Patricia Bullrich mueve en Buenos Aires: recluta a un intendente clave de Juntos y agita la interna con Larreta

Después del alivio que le generó el renunciamiento de Mauricio Macri, la titular de Pro, Patricia Bullrich, enfrenta ahora un desafío mayor y una nueva prueba a su liderazgo: necesita fortalecer la articulación de su proyecto presidencial en la provincia de Buenos Aires con miras a la interna con Horacio Rodríguez Larreta. Cuando faltan tres meses para el cierre del plazo legal para la inscripción de listas, el distrito más influyente del país, la fortaleza electoral de Cristina Kirchner, se convirtió en el principal campo de batalla de la pulseada de poder entre Bullrich y Larreta por el liderazgo de Pro.

Desde que se anotó en la carrera presidencial, Bullrich redobla esfuerzos para mejorar su posicionamiento en el conurbano bonaerense. Sabe que allí se define la elección nacional y que es el único territorio donde Larreta, su rival en la interna de Pro, le saca un margen de ventaja, según los sondeos que manejan en ambos campamentos. Necesita una base sólida de adhesiones donde sus consignas son reactivas para los simpatizantes del kirchnerismo.

Con el objetivo de edificar una estructura en la provincia de Buenos Aires, que concentra cerca del 40% del padrón nacional, Bullrich recluta aliados desde hace meses. Sabe que cuenta con menos recursos que Larreta para construir poder territorial. Hoy hizo un nuevo movimiento: confirmó que cerró un acuerdo con el intendente de San Nicolás, Manuel Passaglia, cabecera de la segunda sección electoral. Se trata de un dirigente de extracción peronista que mantenía una posición neutral, ante el tironeo de Larreta y Bullrich para sumarlo a sus tropas. Tuvo un alto perfil desde que se enfrentó a Sergio Berni ante las cámaras por la entrega de patrulleros para la policía local o por su pelea con Hugo Moyano, líder de Camioneros, por los bloqueos en San Nicolás. Hace poco, Passaglia había sido destacado por Macri por su decisión de sacar el Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA), la obra social de los trabajadores estatales de la provincia, de su municipio.

Passaglia es la primera incorporación que cierra Bullrich en el territorio bonaerense de cara a la interna. Su acercamiento a la escudería bullrichista fue gestionado por Sebastián García de Luca, uno de los hombres de confianza de Emilio Monzó, a quien la exministra designó como armador en Buenos Aires. De Luca tiene llegada a Manuel y su hermano, Santiago Passaglia, diputado provincial. Ambos son hijos de Ismael Passaglia, exintendente de San Nicolás y exfuncionario de Felipe Solá, que llegó al municipio de la mano del Frente Social, una colectora del peronismo, en 2011. Tras la derrota del kirchnerismo en 2015, los Passaglia se aproximaron al Pro y se alinearon al gobierno de María Eugenia Vidal.

De esta forma, Bullrich sumará voceros para su proyecto presidencial en Buenos Aires. Y comienza a ganar peso territorial en el interior. Néstor Grindetti (Lanús) es su socio clave en la tercera sección. Y Larreta ya se aseguró a Diego Valenzuela (Tres de Febrero) o Ezequiel Galli (Olavarría), quien anunció hoy que buscará un tercer mandato, entre otros.

La pelea con Santilli

De cara a las PASO del 13 de agosto, Bullrich deberá revisar su estrategia en Buenos Aires. Por ahora, mantiene en el campo bonaerense a tres candidatos propios a gobernador para contrarrestar el armado territorial de Larreta, su principal adversario en JxC, cuyo postulante en el distrito es Diego Santilli, exvicejefe porteño.

Santilli se anotó en la pelea por la sucesión de Axel Kicillof desde que ganó por un punto las elecciones legislativas de 2021frente al peronismo unido. Después de que Macri anunciara que no volverá a disputar la Presidencia, a Bullrich se le despeja el camino para unificar su oferta en el territorio bonaerense, donde impulsa las candidaturas de Grindetti, Joaquín de la Torre y Javier Iguacel. La titular de Pro sabe que la decisión de ungir a uno de los tres corre por cuenta de ella pero estira la definición. En su equipo estiman que deberá cerrarlo en las próximas semanas.

Entre los armadores de la exministra se impone la idea de que Bullrich debe definir en abril para arrancar la campaña y unificar fuerzas en la disputa con Santilli, quien se mantiene en la cima de las preferencias en los sondeos. “No es algo planificado, la decisión no está madura”, admiten.

Pero Bullrich también espera por la decisión de María Eugenia Vidal, quien ratificó que intentará pelear por la candidatura presidencial de Pro y mantiene como postulante a gobernador bonaerense a Cristian Ritondo, exministro de Seguridad. Si Vidal no compite, Ritondo se quedaría sin candidata a presidente, pero podría aproximarse al campamento de Bullrich. ¿Macri influirá en esa decisión?

El jueves, la exministra visitó al expresidente en sus oficinas de Olivos. Uno de los temas centrales de la conversación fue el armado en la provincia: coincidieron en que el Pro debe reducir la oferta para no generar confusión en el electorado. Es difícil que Santilli logre imponerse como candidato único por su identificación con el proyecto de Larreta.

