado de negocios. El diplomático de carrera, que contrajo coronavirus al principio de la crisis sanitaria, ocupa el puesto desde los últimos días de la administración de Cristina Kirchner y se hizo cargo de la embajada durante la gestión de Mauricio Macri. Es, además, uno de los que sobrevivió a último cambio de gobierno. Por ahora, se prevé que conserve el puesto. El Gobierno aún no tiene en agenda regularizar la situación.
Ante la pregunta de LA NACION acerca de la demora en el nombramiento de un representante, voceros de la Cancillería hicieron referencia a la reciprocidad. "Hay [en Caracas] un encargado de negocios, igual que los venezolanos tienen acá", justificaron.
Tras el cambio de administración, Fernández dispuso un giro frente a la situación en Venezuela que lo alejó de las posturas de condena más dura que la Argentina había compartido, hasta diciembre, con los gobiernos de Donald Trump y Jair Bolsonaro. Sin embargo, no convirtió a la Argentina en una aliada como lo había sido en el pasado. La estrategia discursiva del Presidente osciló entre el acercamiento y la distancia.
El Presidente no apoyó sanciones contra el régimen de Maduro y se alejó de la estrategia de ejercer presión diplomática constante para forzar un cambio de gobierno. Al mismo tiempo, se acercó a la postura moderada que promueve México, gobernador por Andrés Manuel López Obrador.
En ese camino, Fernández dejó de reconocer a Guaidó como autoridad venezolana y le quitó las credenciales a la embajadora que él había designado, Elisa Trotta; cuestionó en la ONU la aplicación de sanciones, invitó a funcionarios de peso a la asunción -lo que motivó un primer roce con Estados Unidos- y se abstuvo en la OEA de condenar una decisión de la justicia venezolana que podría afectar las capacidades electorales de los partidos de la oposición.
En paralelo, el Gobierno criticó con dureza en enero episodios de violencia contra legisladores opositores y calificó a los hechos de "inadmisibles para la convivencia democrática".
La embajada en Venezuela se suma a las otras sedes de peso político que todavía no tuvieron novedades desde el cambio de administración, como la del Reino Unido, que aún no tiene representante diplomático designado tras la remoción de Carlos Cersale. La lista también está integrada por Brasil, que si bien tiene como embajador designado Daniel Scioli, el exgobernador todavía no se hizo cargo de la sede en Brasilia. También falta el nombramiento para ocupar la sede de Italia y la confirmación del senado para que Ricardo Alfonsín viaje a España y Alicia Castro, a Rusia.
Porretti se mantuvo en el cargo pese a las fuertes tensiones que hubo durante el gobierno anterior. Luego de los últimos comicios en Venezuela en 2018, muy cuestionados por la comunidad internacional, el entonces canciller Jorge Faurie había convocado al diplomático para que viajara a la Argentina, con lo que se especuló que el gobierno de Cambiemos podría romper todo tipo de vínculo diplomático con el chavismo. Al final, esa decisión no se tomó y el macrismo adujo que no iba a haber mayores cambios en la representación para mantener contacto con los argentinos que viven en ese país.
Otras noticias de Felipe Solá
Más leídas de Política
Milei, con Yuyito. El Presidente acusó a Mondino de cometer un “imperdonable error” y anticipó: "Todos los responsables van a ser echados"
Las críticas a Alfonsín. Natalio Botana: “El estilo del kirchnerismo no ha muerto, permanece en Milei con mucha vitalidad”
Solo en Off. La elegante y “liberal” venganza del despedido embajador Lagorio
Con acusaciones cruzadas. Elecciones en la DAIA: un empresario amigo de Milei enfrenta a un joven dirigente comunitario