Patricia Bullrich y Ricardo López Murphy anunciaron un acuerdo de cara a las próximas elecciones

La titular de Pro, Patricia Bullrich, y el líder de Republicano Unidos, Ricardo López Murphy, acordaron hoy que trabajarán en conjunto e integrarán sus equipos técnicos de cara a las próximas elecciones nacionales. Bullrich aspira a competir por la Presidencia y el diputado nacional se enfoca en la carrera por la sucesión de Horacio Rodríguez Larreta en la Ciudad.

“El potencial de Argentina es colosal e innegable. Con fuerza, coraje y compromiso, vamos a sacar nuestra Nación adelante y arrollar al kirchnerismo en las urnas”, expresaron Bullrich y López Murphy en un pronunciamiento consensuado.

Lanzada en la carrera presidencial, Bullrich acelera la construcción de su figura nacional y recluta aliados para la disputa interna con Horacio Rodríguez Larreta, su principal competidor en Juntos por el Cambio. Por un lado, estrecha lazos con un sector de la UCR que no comulga con Gerardo Morales, socio estratégico del jefe porteño, en el que orbitan Alfredo Cornejo, Gustavo Valdés, Facundo Manes, Luis Naidenoff o Carolina Losada, entre otros. Allí también estuvo Emilio Monzó. De esa forma, los armadores de la exministra buscan darle mayor volumen político a su figura. Bullrich repite que pretende conformar un gobierno de coalición en caso de llegar al poder. A la vez, la exfuncionaria de Macri explora una alianza con López Murphy, a quien también buscaba seducir Larreta.

Cerca del exministro de Economía y Defensa aclaran que el acuerdo no implica un apoyo a la candidatura presidencial de Bullrich. Y en la tropa de la titular de Pro señalan que mantiene su apoyo a Jorge Macri en la Ciudad. Pero está claro que se trata de un movimiento inicial con el objetivo de converger. “Hay afinidad ideológica y tienen un recorrido común”, apuntan allegados al “bulldog”. De hecho, ambos integraron el gobierno de la Alianza, que encabezó Fernando de la Rúa.

Está previsto que los colaboradores de Bullrich y López Murphy confluyan en distintas áreas, como Economía, Energía y Relaciones Exteriores. La primera reunión de equipos técnicos podría producirse dentro de diez días. El grupo de asesores que trabaja en el plan de Bullrich está encabezado por Alberto Föhrig. “La idea es unificar criterios”, aseguran en el entorno de la exministra.

Hasta hace un par de semanas, López Murphy reclamaba reglas de juego claras en Juntos por el Cambio para definir las candidaturas. Atento al escenario electoral, el líder de Republicanos Unidos no descartaba ser postularse a presidente ni anotarse en la pulseada por la sucesión de Larreta en la Ciudad. Sin embargo, ya decidió que no está interesado en la compulsa nacional. Evalúa sus posibilidades de disputar la jefatura porteña.

Frente al creciente deterioro económico y social, López Murphy machaca con que Juntos por el Cambio debe fijar un programa y construir una narrativa, que “tiene que ser esperanzadora, porque hay circunstancias muy favorables para la Argentina”. En paralelo, el economista repite que la principal coalición opositora debe “fijar las reglas” para aclarar cómo se vincularán las candidaturas de los distintos partidos que integran el frente.

Larreta fue quien selló su incorporación a JxC en las legislativas de 2021, cuando López Murphy compitió en la interna del oficialismo porteño con María Eugenia Vidal y el radical Adolfo Rubinstein. Así, logró acceder a una banca en el Congreso. El jefe porteño lo había sumado con la idea de contener la oferta liberal y evitar una ola de votos de Javier Milei (La Libertad Avanza).

En el bullrichismo sospechaban que Larreta fomentaba ahora la candidatura presidencial de López Murphy para quitarle adhesiones a Bullrich en la interna. Por el contrario, al jefe porteño le inquieta que Manes sostenga sus deseos de participar en las PASO de JxC. Le hizo llegar al médico que sus mensajes antigrieta y perfil socialdemócrata podrían solaparse durante la campaña y restarle chances al ala moderada de la fuerza en las primarias.

López Murphy y Bullrich se juntaron esta tarde para cerrar el pacto electoral en el Hotel Palladio, ubicado en la Avenida Callao. Hablaron de la “delicada” situación económica y de la seguridad, dos ejes en los que tienen un diagnóstico similar. El diputado insistió en que Sergio Massa está armando una “bomba” económica y financiera y que el próximo gobierno deberá tomar decisiones drásticas desde el día uno. Para el líder de Republicanos Unidos, una eventual administración de JxC tendrá que estabilizar la situación macroeconómica, relanzar el crecimiento, y crear cambios estructurales que faciliten la inversión y el empleo privado.

También participaron de la cumbre Alejandro Bongiovanni, jefe de campaña del exministro, y dos laderos de la titular de Pro: Damián Arabia y Juan Curutchet. Federico Angelini, otro alfil de Macri, a cargo del armado nacional de Bullrich, fue uno de los encargados de tender puentes para lograr una mayor sinergia.

“Ver a estos dos grandes trabajando juntos, y estar rodeado de buenos amigos, amantes de la libertad”, señaló Arabia, secretario general de Pro. Ayer, Bullrich había anunciado un acuerdo con el Partido Demórcrata Progresista, que lidera Oscar Moscariello.

Apuntalada por Macri, que nutrió de alfiles a sus equipos, Bullrich logró equilibrar la pelea con Larreta, quien tiene la ventaja de manejar la administración porteña y basa su esperanza en Buenos Aires. Su desafío es seducir al resto de los socios de JxC, ya que Martín Lousteau o Elisa Carrió rechazan sus recetas y tienen más sintonía con el modelo dialoguista y de centro de Larreta. De hecho, la líder de la CC lanzó su candidatura presidencial en una jugada coordinada con el jefe porteño. En Pro hay quienes creen que Carrió podría quitarle espacio o votos a Bullrich. Morales también simpatiza más con las ideas del alcalde, pero mantiene un buen vínculo con la titular de Pro. El socio más cercano de Bullrich en JxC es Cornejo, quien tuvo que volver a Mendoza y se bajó de la contienda nacional ante el desafío de Omar De Marchi, exconsejero de Larreta.

Tras la cumbre con Macri en Cumelén, promovió a Hernán Lombardi, uno de los colaboradores del expresidente en el llano, a su nuevo comité de campaña. También designó a Angelini, otro alfil de Macri, como armador en el interior y Sebastián García De Luca, ladero de Monzó, le encargó la estrategia en la provincia de Buenos Aires.

Confiada en sus encuestas y conforme con su instalación, se alista para los “100 metros finales”. La próxima semana viajará a los Estados Unidos.

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