Durante los últimos días, Bullrich desembarcó dos veces en el conurbano. El jueves fue a La Matanza, bastión del PJ, escoltada por De la Torre, Iguacel y Grindetti. Y hoy estará en San Martín. “Me encantaría competir contra Cristina, no tengo dudas de que gano”, expresó en diálogo con el canal Todo Noticias antes de arribar al distrito gobernador por Fernando Espinoza. Allí JxC no logra hacer pie, pese a la fractura del peronismo. La grilla de la coalición opositora en La Matanza luce poblada. Los aspirantes tienen distintas terminales: Héctor “Toty” Flores (CC), Alejandro Finochiaro (Pro), cercano a Cristian Ritondo, Lalo Creus y Josefina Mendoza (Evolución Radical).

Bullrich luce confiada tras la retirada de Macri. Necesitaba que el expresidente confirme su renunciamiento para que le despeje el camino. Ahora la pelea es casi mano a mano con Larreta, ya que Vidal aún no se lanzó de manera oficial –esperará hasta fines de abril- y tanto Gerardo Morales como Facundo Manes aparecen lejos de la pole position de JxC.

Con ese trasfondo, De Luca avanza con acuerdos para reclutar aliados en los distritos más poblados: sumó candidatos al bullrichismo en Florencio Varela, Berazategui, Presidente Perón, Magdalena y Ensenada. Ya armaron escuderías propias en 40 localidades. En La Plata Bullrich promueve a Juan Pablo Allan, en San Isidro, a Ramón Lanús; en Tigre, a Nicolás Massot. Este viernes incorporó al exfiscal bonaerense Marcelo Romero, quien colaborará con los equipos de Allan en seguridad. E inició con sigilo una conversación con Claudia Rucci, quien se alejó de la fuerza de Miguel Pichetto.

En el comando de campaña de Bullrich miran con detenimiento los movimientos de los intendentes de Pro que reclaman boleta única en la categoría municipal para evitar que la interna entre la exministra y Larreta ponga en riesgo el control de sus terruños. Ante todo, celebran los pedidos de Julio Garro (La Plata), Héctor Gay (Bahía Blanca) y Pablo Petrecca (Junín) para unificar la oferta de Pro. Lo consideran una señal de que Bullrich es más competitiva que Larreta en esos distritos.

Bullrich desconfía de los que ya se jugaron con el proyecto del larretismo y quiere poner alfiles propios que le garanticen que le cuidarán la boleta el día de las PASO. Negociaría con quienes muestran neutralidad. Según los números que maneja su equipo, supera a Larreta en el interior pero debe recuperar casilleros en la tercera sección del conurbano. “El desafío es consolidar lo propio”, afirman.

Tras la cumbre de referentes de Pro con Mauricio Macri, un grupo de dirigentes cercanos a Santilli y Larreta alertaron que el expresidente había pedido el esquema de “Y”, es decir, con un solo candidato a gobernador de Pro. De inmediato, Ritondo salió a aclarar que Macri había pedido la “V”, que implica una competencia en el tramo presidencial y en la categoría de gobernador. Lo cierto es que Bullrich y los suyos descartan la chance de no llevar un candidato a gobernador propio y apoyar a Santilli, la apuesta de Larreta. De hecho, la exministra no lo mencionó en la entrevista del miércoles en TN a la hora de enumerar los candidatos.

Un dato curioso de la nueva dinámica de Pro: después de la reunión entre Macri y los intendentes, el expresidente designó a Ritondo como vocero del encuentro. “Si Mauricio quiere un candidato de Pro en la Ciudad, ¿por qué querría dos en Buenos Aires?”, plantean desde el larretismo. Santilli machaca con que la provincia volverá a ser la “madre de todas las batallas” por lo que JxC debe aunar fuerzas e incorporar sectores para enfrentar al peronismo. Mira con inquietud el crecimiento de Javier Milei (La Libertad Avanza). Es que la elección bonaerense se gana por un voto en la general, dado el sistema de una vuelta. Una buena performance del libertario en ese distrito favorecería las chances del kirchnerismo de retener la provincia.

Bullrich desconfía de esa jugada. Sigue con atención a los radicales que responden a Maximiliano Abad: pretende confluir con un sector de la UCR tanto a nivel nacional como provincial.

Mientras Bullrich se rearma en Buenos Aires, Santilli insiste en incorporar a José Luis Espert a JxC, quien pidió conformar un gran frente opositor al kirchnerismo. Y sumó un nuevo respaldo de Miguel Ángel Pichetto, quien salió a pedir que Ritondo y los tres postulantes de Bullrich bajen sus candidaturas para unificar la oferta en la figura de Santilli, porque es “el que más mide” en las encuestas. Ritondo y los suyos salieron a cruzarlo.

“Pichetto, tu pasado K te lleva a ser de la misma manera que ellos. Por algo fuiste parte de los K. Autoritario y prepotente. Anda Pa’ allá”, dijo Roberto Quattromano, subsecretario de Articulación y Fortalecimiento de Gestión de la Ciudad, cercano a Ritondo.

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