Otra jornada de protesta: ollas populares y movilización de organizaciones sociales “contra el ajuste” y el DNU de Javier Milei
Más de diez movimientos y agrupaciones polítcas y sociales, que no formaron parte de la convocatoria del miércoles, concentraron en el Obelisco en reclamo de alimentos y en rechazo al decreto; no hubo cortes de calle y tuvo réplicas en distintos puntos del país
- 5 minutos de lectura'
Dos días después de la primera gran movilización contra el gobierno, organizaciones y movimientos políticos y sociales volvieron a protestar hoy en el centro porteño contra el “ajuste”, en reclamo por alimentos para los comedores y en rechazo al DNU que el presidente Javier Milei dictó anteayer. Hubo manifestaciones similares en distintos puntos del país.
Con ollas populares pero sin cortes de calle, un nutrido número de movimientos que por cuestiones de “forma” y de “perfil” no formaron parte de la manifestación del miércoles en Plaza de Mayo comenzó a desembarcar desde temprano en el Obelisco, en una movilización que fue calificada como ”amplia” pero “pequeña” por distintos dirigentes.
A su vez el Polo Obrero, con Eduardo Belliboni a la cabeza, protestó con la misma metodología -ollas vacías- frente al Ministerio de Desarrollo Social y exigió con éxito una audiencia con Sandra Pettovello, la titular de la nueva cartera de Capital Humano. “Después de dos horas de espera en las puertas del ministerio, ingresamos a renovar el pedido de reunión con la ministra”, anunció el dirigente del Polo Obrero.
La protesta, que se extendió por más de dos horas, concluyó con una conferencia de prensa en la cual los referentes de los distintos espacios se turnaron frente a micrófono para, entre reclamos y anuncios, expresar con contundencia su rechazo al DNU dictado por Milei.
“Queremos hacerle llegar un fuerte saludo a las más de mil ollas populares que se están organizando a lo largo y ancho del país”, sostuvo Alejandro Gramajo, recientemente elegido como secretario general de la Unión de los Trabajadores de la Economía Popular (UTEP). “El gobierno actual ha tomado medidas que demuestran que han hecho una estafa electoral, [....] porque han prometido en campaña que el ajuste lo iba a pagar la casta y los empresarios prebendarios”, afirmó Gramajo para luego añadir: “Este ajuste brutal está recayendo sobre la espalda del conjunto del pueblo argentino”.
Como lo harían luego otros referentes, Gramajo, el primero en tomar la palabra, apuntó en duros términos contra el DNU. “Es absolutamente inconstitucional. Desmantela toda la estructura productiva, económica y social de la Argentina. Han construido una ingeniería solamente para beneficiar al poder económico concentrado, cagándose en todo el pueblo argentina”, dijo, en el tramo más duro de su discurso. “El próximo miércoles nos estaremos concentrando para impedir que avance un DNU que es absolutamente inconstitucional”, agregó en referencia a la convocatoria de la CGT.
En una línea similar se expresó Marianela Navarro, referente del Frente de las Organizaciones en Lucha (FOL). “Nos liquidaron el salario en 24 horas. Y además empujaron a unos cuantos trabajadores por debajo de la línea de pobreza”, dijo con respecto a la devaluación anunciada por el ministro de Economía, Luis Caputo, otro de los blancos de la jornada. “El DNU es una bomba atómica en el corazón de la Argentina”, agregó Navarro para sentenciar: “El DNU no pasará”.
Por su parte, la dirigente nacional de Libres del Sur, Silvia Saravia, en un tono más moderado, describió: “Acaban de presentar un DNU antinacional porque permite que se vengan a comprar nuestras tierras de manera indiscriminada. Viene por una serie de derechos y contra la industrialización de nuestro país”. Saravia, que como los otros referentes no participó de la movilización del miércoles, aseveró: “Estamos en la vereda de enfrente de Milei”.
“La casta terminamos siendo nosotros. De un día para el otro el Gobierno decidió que la plata de los trabajadores valga un 120% menos. Y con las medidas del DNU nos sentencia casi a la desaparición”, graficó Juan Pablo Noselli, referente del Movimiento de Trabajadores Desocupados (MTD), otra de las agrupaciones presentes esta mañana en el obelisco.
“La política de ajuste que ha realizado el Gobierno no ha recaído sobre la casta política ni los empresarios prebendarios”, dijo a LA NACION, Alejandro Gramajo de la UTEP, uno de cuyos referentes es el exprecandidato a la presidencia Juan Grabois (UP), ausente en la protesta de hoy. “Esto lo único que hizo fue agravar la situación social que ya teníamos, que ya era una situación dificultosa. Esto lo ha acelerado y nos alarma porque ya hay familias que no están pudiendo comer”, agregó.
La movilización se gestó el martes en un conclave que reunió a los distintas organizaciones que disentían con la idea de manifestarse contra el gobierno el miércoles en Plaza de Mayo, una movilización que fue impulsada por el Frente de Unidad Piquetera (que hoy se concentra en el Ministerio de Desarrollo Social), el Movimiento Socialista de Trabajadores (MST) y la Coordinadora por el Cambio Social, que sin ser parte de la movilización de hoy, pasó por el Obelisco a “saludar” a las distintas organizaciones.
En diálogo con LA NACION, Saravia sostuvo: “Estamos llevando adelante una jornada nacional en cientos de plazas que plantea que el ajuste lo está pagando el pueblo. La anunciada asistencia a los caídos no está llegando y el ajuste nos va a pegar a todos”. En referencia al DNU, agregó: “Le puso el cartel de remate a la Argentina, permitiendo que los grupos más poderosos tengan un montón de beneficios, más aún de los que tuvieron con el gobierno de Alberto Fernández”.
Temas
Otras noticias de Actualidad política
- 1
El Colegio de Abogados de la Ciudad repudió la fiesta del fiscal Ramiro González
- 2
Alarma en la Corte Suprema. La Justicia investiga una serie de llamados a comisarias de alguien que se hace pasar por Horacio Rosatti
- 3
La Justicia dispuso el desalojo de la ocupación ilegal en el Parque Nacional Los Alerces
- 4
Elisa Carrió pidió indagar a Sergio Berni acusado de contaminar la escena del crimen de Nisman