Nodio: la defensora del Público Miriam Lewin fue sobreseída por la jueza María Eugenia Capuchetti
Había sido denunciada por diputados de Juntos por el Cambio y el fiscal Carlos Stornelli había pedido su indagatoria, pero para la jueza no hubo delito en la creación del Observatorio de la desinformación y la violencia simbólica en medios
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La jueza federal María Eugenia Capuchetti sobreseyó la titular de la Defensoría del Público, Miriam Lewin, de la causa por la creación del Observatorio de la Desinformación y la Violencia Simbólica en Medios y Plataformas Digitales (Nodio), por “inexistencia de delito”.
Lewin había sido denunciada en octubre del año pasado por diputados de Juntos por el Cambio que señalaron que la creación de Nodio vulneraba el derecho a la libertad de prensa, y el fiscal Carlos Stornelli había pedido su indagatoria a través de un duro requerimiento de instrucción, una medida que la jueza Capuchetti rechazó. Según los denunciantes, Nodio iba a cumplir la función de “comisaria del pensamiento”.
“Ni de la argumentación fiscal en su requerimiento de instrucción ni de un análisis prudente de los hechos puede sostenerse mínimamente que de las principales funciones proyectadas para el Nodio, en particular aquellas que se orientan al análisis a partir de muestras de noticias falsas y/o maliciosas previamente difundidas en los espacios nacionales especializados, se extraiga de allí per se una conducta punible y menos aún subsumible en algunos de los tipos penales a los que hace referencia en su dictamen”, escribió la jueza federal, en referencia a la presentación de Stornelli, que había considerado que Lewin debía ser citada a declarar como acusada.
Capuchetti sostuvo además que Nodio todavía no comenzó a funcionar: “Aun para el caso de ser cierta la hipótesis del Ministerio Público Fiscal, (...) en el peor de los supuestos esos cargos conjeturales siempre se habrían mantenido dentro del espacio de los actos preparatorios, y de ningún modo podrían haber alcanzado lo que en Derecho Penal se conoce como el “comienzo de ejecución” de un delito, pues como se ha visto el organismo denominado “NODIO” aún no ha sido puesto en funcionamiento y por ende, los supuestos actos delictivos mencionados por el fiscal solo podrían ser admisibles en el caso que efectivamente el observatorio se encuentre en funcionamiento”.
“La situación actual -consideró Capuchetti- se da en el marco de un contexto sumamente complejo en los medios de comunicación y sobre todo en las redes sociales, donde colisionan permanentemente la libertad de expresión e información con fenómenos y prácticas que son sumamente peligrosas, que abarcan desde la difusión de contenidos manifiestamente ilícitos hasta la proliferación de noticias falsas (comunmente denominadas fake news)”.
Bajo la órbita de la Defensoría del Público, el observatorio, cuya creación generó fuertes críticas, tenía como tarea declarada “proteger” a las personas mediante la “detección, verificación, identificación y desarticulación de las estrategias argumentativas de noticias maliciosas y la identificación de sus operaciones de difusión”.
La denuncia lleva la firma de una decena de diputados de Juntos por el Cambio; entre ellos, Fernando Iglesias, Waldo Wolff (Pro) y Graciela Ocaña (Confianza Pública).