Patricia Bullrich rechazó las quejas de los gobernadores por el ajuste que pidió Milei y reclamó una “reacción” ciudadana

Patricia Bullrich intenta ganar peso político en el Gobierno y posicionarse como un escudo de Javier Milei ante las críticas de la oposición. Es que, pocas horas después de que concurriera a una nueva reunión de la mesa de discusión política en la Casa Rosada, la ministra de Seguridad salió a objetar las quejas de los gobernadores por el pedido de ajuste a las provincias que hizo el Presidente durante una inédita presentación de su presupuesto 2025 en el Congreso.

Durante su participación en el tradicional almuerzo del Club del Petróleo, que aglutina a los principales empresarios del sector de hidrocarburos, Bullrich les pidió a los mandatarios provinciales que hagan un “esfuerzo” para “achicar” el tamaño del Estado en sus distritos y recorten el empleo público. También arremetió contra los legisladores opositores que impulsaron leyes que, según la visión de Milei, ponen en riesgo el equilibrio fiscal. “Acá hay una realidad: esto es como un drogadicto, que siempre cree que no puede salir de consumir ni cambiar el chip de la cabeza. Con más estructura y más gasto, no se soluciona nada”, expresó.

Luego de que desmenuzara las medidas que aplicó para combatir los bloqueos en sectores productivos, polos industriales y mineros, la ministra de Milei puso la mira en los gobernadores que criticaron el pedido de ajuste de Milei. Sugirió que “algunos” caciques provinciales presumen tener las cuentas ordenadas en sus distritos, pero ostentan una alta dotación de empleados estatales que supera a las personas registradas en el sector privado. “Si tenés 80% de empleados públicos…No estás en déficit, pero no sos una provincia, sino una caja registradora que no tiene ningún tipo de producción y está subsidiada por las provincias que tienen más producción”, lanzó Bullrich.

En ese sentido, los instó a tener “un Estado adecuado”, y generar “más producción privada que empleo público”. “Hay que discutir más a fondo qué tipo de Estado necesitan para la provincia, cuánto empleado público por habitante”, insistió.

El domingo, el jefe del Estado prometió “blindar el equilibrio fiscal sin importar el escenario económico” y les pidió a los gobernadores que hagan recortes por US$60.000 millones. Los dichos de Milei generaron un fuerte malestar, sobre todo, en los mandatarios que se enrolan en el universo de la oposición dialoguista. Es decir, aquellos que cooperaron con Milei para que lograra aprobar la Ley Bases y el paquete fiscal y ahora exigen respuestas del Ejecutivo a sus reclamos sobre el reparto de recursos, como la deuda de la Anses con las cajas previsionales, o el traspaso de las obras que quedaron inconclusas en las provincias. Ayer, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, relativizaron la cifra que dio del Presidente para calmar los ánimos en la antesala de la discusión legislativa por el presupuesto.

En ese contexto, la funcionaria de Milei ratificó que el objetivo del Gobierno es que las provincias ejecuten una poda por US$60.000 millones, aunque no aclaró si el Presidente espera que los gobernadores lo hagan durante el próximo año. “Tienen que bajar diez puntos del producto [bruto interno]; el Estado nacional ha bajado 12 puntos. ¿Se puede bajar más? Sí, pero otra parte la tienen que bajar las provincias”, resaltó Bullrich.

Con críticas a la oposición por impulsar la ley de movilidad jubilatoria, que fue vetada por Milei, o el aumento de fondos para las universidades nacional, que fue sancionada por el Senado el viernes y será rechazada por el Ejecutivo, Bullrich reiteró que el Gobierno no se moverá de su “regla de oro” de intentar blindar el equilibrio fiscal.

