Ordenan el procesamiento, embargo y prisión preventiva del juez Walter Bento
Está acusado de liderar una asociación ilícita que cobraba coimas a cambio de beneficios a presos; es el magistrado tiene competencia electoral
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MENDOZA.- La situación judicial de Walter Bento, el magistrado federal mendocino con competencia electoral, acusado de comandar una asociación ilícita que beneficiaba a presos tras el pago de coimas, se complica con el correr de las días. En las últimas horas, Eduardo Puigdéngolas, el juez federal que lo investiga, ordenó el procesamiento, embargo y prisión preventiva del funcionario judicial imputado.
Así las cosas, se le trabó embargo por casi 180 millones de pesos, mientras que la misma medida corrió para su esposa, Marta Isabel Boiza, por casi 150 millones de pesos, luego de una inhibición patrimonial que había dictado la Justicia federal cuando se destapó el caso. Por eso, ahora, según fuente de la causa, se abre la posibilidad de que los bienes del matrimonio puedan ser decomisados, siempre y cuando avance la investigación en su contra.
“Todo vuelve ahora a la fiscalía que tiene la delegación de la investigación. Nuevamente, el fiscal Dante Vega continuará la instrucción. Vuelve para continuar con medidas de prueba. Oportunamente, cumplido todo, de considerarlo el fiscal, se define la elevación a juicio o el sobreseimiento”, indicó a LA NACION una alta fuente de la Justicia federal. Tal como contó este diario, las definiciones comenzarían a llegar tras la feria judicial.
Vale recordar que Bento posee fueros, por lo que la orden de prisión domiciliaria efectiva quedará en stand by. Por tal motivo, se esperan definiciones en el Consejo de la Magistratura, sobre todo por la proximidad de los comicios legislativos, teniendo en cuenta que Bento es el juez con competencia electoral que se encarga de todo el proceso en la provincia cuyana. De todas formas, los plazos de ese organismo de control de los magistrados son extensos por lo que se espera que tome una participación más activa en las definiciones, para al menos determinar su apartamiento.
“Esto depende del consejo: de existir un juzgamiento y una posible destitución. Eso sí, pueden suspenderlo pero sigue manteniendo fueros”, aclaró la fuente consultada.
“Arrepentidos falsos”
Walter Bento, titular del juzgado federal Nº1 de Mendoza, está imputado como jefe de una asociación ilícita y cohecho, además de enriquecimiento ilícito y lavado de activos, entre otros delitos. En su declaración indagatoria de varios días ante el juez, Bento se encargó de rechazar todos los cargos en su contra. “Negué completamente los hechos y brindé explicaciones. Señalé que no conozco a la mayoría de las personas imputadas, me agravié de la detención de abogados del fuero de los cuales el fiscal solo busca conseguir arrepentidos falsos”, indicó el magistrado durante su exposición frente a Puigdéngolas.
Bento asegura que no está probada “la entrega de dinero” al tiempo que consideró una “injusticia” que hayan detenido a abogados “por delitos que son excarcelables”, aunque en la causa ya hay letrados y contrabandistas arrepentidos. También dio explicaciones sobre los beneficios que le otorgó a varios reos.
En la causa se registran siete hechos de coimas y se pone de relieve el incremento patrimonial del magistrado. El magistrado está acusado de haber operado con un grupo de abogados -algunos, que ya declararon como arrepentidos- y de haber tenido como nexo para otorgar los beneficios al exdespachante de aduanas Diego Aliaga, asesinado a mediados del año pasado.
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