Organizaciones de izquierda marcharon a Plaza de Mayo en contra del pago de la deuda externa

Al igual que la semana pasada, la Plaza de Mayo volvió a ser hoy escenario de una marcha protagonizada por movimientos sociales. Esta vez, sin embargo, fue el turno de las organizaciones de izquierda nucleadas en la Unidad Piquetera, espacio opositor al Gobierno que, desde poco antes del mediodía, concentró en distintos puntos de la Avenida 9 de Julio para manifestarse en contra del acuerdo que el oficialismo pretende alcanzar con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Bajo la consigna “No al pago de la deuda externa, basta de ajuste”, las agrupaciones piqueteras, entre ellas el Polo Obrero, el FOL, Barrios de Pie-Libres del Sur y el MST Teresa Vive, recorrieron el centro porteño para reclamar por “trabajo genuino” y que ningún trabajador cobre por debajo de los 75.000 pesos, el precio por el que rondaría la canasta básica familiar. Asimismo, pidieron por el aguinaldo completo para los beneficiarios del programa Potenciar Trabajo y “asistencia integral” para los comedores.

Según pudo constatar LA NACION, la movilización provocó un colapso del tránsito en todo el recorrido de la Avenida de Mayo y sus inmediaciones. Durante el acto, que comenzó a las 14 y se extendió alrededor de una hora, se hizo mención especial al “plan plurianual” que Alberto Fernández pretende mandar en las próximas semanas al Congreso y que, en palabras de los manifestantes, el oficialismo “busca acordar y votar con toda la oposición para prefigurar el plan económico y el pago al FMI”.

“Denunciamos que cualquier pacto en ese sentido, entre todos los partidos políticos, es una traición al pueblo trabajador porque implica necesariamente mayores niveles de ajuste, de hambre, de flexibilización laboral, de desocupación”, señaló, en diálogo con LA NACION, la dirigente social Damaris Rolón, del Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), quien además precisó que “cualquier movimiento en el sentido de reconocer una deuda ilegítima y fraudulenta es reconocer una estafa, por eso decimos que las estafas no se pagan y la deuda es con el pueblo”.

En esa línea, Rolón aseguró que la movilización pretendió “alertar al gobierno nacional y al Ministerio de Desarrollo Social” de que “vamos a luchar todo lo que sea necesario por el aguinaldo correspondiente para toda la clase trabajadora, y en particular para nuestro sector, junto a la asistencia integral a todos nuestros centros comunitarios”. Según la dirigente, los comedores están “explotadísimos de gente”, “una situación que venimos denunciando todo el año y no vemos realmente respuestas efectivas”.

Por su parte, Silvia Saravia, coordinadora nacional de Barrios de Pie-Libres del Sur, sostuvo que el Gobierno debería “tomar nota” y prestar mayor atención a las dificultades que traería un acuerdo con el FMI ya que eso traería aparejado “una mayor profundización de la situación de pobreza o de falta de trabajo”.

“A pesar de lo que se plantea, que si no se sigue lo que dice el Fondo no se va a salir adelante, nuestra experiencia indica que sus recetas no ayudan al desarrollo industrial de los países. Solo les interesa que cierren las cuentas para que esa deuda se pague”, concluyó la dirigente.

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