“La idea es que se ordene la política, los empresarios y los sindicatos. Y todos, por las buenas o por las malas; nosotros de este camino no nos movemos”, enfatizó ante los empresarios petroleros que concurrieron al Hotel Libertador, búnker de Milei durante la campaña. Entre los asistentes estaba el diputado nacional Pablo Cervi, de Neuquén, uno de los radicales que cambiaron su voto para defender el veto de Milei a la ley de movilidad jubilatoria. La ministra siguió con cierta estupefacción el revuelo que provocó en la UCR la actitud de los diputados conversos y el pedido de sanciones que motorizan el sector de Martín Lousteau y Facundo Manes, aunque celebró las expresiones de rechazo de distintos sectores de Pro y el radicalismo.

Críticas a la oposición

Los empresarios no ocultaban su inquietud por la debilidad parlamentaria de La Libertad Avanza, después de que Milei atravesara semanas complicadas que volvieron a abrir interrogantes sobre la gobernabilidad. Bullrich admitió que “trabajar en minoría” en el Congreso “genera dificultades muy serias”, tanto para aprobar las leyes como para bloquear los intentos de “romper el modelo central” de Milei: el déficit cero. “Llevamos dos leyes con las que intentan sacarnos del déficit cero. Estamos a punto de poner una regla bien clara es que si querés financiamiento universitario, explícame de dónde vas a sacar el dinero. ¿Qué bajan? ¿Planes sociales? ¿Educación primaria? ¿De dónde vas a sacar la plata?”, reprochó.

A lo largo de la conversación con los petroleros, Bullrich machacó con que las provincias deben hacer un esfuerzo. “¿Qué pasa con gran parte de la política? No quiere esas restricciones. Entonces, va a endeudarse y emitir moneda”, sostuvo.

Luego, la ministra de Seguridad dijo que “los empresarios y la ciudadanía tienen que reaccionar” y presionar a la política para que reduzca los gastos o la carga tributaria.

En ese tramo de su presentación, Bullrich criticó directamente al titular de la Unión Industrial Argentina (UIA), Daniel Funes de Rioja. “La UIA dice ‘nosotros estamos bien con los convenios que teníamos con los sindicatos’. ¿Entonces? Cada vez que vas a una reunión con empresarios, dicen que no pueden pagar las indemnizaciones porque son un robo”. La funcionaria recordó que la ley Bases incluye el nuevo fondo de cese laboral. “¿Cuántos van a empezar a utilizar el sistema de fondo de cese? Tomen esa libertad y empecemos todos a trabajar”, aseguró.

Bullrich se presentó ante las autoridades del Club del Petróleo y el titular de YPF, Horacio Marín. También asistieron, entre otros, Ricardo Markous; de Tecpetrol; Julián Escuder; de Pluspetrol; Tomas Hess; de CEOPE, Gabriela Aguilar; de Excelerate, y Matías Szapiro; de ExxonMobil.

Tensión por bloqueos en Vaca Muerta

Ante un auditorio repleto de CEOs petroleros, la ministra de Seguridad confirmó su enfrentamiento con el gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, por el abordaje de los bloqueos que realizan desde el lunes integrantes de la comunidad mapuche en puntos estratégicos de Vaca Muerta.

Después de explicar la puesta en marcha del “comando unificado de seguridad productivo”, Bullrich advirtió que está dispuesta a enviar a la gendarmería si el gobernador Figueroa no avanza con el desalojo de los manifestantes, que impiden en paso en plantas ambientales donde se realizan tratamientos de residuos petroleros en los alrededores de Añelo. “Hace dos días estamos hablando con el gobernador y nos dicen: denme quince o veinte minutos más. Así hace dos días. Y hoy dije basta, le mando la gendarmería y se terminó”, anunció Bullrich, quien anticipó que planean colocar un destacamento de gendarmería en Fernández Oro, en Río Negro, para 300 efectivos y un sub-destacamento en Añelo.

Esta noche, Bullrich tenía previsto participar del asado que organizó el Presidente para agasajar a los 87 diputados que le permitieron blindar el veto a la ley de movilidad jubilatoria.

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